Capítulo 21 // San Valentín y algo más.

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El sol había vuelto a brillar débilmente sobre Hogwarts. Dentro del castillo, los alumnos parecían más optimistas. No había vuelto a haber ataques después del cometido contra Justin y Nick Casi Decapitado, Abril no podía estar mas contenta, ella no podría haber soportado mas esos chismes de que ella o Harry eran los herederos, y a la señora Pomfrey le encantó anunciar que las mandrágoras se estaban volviendo taciturnas y reservadas, lo que quería decir que rápidamente dejarían atrás la infancia.

Harry le habia comentado que él pensaba que tal vez el heredero de Slytherin se había acobardado. Cada vez debía de resultar más arriesgado abrir la Cámara de los Secretos, con el colegio tan alerta y todo el mundo tan receloso

Pero Abril estaba intrigada pensando en cual seria el monstruo de la Cámara de los Secretos, pero eso si, tenia que ser capas de vivir mas de cincuenta años y ser fácil de amaestrar.

Por otro lado Ernie Macmillan, de Hufflepuff, no era tan optimista como todos los demás. Seguía convencido de que Harry y Abril eran los culpables y que se habían delatado en el club de duelo.

Gilderoy Lockhart estaba convencido de que era él quien había puesto freno a los ataques. Harry le oyó exponerlo así ante la profesora McGonagall mientras los de Gryffindor marchaban en hilera hacia la clase de Transfiguración.

—No creo que volvamos a tener problemas, Minerva —dijo, guiñando un ojo y dándose golpecitos en la nariz con el dedo, con aire de experto—. Creo que esta vez la cámara ha quedado bien cerrada. Los culpables se han dado cuenta de que en cualquier momento yo podía pillarlos y han sido lo bastante sensatos para detenerse ahora, antes de que cayera sobre ellos... Lo que ahora necesita el colegio es una inyección de moral, ¡para barrer los recuerdos del trimestre anterior! No te digo nada más, pero creo que sé qué es exactamente lo que...

De nuevo se tocó la nariz en prueba de su buen olfato y se alejó con paso decidido.


Esa misma tarde, el equipo de quidditch de Gryffindor se reunió para una sesión de entrenamiento, a pesar de los ataques Oliver Wood estaba empeñado en ganar la copa de Quidditch, seguidamente Wood los bombardeo con mas de cincuenta tácticas que podrían utilizar.

—Creo que si seguimos la táctica número 36, tenemos la copa asegurada.

Acto seguido y con una sonrisa, Oliver dio inicio al entrenamiento.

—Muy bien — dijo Oliver una vez tomó su escoba — hoy jugáremos con las bludgers, George, Fred, cien por ciento atentos a las bludgers que amenazan a nuestras cazadoras, Harry ya sabes que hacer.

El juego comenzó, pero Oliver reñía a medio mundo, a Abril le pareció que el chico estaba cada vez mas obsesionado y eso la sacaba de quicio.

—¡¿Que haces, Abril?! — pregunto Oliver histérico, cuando Abril dio una pirueta y le dio un pase a Alicia — ¡Tienes que pasársela a Angelina! ¡Nada de piruetas!¡Recuerda la táctica!

Lo primero que pensó fue arrojarle la Quaffle a la cara, pero tomó aire y decidió no hacerlo, Alicia le dio la Quaffle, y Abril le dio el pase a Angelina y esta rápidamente marcó un tanto.

Abril tomó altura, pero algo la detuvo, una extraña voz sonaba a la distancia, una que ya habia escuchado antes el año pasado, miró a su alrededor y pudo ver el bosque prohibido, de ahí venia la voz.

El año pasado la escucho como varios susurros sin ningún sentido, pero en esta ocasion la voz era una sola, las palabras eran arrastradas y el tono era triste, e iban acompañado con rimas, se trataba de una canción.

Ella no podía entender del todo pero sentía que el tono ya lo habia escuchado en algún otro lado, sentía, como el año pasado, que tenia que ir hacia esa voz, sin embargo, todo eso fue interrumpido cuando una bludger le golpeó en el estómago.

Abril en Hogwarts: La Camara SecretaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora