RELACION ESTABLE O ¿NO?~Miriam2

CAPITULO 9

(Narra Miriam)

Al día siguiente me desperté con el sonido del despertador. Menos mal que Aitana también se tenía que levantar para irse a trabajar porque si no ahora mismo me mataría. Me levanté antes que ella y me fui a ducharme.

Cuando salí de la ducha y fui a la cocina para hacerme el desayuno, Aitana ya se había levantado y había hecho el desayuno para las dos. 

- Buenos días- la dije nada más entrar en la cocina.

- Buenos días prima. ¿Que tal has dormido hoy?

- Sin más. Eso sí, mejor que ayer si.

- Entonces mejor. No es bueno que duermas tan poco.

- Lo se, pero no pude parar de pensar y me es inevitable.

- No te preocupes. Eso se va a solucionar y no voy a parar de repetírtelo jajja.

- Ellaaa pesada jajajaja. Cuéntame, ¿qué tal ayer en mi casa?

- Bien. Mimi estaba igual que tu de mal. Cuando llegué gritó tu nombre porque se pensaba que eras tu, pero cuando me vio se decepcionó bastante. Sigo pensando que deberías hablar con ella.

- Ya hemos hablado de esto Aiti. Necesito tiempo para pensar las cosas. Y en todo caso podría venir ella a hablar conmigo si tan mal está.

- Es que sois muy orgullosas las dos. Lo que hay que aguantar- dijo Aitana negando con la cabeza.

- Tu dame tiempo. Lo necesito.

- Vale, yo no te pienso insistir más, pero luego no te arrepientas de la decisión que tomes.

No la contesté y terminamos de desayunar. Me preparé lo más rápido que pude porque ya se me había hecho tarde y justo cuando terminé, Mireya me llamó diciendo que ya estaba y que me esperaba abajo.

Bajé lo más rápido que pude y la vi esperándome sentada en el capó de su coche. Cuando me acerqué a ella la di un gran abrazo.

- Como no me sueltes me vas a ahogar- me dijo y yo me aparté.

- Lo siento ajajjaja.

- Parece que estas mejor. ¿Me equivoco?

- Para nada. Aún así todavía no estoy del todo bien. Sigo jodida.

- Lo vais a arreglar, ya verás.

- ¿Por qué estáis todas tan convencidas de eso? Y si no lo arreglamos ¿que?

- Mira, yo no debería decírtelo, debería decírtelo ella pero...

- ¿Qué pasa Mireya?

- Pues que lo que tu piensa no es verdad.

- ¿Y tu por que piensas eso? ¿Sabes algo?

- Si se, porque el día que fuiste a por una chaqueta a tu casa y Mimi salió corriendo de la habitación yo estaba con ella.

- ¿Cómo? ¿Tu estaban allí? ¿Y por que no te vi?

- Porque me escondí en el baño. Mimi estaba rara todos estos días porque te estaba preparando un sorpresa y yo la estaba ayudando. Por eso estaba la habitación desordenada, como entraste tuvimos que esconderlo todo rápidamente y Mimi salió para distraerte y que a mi me diera tiempo también a esconderme y que no me vieras.

- Flipo. Enserio te lo digo. Ahora mismo estoy flipando con lo que me dices. ¿Tan difícil era decirme esto antes? Si me lo hubiera aclarado todo desde el principio no estaríamos así.

- Joder Miriam, pero como lo va a aclarar si estabas super nerviosa cuando se lo dijiste.

- Me da igual. Ahora estaríamos bien.

- No quiero discutir Miriam. Eso si, cuando hables con ella no seas borde por favor.

- No te prometo nada.

- Por favor.

- Lo intentaré. Además, después del trabajo he quedado con Roi, así que igual estoy más jodida todavía. ¿Por qué se tiene que juntar todo ahora? Como odio esto.

- Madre mía amiga, valla semanita llevas entre una cosa y otra.

- Pues si. Yo creo que me han echado un mal de ojo o algo.

Llegamos al trabajo y empezamos a trabajar. La verdad es que el día se me pasó bastante rápido y ya había terminado mi turno. Cuando terminé, me cambié la ropa del trabajo por con la que había venido y esperé a que llegase Roi. 

Estaba hablando con Mireya, que me estaba haciendo compañía mientras esperaba a Roi, y de repente se calla de golpe.

- No te gires- me dijo.

- ¿Por qué?- dije mientras me giraba- ¿Qué hace ella aquí?

- No lo se. Yo te juro que no la he dicho nada.

- Viene hacia aquí. ¿Qué hago? Yo ahora no puedo hablar.

- No lo se, pero yo os dejo solas mejor. Nos vemos mañana.

- Eres muy capulla.

Mireya se fue después de saludar a Mimi y esta se acercó a mi quedando las dos solas.

- H-hola- me dijo dudando.

- Hey- dije mirando a la puerta para ver si venía Roi. Le iba a matar por llegar tarde.

- ¿Podemos hablar mientras nos tomamos algo?

- Estoy esperando a alguien y estará a punto de llegar. No creo que sea buen momento para hablar ahora.

Volví a mirar hacia la puerta y vi que Roi entró en el bar.

- Mira, ahí está. Me tengo que ir.

- Espera Miriam, no es lo que tu crees...

- Lo sé. Me lo a contado Mireya antes. Enserio, no es el mejor momento para hablar.

No dije más y me fui de allí hacia donde me esperaba Roi. Me acerqué a él y le di dos besos. Le dije que fuéramos a tomar algo mientras hablábamos y nos pusimos de camino a otro bar. Cuando salimos por la puerta, miré hacia Mimi que estaba con Mireya. Si digo la verdad, la vi un poco jodida. Creo que había sido un poco dura con ella, pero luego ya hablaría con ella. Estaba mal y necesitaba arreglarlo ya porque no se si aguantaría más en esta situación.

Roi y yo llegamos a una cafetería en la que yo nunca había estado, pero el decía que tenía buenos cafés. Nos pedimos uno cada uno y la situación era un poco incomoda. Ninguno de los dos sabía que decir, hasta que Roi rompió el silencio.

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