Capítulo 39

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KAI
      

Las ganas de ir a la fiesta de esta noche menguan conforme se acerca la hora. Ya me he comprometido con Catia, así que tengo que ir.

Meto una pastilla en mi boca y la trago sin esfuerzo.

Después de darme una ducha rápida, bajo al hall del hotel y allí espero a Enzo y Celia.

La fiesta es en el mismo hotel, así que lo tendré fácil para escaquearme pronto.

Las mujeres van vestidas de forma elegante, pero todas me parecen ridículas comparadas con Jade. Incluso con el pijama de osos les daría mil patadas.

En los sofás de delante de mí una pareja se besa con pasión. Ambos van vestidos con traje de chaqueta, así que asumo que van también a la fiesta. Para ellos seguro que la cosa no termina en allí.

Qué envidia...

Miro mi reloj y luego el móvil. Jade no me ha llamado y tampoco me ha mandado ningún mensaje, aunque yo tampoco lo he hecho.

No quiero presionarla, así que dejo las cosas como están. Si necesita algo sé que me llamará, porque ya lo hizo ayer.

Con Main está completamente segura así que no me preocupo por eso. Espero que lo esté pasando bien y que cuando vuelva me haya perdonado completamente, porque quiero sincerarme de una vez con ella.

Cuando le diga que es mi Godot... que entre los dos hay una conexión sobrenatural para las leyes de la física humanas...

Río ante la idea de Jade intentando entenderlo. Debo haber llamado la atención de los dos hombros, porque dejan de besarse con pasión y me miran durante unos segundos.

Yo también los miro, pero desvío la mirada pronto, al igual que ellos.

Vuelvo a fijar mi vista en la gente que va y viene.

Hay parejas que se dan la mano y entran juntos en la sala donde se celebra la fiesta.

Una mujer ríe con sus amigas mientras su hijo, con algo en la mano y corriendo, es perseguido por el que parece ser su padre.

Un hombre lleva un bebé en brazos y se reúne con su mujer, que habla animadamente con un grupo de amigos.

Las puertas del ascensor se abren y por fin aparecen Celia y Enzo. Van acompañados de una mujer que se despide de ellos con un gesto al salir al hall.

—Podrías haberte arreglado un poquito más —se queja Celia mirándome de arriba a abajo.

Pongo los ojos en blanco y suspiro.

—Así voy perfecto —miro mi camisa básica negra y mis tejanos.

—Jade no pensaría lo mismo —alza una ceja.

| COMPLETA ✔ |   Aunque tú no lo sepas © [ATNLS 1]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora