BJ Kyubi - Naruhina (+18)

Capítulo 5

Hinata

Froté mis muñecas después de dejar otra bandeja de cupcakes recién hechos en el mostrador y suspiré entre dolida y satisfecha. Hoy al despertar me sentí feliz, sonriendo como idiota al recordar la fantástica que noche que pasé entre sus brazos, para descubrir que estaba sola... total y completamente sola. No pude evitar que la decepción se hundiera dentro de mí. Digo, era mi jodida primera vez, al menos se hubiese molestado en darme los buenos días y una taza de café ¿no? No todos los días una chica te entrega su virginidad, pero no. Ni siquiera me dejó una nota o algo, y realmente me sentí mal al notar que se había ido antes de que yo despertara como si fuese una prostituta cualquiera.

Dios, soy tan patética.

Sabía perfectamente en lo que me estaba metiendo, que Naruto no es el tipo de chico que se compromete, que entre nosotros solo habría sexo y solo sexo y que los sentimientos no estaban involucrados. Para Naruto yo solo soy una niña con grandes tetas para pasar el rato, jamás me vería como algo más que la hermana menor de su mejor amigo, pero es inevitable para mí no ilusionarme cuando durante mucho tiempo y aun después; sin saberlo, estuve y estoy enamorada de él.

Suspiré frotando mis sienes.

Fue la mejor noche de mi vida. Follamos durante horas y al final me dormí con una estúpida sonrisa de felicidad en mi cara, felicidad que se esfumó cuando no estuvo junto a mí esta mañana.

«Qué manera de matar las ilusiones de una chica, Naruto. Felicidades»

Escuché la campanita de la puerta sonar y alejé esos pensamientos. Tenía que volverme dura, forrar mi corazón en piedra y disfrutar del mejor sexo que podría conseguir jamás. Era una adulta, por amor a Dios. Tenía que separar los sentimientos del deseo y con Naruto aprendería.

Como que me llamo Hinata.

Me acerqué al mostrador con una sonrisa forzada cuando divisé a mi hermano junto a su novia... y tras ellos Naruto, dos chicos y una chica. Me congelé en mi lugar, advirtiendo la forma en que la desconocida se apegaba a Naruto y era toda sonrisas para él ¿y él? Me ignoró olímpicamente mientras hablaba con ella y los otros.

―Hola ―digo.

― ¡Hina! ¿cómo estás? ―Me saludó Sakura―. Hace tiempo le pedí a Sasuke que me trajera y hasta hoy se decidió.

―No me gusta que mi hermana trabaje aquí y mucho menos que mis amigos lo vean.

―Deja de ser tan esnob, Sasuke ―Ella golpeó su brazo―. Hina cocina delicioso y no es justo que solo unos pocos lo sepan.

Mi hermano gruñó y me reí, solamente su novia era la única capaz de ponerlo en su lugar. Entendía perfectamente porque se había enamorado de ella. Era demasiado guapa, además, nunca me gustó su forma de tratar a las mujeres con las que se acostaba.

«Aunque terminaste siendo una de esas con el mejor amigo de tu hermano»

Carraspeé.

―Entonces ¿quieren algún café? Esos cupcakes están recién hechos.

― ¡Genial! ―exclamó Sakura.

Tomé sus pedidos mirando a Naruto de reojo, a simple vista se comportaba normal, como si no hubiese metido su polla en mi coño repetidas veces apenas unas horas antes. Ignoré el ramalazo de celos que sentí cuando vi a esa chica pelirroja acariciar su brazo, sonreírle, sonrojarse con él. Él no era mío y nunca lo sería, tenía que meterme eso a la fuerza en la cabeza. ¿Pero dejarlo? Dios no, lo quería. Lo quería muchísimo y al menos, tendría esa parte de él conmigo siempre.