Capítulo 13.- Preludio.

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El reloj de pulsera de Bakugou marcaban las nueve con un cuarto de la noche al momento en el que salió de la tienda de celulares.

Encontró un teléfono parecido al que tenía y se sintió reconfortado. No tenía intenciones de ir a su casa, no ese día.

Tres viajes en tren después, estaba en la puerta de la casa de sus padres con la cola entre las patas pues iba a hacer algo que prometió que jamás haría.

Tocó la puerta, tragando saliva pues en verdad no quería perder la dignidad, pero debía hacerlo.

Abrió su madre, recibiéndolo con cierta sorpresa de verlo de nuevo tan pronto.

-Nunca nos visitabas y sólo te limitabas a llamarme, ¿y ahora? Dos días seguidos tengo el gusto de tener a mi hijo de vuelta a casa.- Mitsuki le ofreció cenar con ella pero rechazó.

-Sólo estoy aquí en una visita rápida...

-¡Tonterías! Ya es muy tarde para que te vayas a tu casa, quédate hoy a dormir. Esta vez si te despertaré...

-¡Escúchame, mujer! Te quiero pedir dinero...-Dignidad, a la basura.

Mitsuki lo miró, extrañada pero fue cuestión de segundos cuando comenzó a reírse.

-"¡Yo, Katsuki Bakugou, prometo que nunca les pediré dinero así me esté muriendo de hambre y lepra!"-Continuó riéndose.- Más rápido cae un hablador que un cojo, hijo mío...

-Es algo importante...

-¿Más importante que el hambre y la lepra?

-No estoy jugando...

-Está bien, dime ¿cuánto necesitas?

-$11, 000.00 dólares.

La mujer lo miró con incredulidad, esperando que fuera alguna clase de chiste.

-¿Hablas enserio?

-Sí.

-¿Y qué quieres pagar? ¿Un viaje a París?

-¡Sabes bien que necesitaría más para "un viaje a París"! Quiero comprar una motocicleta.

-¿¡Eres idiota!? ¿Quieres que te preste $11,000.00 por una motocicleta?

-¡Te los devolveré! Le he prestado dinero a mucha gente, te aseguro que puedo pagarte esa cantidad...

-Y espero que puedas pagarme con el 20% de intereses porque esa cantidad no es una burla. ¿Qué clase de motocicleta que se respete vale $11.000.00?

-Un primo de Kirishima está vendiendo su Honda CBR Fireblade 1000 RR...

-No está nada mal...-exclamó, satisfecha mientras le entregaba el cheque...-Cuídalo bien, que tu padre y yo no estamos nadando en dinero

-Desde que me fui de casa, deben tener más dinero...

-Tienes razón, ahora somos un poco más ricos que antes. ¡Ah! y más te vale que me devuelvas ese dinero pronto, que mis vacaciones en Rio de Janeiro no se van a posponer sólo porque no me pagues.

-No hay problema, te lo devolveré pronto...

Dicho eso, Mitsuki y su hijo cenaron para después enviar a Katsuki a que lavara su uniforme, tomara una ducha y se fuera a dormir. Este obedeció sin demasiados reproches, después de todo estaba feliz de poder hacer aquella motocicleta suya y todo por una buena causa.

Por otro lado, no podía dejar de pensar en Uraraka. No estaba feliz, sino más bien preocupado y hasta un poco ansioso; hizo su castigo personal jamás volver a fallarle, y aunque no estaría satisfecho con sólo la amistad de la castaña, se conformaría con eso si esa elección garantizaba que ella no sufriría más por él.

Sentado a la orilla de su cama, en la habitación que alguna vez fue suya, marcó de memoria el número de Kirishima para preguntarle si su primo aún no vendió la motocicleta.

Por otro lado, en una habitación lujosa, Uraraka era amonestada por Momo Yaoyorozu, quien en su relación de amistad con la castaña tenía un rol parecido al de una hermana mayor celosa o al de una madre sobre-protectora.

Llamaba en conferencia con ella y su otra amiga, Asui Tsuyu, de riqueza y atractivos muy parecidos, aunque Momo era sin duda la más rica y guapa de las tres.

-¡Ochako...!-Le gritó al enterarse de los planes del sábado de la joven.- ¿Acaso perdiste la razón?

¿Deberíamos llamar a un psiquiátrico?-Se mofó Tsuyu.

-¡Esto es serio, Asui! ¿Por qué aceptaste la cita de ese imbécil?-Era claro que estaba molesta e indignada.

-Yo, no lo sé...-En su cabeza había como mínimo cincuenta razones por las cuales le dio un si a Bakugou, pero ni se molestó en decirlas, pues cualquier razón que diera sería inválida ante los ojos de Momo.

-Llámalo...-Ordenó la susodicha.- y dile que cambiaste de opinión.

-Quedó en que me daría un número mañana...-Error por parte de Ochako.

-¡Esto me huele a chamusquina, Ochako! No es normal que queden en una cita y te diga: "luego te doy un número", creo que es una trampa...

-¡No! ¿Qué lograría con eso?

-Quizás quiera aprovecharse de ti...-Sugirió Tsuyu, con timidez.

-Él jamás me faltó el respeto cuando éramos novios...-intentó defenderlo, pero Momo ya estaba en alerta desde hacía un rato.

-Es probable que quiera terminar lo que empezó hace años...-Había un tono maquiavélico en el tono de Momo...-

-¡Por Dios, Momo! Él nunca intentó besarme, o si lo hizo, jamás me obligó a corresponderle.

Momo hirió de gravedad a Ochako con simples palabras...

-Eso era porque nunca le importaste. Te recuerdo que todo fue por una apuesta...

-Pero...-No hubo manera de objetar.

-¡Ningún pero! Ese tipejo te hizo mucho daño, nosotras estuvimos ahí para que pudieras secar tus lágrimas, ¿y decides caer con la misma piedra? No lo permitiré... dices que trabaja en una cafetería cercana a la escuela, ¿no? Ya vera, le obligaré a que te deje en paz.-Dicho eso, finalizó la llamada, como si ya no tuviera nada más que agregar, y como muestra que no estaba interesada en cualquier posible réplica de cualquiera de las otras dos chicas.

Tras un largo silencio, rompiéndolo con un suspiro, preguntó la opinión de su otra amiga con cierta duda y dolor en su pecho.

-Aunque quiero apoyarte, Momo tiene razón. No deberías acercarte a él. Dudo de sus intenciones, Uraraka. Quiero decir, ¿No fue de alpinismo al día siguiente de terminarte con sus amigos? Eso no sé como lo interpretes tú, pero obviamente es desinterés puro y duro. Yo creo que deberías seguir el consejo de Momo, por lo menos por esta vez.

Cambiaron de tema, intentando que Ochako se calmara y poco después, finalizaron la llamada.

Toda la felicidad que había sentido por aquella agradable plática con el rubio apenas un par de horas antes se desvaneció rápidamente.
Estaba adolorida. Momo y Asui tenían razón, Katsuki había sido frío y desalmado, hasta se podría decir que fue cruel y sádico pero, ¿y si sus sentimientos ahora eran sinceros? 

Ella estaba decidida. Sin importarle que tuviera que pasar por encima de sus amigas, saldría con Bakugou el sábado.

*Final del capítulo* (Actualización: 21 de Febrero, 2019)

Las Diferencias Entre Tú & Yo.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora