No me encuentro con fuerzas para hablar contigo.

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NARRA JUSTIN

-¿Pero qué?- Preguntó Fredo nervioso sabiendo lo que yo iba a decir.

-Pero creo que me estoy enamorando.

Raramente, Alfredo no se sorprendió mucho.

No tenia que haberle contado nada, seguramente estaria pensando que yo era un enfermo por pensar algo asi de mi hermana, pero simplemente no dijo nada.

- Dime algo, dame tu opinión. Pero no te quedes callado, Fredo.-Bufé- Me pones mas nervioso.

-¿Que quieres que te diga?- mordió su sandwich- Ya sabia que iba a pasar esto.

-¿Que?

-Se te notaba en los ojos al mirarla, bro. Esa no es una mirada normal de entre hermanos, se nota que la quieres mas que eso.

Se escuchó a alguien subiendo las escaleras corriendo. Fui a mirar quien era.

¿Quien iba a ser, idiota? Mi mente habló.

Me asomé y vi a ____ desaparecer en el pasillo de arriba.

-Mierda.- Murmuré enfadado.- Siempre escuchando conversaciones ajenas.

-¿Habrá escuchado mucho?- Preguntó Fredo.

-Es____, lo habrá es escuchado todo.- Pasé mi mano por mi pelo frustrado sentandome en la silla en la que estaba antes.- Tengo que hablar con ella.

-Sí, es lo mejor que puedes hacer.- Fredo bebió el último trago de agua que le quedaba en el vaso.-Me voy a ir ya, así podreis hablar tranquilos.

-No, no voy a hablar con ella ahora, voy a dejar que pasen unos días. Es demasiado pronto.

-Si, y ya sabes que a ella no le gusta hablar de los sentimientos, así que tampoco la presiones.-Fredo se levantó y cogió su sandwich. Andó hacia mi y me dió unas palmadas en la espalda dandome ánimos. -Me voy, mañana hay concierto y no quiero estar cansado.

Asentí acompañándole a la puerta. Fredo estaba en un hotel unas calles mas abajo, asi que si necesitaba algo podia ir andando.

Nos despedimos y cerré la puerta detrás de mi.

Y así pasé mi tarde, miré el reloj y me di cuenta de que ya era la hora de cenar, así que debía llamar a mi hermana.

No subí a llamarla, tan solo grité desde abajo.

-No voy a cenar, no tengo hambre.-Fue lo único que escuché.

No iba a permitir que no comiera, así que tuve que subir a nuestra habitación para llamarla.

-¿Puedo pasar?-Pregunté después de tocar la puerta.

No se escuchó nada adentro, así que pase. Ella estaba con su móvil, haciendo cualquier cosa menos contestarme cuando le hablaba.

Llevaba el pelo recogido en una cola y lucia adorable.

-Tienes que comer algo.-Repetí por tercera vez.

Dicen que a la tercera va la vencida y no mienten, al fin me miró.

- No tengo hambre, por favor déjame.-Volvió a mirar su móvil. Bajé mi cabeza y sali de la habitación.

Maldita sea, ¿Por qué me tuve que enamorar de mi hermana?

¿No hay mas mujeres en el mundo, eh?

Bajé desanimado a cenar. Cené un sandwich, tampoco me esmeré, pero esque no tenia ganas ni de hacer la cena.

Le hice otro a mi hermana y se lo subí a la habitación, sabia que en verdad se moria de hambre.

¿Soy adoptada? (Justin Bieber y tu)Where stories live. Discover now