DIFFERENTS- MYG (BTS)

El principio

Escritora

Se trataba de un día aburrido para el pequeño Yoongi. Llovía sin cesar y sus padres no le dejaron salir de casa.
Sin embargo, la situación empezaba a mejorar. El pelinegro pudo divisar a dos siluetas desde su enorme ventanal.
Se trataba de una niña y un niño de su edad; ambos llevaban puestos chubasqueros rojos, idénticos al que tenía guardado Yoongi en su armario.

El niño ansioso, corrió hacia su cuarto y con prisa buscó su chubasquero y se lo puso sobre su pijama.

Bajó al vestíbulo pensando en que por fin tenía la oportunidad de hacerse amigos. Se encontrab algo nervioso, pero eso era lo de menos, pues la alegría invadía su cara cada vez más que se acercaba a la puerta.
Sin embargo, esta alegría no se podía comparar con aquella vez que sus padres le regalaron un piano personalizado, o la vez en la que su abuela le ofreció un micrófono por su quinto cumpleaños; aunque se trataban de cosas relacionadas con la música, es decir, la cosa que más más feliz le hacía a Yoongi, la idea de tener amigos era inigualable. Claro, al fin y al cabo la amistad era algo que sus padres no le podían comprar, ni regalar.

Intentó ser lo más discreto posible, para que su niñera no lo pillase.
Abrió la puerta y se puso la capucha, mientras se intentaba ajustar su botas de plástico.

—¡Jong, mira!—aquella niña dulce señaló con su pequeño dedo índice a Yoongi corriendo hacia ellos.

Jonghyun agarró de la mano a su amiga y ambos se acercaron a Yoongi.

—Llevas lo mismo que nosotros. ¡Qué guay!. ¿Quieres ser nuestro amigo?—comentó Jonghyun con entusiasmo.

—¿Amigos?—el corazón de Yoongi parecía haberse iluminado. Nunca antes alguien se había atrevido a acercarse a él, lo cuál le había causado tristeza durante sus cinco años de vida.

—¿No quieres?—esta vez fue la niña quien le preguntó.

—¡Claro que sí!.—el sabía que no podía desperdiciar esta oportunidad, además, aquellos niños le habían caído muy bien.—me llamo Min Yoongi.—estiró su diminuto brazo para darle la mano a Jonghyun.

—Yo soy Kim Jonghyun—le correspondió el estrechamiento de mano. Una escena totalmente adorable y la cuál quedó grabada en la mente de ambos durante todas sus vidas.

—¡Doongi!—qué bonito nombre.—a pesar de que la pequeña pronunció mal el nombre del pelinegro, a este no parecía importarle.—Encantada, yo me llamo Shin Yoora. ¡Venga vayamos a jugar!
  

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Se acerca lo bueno fantasmitas 💕

Soongi ✨