¿Con derecho a NO enamorarse?

Capítulo 32

Continué siguiéndola sitiéndome como en una misión secreta hasta el bar que había al lado de un parque, no muy lejano a nuestro edificio. Me escondí tras un arbusto y ví como Tess miraba impaciente la hora de su móvil minuto a minuto.

· Narrador

La chica miraba el reloj del móvil impaciente.

- ¿Dónde mierda está James? - Susurró al aparato, como si este le fuera a contestar. El teléfono empezó a vibrar y se apagó, - Oh, no, bebé, no me abandones ahora. - Suplicó a su IPhone con la esperanza de que "volviera a la vida".

Lo guardó refunfuñando en el bolso y se apoyó en la pared del local. Al final Matt había conseguido lo que quería, estar de nuevo con Tess, a  solas.

Sintió unas manos que le taparon los ojos y que le ponían algo bajo la nariz que olía realmente bien.

- ¿Quién soy?

- ¿James? - Preguntó confusa, juraría que esa no era su voz. 

El chico se tensó y apartó su mano del rostro del ella.

- Ten, es para ti. - Dijo dándole la rosa que anteriormente le había dado a oler.

- Matt. - Se extrañó. - Gra-gracias. 

Al darse cuenta de que el otro con el que su primastra había quedado era Matt, apretó la mandíbula y los puños.

Oh, no. No cenará con ese gilipollas. - Pensó Christopher. Se levantó del arbusto y caminó hacia ambos.

- Hey. - Llamó su atención. - ¿Qué haceis aquí? - Preguntó fingiendo sorpresa.

- La pregunta es qué haces tú. - Dijo Matt encarándolo.

Tess estaba confusa, no sabía qué hacer, si James estuviera ahí seguro que sería más fácil, pero por alguna razón, la había dejadado plantada.

- Yo le invité. - Carraspeó. - Le dije que viniera, ¿no es así? - Posó su mirada en la de su primo, a lo que este asintió confundido. - Vamos a sentarnos, tengo hambre. - Entró en el bar rápidamente y empezó a morderse las uñas nerviosas. Zanjaría el asunto. Por fín sabría toda la verdad.

- Aquí está bien. - Dijo Matt sentándose en una mesa con forma redonda. Tess y Christopher hicieron lo mismo.

- Hablar. Ahora. - Exigió la chica bajo las miradas de incredulidad de sus acompañantes.

- ¿Cómo?

- Lo sabes perfectamente, Matt. - Rodó los ojos. - ¿Por qué yo?

El chico de ojos azules tragó saliva, ¿cómo había averiguado que él también formaba parte de la apuesta? Ninguno de los dos sabían bien qué decir, aunque ambos conocieran perfectamente el motivo.

- Creo que eso ya no importa. - Añade.

- ¿Me lo estás diciendo en serio Matthew? - No podía creérselo. ¿De verdad le estaba diciendo eso? ¿Tan poca importancia le daban? - Christopher, ¿no piensas decir nada? - Dado que sabía que ninguno articularía palabra, Tess siguió hablando. - Catorce años y tú, juegas conmigo. - Señaló a su primastro. - Dos años pasando página y llegas tú. - Ahora señala a Matt. - Y vuelves a ilusionarme. ¿Pero sabéis que es lo que me quitásteis que más me dolió? - Se le humedecieron los ojos. En ese momento, solo unía a ambos chicos una cosa, el odio que Tess les tenía a ambos en ese preciso momento. - La dignidad. Jugásteis conmigo como si fuera un objeto, porque sabíais que haría cualquier cosa con tal de teneros... Y no se os ocurre otra cosa que... ¿Una apuesta?

- Éramos unos críos, Tess. - Dijo por fín Christopher rascándose la nuca. - Era un reto para nosotros. - Se removió incómodo en el asiento.

Tess tragó saliva y se pasó ambas manos por los ojos repentinas veces.

- ¿No teneis nada más que decir?

- ¿Es muy tarde para pedirte disculpas? - Preguntó Matt agarrando su mano y marándole a los ojos. - Princesa, yo me siento fatal.

- Un poco más falso y no naces. - Resopló Christopher.

- ¡Callaros de una jodida vez! - Gritó la chica de nuevo al borde de las lágrimas en medio del restaurante. - ¡Inmaduros! - Cogió su bolso y salió a paso firme del local. Así no iba a arreglar nada, tenía que cogerlos por separado, y lo iba a coseguir, costase lo que costase.

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Hola bebeeees he vuelto!!! 

Q tal están???

Quería deciros q estoy empezando con una nueva historia, encontrareis el prólogo en mi perfil, se llama Pride, de todas formas, aquí os dejo la sipnosis, (la novela la empezaré cuando termine Inocencia como Felicidad): 

Lou Anne Cox; tímida, fría, distante, ORGULLOSA.

Ethan Crowell; amigable, social, divertido, bromista, ORGULLOSO.

¿Ellos dos? El día y la noche, el agua y el aceite.

Dicen que los polos opuestos se atraen… ¿Serán ellos la excepción?

- ¿Y si es así por qué nunca me llamaste?
- No sabía qué decirte, Lou. - Dice sonteniéndome la mirada.
- Debiste venir antes... - Aparto la vista de Ethan bajando la cabeza y éste se frota los ojos.
- Estoy aquí, ¿no? - Sonrió de la manera en la que solo él sabe hacerlo.

QUE VOTEIS Y COMENTEIS SIGNIFICA MUCHO :)

También está haciendo una nueva historia @Tatipg, está bastante bien, se llama Principios de amor

VENGA, TODOS A LEER!!!

Laura, xx