Abril en Hogwarts: La Camara Secreta

Capítulo 12 // El Plan y El Libro Prohibido

—Ya sabía que Salazar Slytherin era un viejo chiflado y retorcido —dijo Ron a Harry, Abril y Hermione, mientras se abrían camino por los abarrotados corredores al término de las clases, para dejar las bolsas en la habitación antes de ir a cenar—. Pero lo que no sabía es que hubiera sido él quien empezó todo este asunto de la limpieza de sangre. No me quedaría en su casa aunque me pagaran. Sinceramente, si el Sombrero Seleccionador hubiera querido mandarme a Slytherin, yo me habría vuelto derecho a casa en el tren.

Hermione asintió entusiasmada con la cabeza, pero Harry y Abril no dijeron nada.

Mientras caminaban empujados por la multitud, pasó Colin Creevey.

—¡Eh, Harry!

—¡Hola, Colin! —dijo Harry sin darse cuenta.

—Harry, Harry.., en mi clase un chico ha estado diciendo que tu amiga o tú son...

Pero Colin era demasiado pequeño para luchar contra la marea de gente que lo llevaba hacia el Gran Comedor. Le oyeron chillar:

—¡Hasta luego, Harry! —Y desapareció.

—¿Qué es lo que dice sobre ustedes el chico de su clase? —preguntó Hermione.

—Que alguno de los dos es el heredero de Slytherin, supongo —dijo Harry un poco triste.

—¿Y tú por qué? — pregunto Hermione en dirección a Abril.

—No es ninguna novedad de que yo y mi hermano somos los últimos Grindelwald, todos los que han venido a estudiar a Hogwarts han terminado en Slytherin, tal vez por eso me relacionan con el heredero.

—La gente aquí es capaz de creerse cualquier cosa —dijo Ron, con
disgusto.

Abril asintió con la cabeza.

La masa de alumnos se aclaró, y consiguieron subir sin dificultad al
siguiente rellano.

—¿Creen que realmente hay una Cámara de los Secretos? —preguntó Ron a Abril y a Hermione.

—No lo sé —respondió Hermione, frunciendo el entrecejo—. Dumbledore no fue capaz de curar a la Señora Norris, y eso me hace sospechar que quien quiera que la atacase no debía de ser..., bueno..., humano.

—Apoyo a Hermione, puede que se trate de alguna clase de anim...

—¡Abril! — grito una voz desde atrás de ellos.

Al voltear Abril pudo ver de donde venia el grito y era de su prima Helena.

—¿Puedo hablar contigo? — dijo tímida.

—Umm, claro — Abril volteó a ver a sus amigos los cuales asintieron con la cabeza.

Ambas caminaron en silencio hasta llegar al segundo piso, en la entrada de un aula se encontraba un bonita chica rubia y de cara amigable.

—Abril — hablo Helena — mira, ella es Daphne Greengrass.

—Un gusto conocerte — dijo ella.

—igualmente, gracias por cuidar de mi prima —Abril le sonrió levemente y ella le sonrió con amabilidad.

—No es un gran trabajo, Helena es muy buena y amable, me alegra ser su amiga —dijo con una sonrisa.

Tal vez no todos los Slytherin tengan que ser malos, pensó.

—¿Como va su primer año? — preguntó a Helena y a Daphne, ambas comenzaron a hablar, Helena le sonrió a Abril y comenzaron una charla bastante buena.