Parte 36

19.6K 1.5K 515
                                    

JADE

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

JADE

Justo cuando estoy saliendo del baño, el móvil vibra en mi bolsillo.

Ya te echo de menos.

Te quiero.

Tiro el móvil a la cama. Será sinvergüenza.

Gimoteo. Ojalá pudiera odiarlo aunque fuese un poco.

—Churri ¿pero has escuchado siquiera lo que te ha dicho?

Será traidora...

—¿Ahora estás de su parte? —señalo la puerta y abro la boca.

—Sabes que nunca he estado de su parte. Pero al César lo que es del César... si Sofía lo drogó él no podía hacer nada. Cuando consumes cosas de esas pierdes la conciencia. Y he hablado con Enzo por teléfono. Parece que todo lo que dice tiene sentido, Enzo está segurísimo de lo que dice Kai y yo también. Conozco a esa mujer y no es trigo limpio.

—Perfecto, pues me voy a un hotel.

—Sí, ya —viene hacia mi y me abraza —. Tú de aquí no te vas. No me apetece morir hoy.

El nudo de mi garganta se intensifica y, aunque lo intento, no puedo evitar que de repente mis ojos se conviertan en cascadas.

—Pero Jade... —me besa como una abuela en las mejillas y me mira a los ojos —. Sabes que te quiere, ¿verdad?

—No —lloriqueo —. No me quiere, no le importo. Main, es lo peor. Y... y... ¡le metió la lengua hasta la campanilla!

—Escúchame, tengo una buenísima noticia —me arrastra hasta la barra americana de la cocina y allí nos sentamos, cada una en un taburete —. Vamos a irnos de mini vacaciones.

—No pienso ir a ninguna parte —aún moqueo.

—¿Que no? Vaya que sí. Nos vamos a Italia. Nos lo vamos a pasar de miedo.

—¿Italia? —me ofrece una fresa y el olor dulce invade mis fosas nasales —. Ufff, qué fuerte huele, ¿no?

—¿Huele mal? Trae —me mira con el ceño fruncido y me la quita de las manos para olerla.

—No, pero huele mucho a fresa. Las fresas que yo compraba no olían tanto.          

Un sabor desagradablemente ácido cruza mi garganta y corro al baño justo cuando la bilis está apunto de tocar mi lengua.

En cuanto me pongo delante del váter, una cascada multicolor sale de mi boca. Vomito hasta mi primera papilla mientras Main, con toda la entereza del mundo me agarra el pelo y me refresca de vez en cuando la nuca con agua.

—Qué asco, Main.

Suspiro hondo. Jesús, no sé qué me pasa pero vaya fatiga.

El corazón me va acelerado y siento que tengo la lengua de estropajo.

| COMPLETA ✔ |   Aunque tú no lo sepas © [ATNLS 1]Where stories live. Discover now