Por siempre「casthaniel」

Capítulo 6

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Pov Nathaniel:

Mi corazón latía descontrolado dentro de mi pecho, ya estoy en camino para verlo, para ver al único chico del cual me he enamorado.

Llegamos a «Snake Room», habían demasiadas personas afuera, no podía imaginarme en el interior. Caminamos a la entrada donde dimos los pases a un guardia y así nos dejó pasar.

Una banda ya estaba en el escenario, y los chicos que estaban ahí se movían al ritmo de aquella música, nunca he sido fan de aquellos estilos, pero tampoco es que me hayan disgustado. Empecé a escucharlos cuando Castiel escribió una canción para mí en el instituto, el ritmo era una combinación de rock y balada. Jamás podría olvidarla.

Mi cabeza me estaba doliendo en estos últimos días, no había podido comer bien y entrené como un loco. Todo eso hizo que la música que salían de los enormes parlantes me aturdieran, sentía mis sienes palpitar y un fuerte dolor en el pecho.

—¿Estás bien?— la voz preocupada de Dake hizo que me gire para verlo. Asentí. Y él me sonrió— Voy a buscar unas bebidas.

Dake era al que consideraba mi único amigo desde que pasó aquello. Nos conocimos en la playa cuando yo ''protegía a Su de sus garras'', la verdad es que con el tiempo demostró ser un tipo increíble y que pudo conquistar el corazón de la castaña. Se enamoraron pero como nunca nada es para siempre se separaron, nunca se olvidaron, eran como Castiel y yo, bueno, solo yo.

Divisé a la lejanía a Rosa y Alexy que estaban junto a Sucrette. La castaña me miró un momento y se disponía acercarse a mí, pero vi como Rosa la tomaba del brazo y le susurraba algo al oído, algo que no tengo seguro hasta el día de hoy que sea.

Sucrette le retiró la mano y se despidió de ellos, acercándose hacia a mí con una sonrisa.

—Hola delegado — me saludó sonriendome ya estando a mi lado. Ese apodo siempre lo usaba en el instituto.

—Hola enana— Respondí acercándome para plantarle un beso en la mejilla.

—Creí que no vendrías— hablaba fuerte para que su voz se escuchara por encima de los parlantes.

—Dake me amenazó de muerte— enseguida su expresión se tensó.

—¿É-él está... Aquí? — se puso nerviosa bajando su vista al vaso de cóctel que sostenía en sus manos.

—Sí—su mirada se perdió en la de Dake que había regresado, los dos se miraron sin decir nada, la boca de ambos empezaron a temblar, no podían hablar, las palabras habían desaparecido.

—Esto es mío — dije retirando mi bebida de la mano de Dake quien todavía no volvía en si.

Me alejé para darles un poco de privacidad. El dolor no desaparecía y empecé a quedarme sin aire, el pecho se me oprimía, la cabeza me estaba desestabilizando.

El intro antes de que saliera Crownstorm había finalizado. Y una chica con el cabello muy corto se paró en el escenario con un micrófono en su mano.

—¿¡Cómo están!?— gritó con una voz chillona para captar la atención de los que estaban ahí. Enseguida los gritos no tardaron de aparecer. —No lo escucho... ¿¡CÓMO ESTÁN!?— gritó de nuevo y los gritos por parte de todos fueron mucho más fuertes.

Hizo una seña con su mano para que bajaran el ruido— Me alegro que estén bien, ya que esta noche es para disfrutarla al máximo, agradecemos al grupo «Solü» por habernos puesto en este ambiente tan increíble. ¡¡UN APLAUSO PARA ELLOS!!— La sala se llenó de aplausos, y aquel grupo se paró en el escenario para hacer una pequeña reverencia y bajar.

—El tiempo que todos esperábamos llegó — mi corazón empezó a latir demasiado rápido, cada palpitación era como una aguja que se introducía en mi pecho— El grupo que todos hemos estado esperando en esta noche— no podía soportarlo, tenía puñeteras ganas de vomitar, todo me dolía y en mi mente solo estaba ver a Castiel.— Está compuesta por unos chicos muy guapo y sobretodo talentosos, ellos han sido la revelación en este tiempo, y ésta es su última presentación como banda no oficial— me pecho se infló "Lo había conseguido" — ya que una empresa los contrató, dando por inició su nueva etapa. Éste es su concierto, así que demosle todo lo mejor de nosotros— cerré los ojos un momento, respirando profundo para que mis lágrimas no salieran, al menos no tan pronto. — ¡Con ustedes...! ¡¡CROWSTORM!!

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POV Castiel:

El bar se llenó de gritos, subimos al escenario a lo que las luces se apagaron, la sala estaba completamente oscura, no se podía ver absolutamente nada. Tomamos nuestros lugares cada uno, el mío era en el centro por ser el vocalista. Cerré mis ojos e inhalé aire por mi nariz, antes de comenzar.

Las suaves notas saliendo del teclado; eran la señal para empezar. Me concentré y después era mi momento de entonar en la guitarra la melodía fuerte.

La melodía  de mi guitarra eléctrica llenó el lugar y las luces se prendieron dando así el comienzo de la canción. Aún no abría mis ojos hasta que empecé a cantar. Recorrí con la mirada a las personas que habían llegado y aunque no me concentraba en una en específico pude reconocer a algunos.

Y ahí lo miré.

No podría equivocarme.

Era totalmente imposible.

Es... Nathaniel.

Las leves luces que alumbraban al auditorio dejo que reconozca aquella cabellera rubia que tanto había extrañado. Sus amielados ojos me miraban directamente. No dejaba de mirarme ni yo dejaba de mirarlo.

Las ganas de correr hacia él, las lágrimas que querían salir por él, los sentimientos que aún tenía por él... Todo era él. No sabía si todavía estaba cantando o no, la música dejó de sonar en mi cabeza y solo me dediqué a él, a Nathaniel, al amor de mi vida.

Me dolía el pecho, mi corazón latía demasiado rápido, y cada vez se me hacia más difícil el poder contenerme para bajar y estrecharlo en mis brazos y besar sus labios como nunca antes.

La canción de la intro finalizó y volví. Nath está aquí. Tenía que componerme por Crowstorm era mi turno de hablar.

—¡¡Somos Crowstorm!!— dije contra el micrófono cuando las luces se volvieron más claras. Los aplausos y gritos no se hicieron esperar por parte de todos.— Estamos muy contentos de estar ésta noche aquí; en nuestra cuna, la primera ciudad que nos recibió — No podía dejar de verlo, se me hacia totalmente imposible. Presenté a mis compañeros de la banda, y llegó el momento de comenzar la siguiente canción pero antes...

— ¿Alguna vez se han enamorado de alguien? — empecé a tocar la melodía suave que había compuesto para la canción que se la dedique aquella vez a Nathaniel— Porque yo sí.— sonreí contra el micrófono. La sala calló para poder escucharme mejor.— Y aún lo estoy. Se fue de mi lado; hiriéndome, dijo que no me amaba, pero ¿saben qué? Esa persona era mala para mentir.— la sala rió triste — Si tal vez, por causa del destino está escuchando esto, quiero decirte; que te amo, sí, aún te amo a pesar de tantos años que pasaron sin vernos. La ausencia de todo de ti, hicieron que a veces deje todoq. Pero lo hice por ti, porque querías verme hacer lo que amo, pero sin ti, estoy incompleto, me haces falta, te extraño. Si es la última vez que quieras escucharme, estas serían mis palabras a ti: Te amo. — La sala hizo unos pequeños aplausos que se iban intensificando. —Con ustedes «Tu Ausencia»