Aliada.

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A pesar de la ansiedad que había tomado control de su cuerpo, y las náuseas causadas por el pánico, Michelle no pudo evitar sonrojarse al recordar la conversación que tuvo con sus amigas hace tan solo unos minutos.

Y en esos momentos no sabía qué le sorprendía más: el que Peter Romanoff aparentemente fuera su vecino de arriba o que el chico estuviera fumando.

—Um...—Balbuceó, sin saber bien qué responder. Escuchó un tipo de risa de parte del chico, y ella no entendía qué era lo gracioso de la situación.

Él le dio una calada a su cigarro, Michelle pensaba que estaba mal que los adolescentes fumaran, pero no podía evitar pensar que el ver a Peter Romanoff de esa forma solo agregaba más a la reputación de chico misterioso que se había ganado en Midtown, si alguien de su clase se enterara de que el chico fumaba, sin duda Peter solo se ganaría más admiradoras y más miradas de odio de los chicos cuando caminaba por los pasillos de la escuela.

—¿Qué pasa, milaya miss?—No pudo entender lo que él había dicho, pero sí recordó el haber escuchado al chico mencionar que su madre era rusa, así que era entendible que supiera una que otra palabra en el idioma.—¿la araña le comió la lengua?

Michelle parpadeó rápidamente.

—Pensé que la frase era «el gato te comió la lengua».

—Bueno, siempre me gustaron más las arañas.

Entrecerró los ojos.

—Si una araña te comiera la lengua morirías por el veneno.

—Bueno, no todas las arañas son venenosas.

Michelle no supo qué responder, no se consideraba a sí misma una aracnofobica, pero eso no significaba que se asustara al ver una araña ya sea en su casa o en la calle, a pesar de que ella normalmente no mostraba miedo en frente de otras personas.

Una vez más escuchó una risa de parte del chico, quien extendió su mano.

—Peter Romanoff, tu vecino de arriba.

Dudó por un momento, pero luego extendió su mano, tomando la del chico y aceptando el saludo.

—Michelle Jones. Me dicen MJ.—Apretó los labios, sin saber bien qué decir a continuación.—eh... de hecho no sé si me reconoces, pero estoy en tu clase.

Peter levantó una ceja.

—¿En serio, tú vas a Midtown?—ella asintió.—huh... creí que te reconocía de algún lugar.

Esperó que no se notara tanto su sonrojo. ¿Él la había reconocido? Ella nunca intentaba hacer algo para hacerse notar cuando estaba afuera o en clases, ni siquiera todas esas veces que Gwen y Kamala le habían rogado que le hicieran un cambio de look. Ni siquiera se molestaba en arreglar su coleta cada vez que notaba que ésta estaba despeinada.

Habían veces en las que ella había llegado a pensar de sí misma como un personaje de fondo, pero eso fue hasta que recibió el amuleto y decidió empezar a ser la anti heroína White Tiger, entonces, ¿la volvería eso en una protagonista?

—Um...—se rascó la parte de atrás del cuello.—supongo que estando en Midtown tú serías fácil de reconocer.

—¿Ah, sí?—Esbozó una sonrisa.

Ella asintió.

—He escuchado a la gente decir cosas sobre ti, las chicas te adoran y los chicos te envidian, a pesar de que pasas la mayoría del tiempo con la princesa, siempre veo tienes a alguien siguiéndote, preguntándoles todo tipo de preguntas a ti y a la princesa. Las cosas se pusieron locas después de lo que pasó hoy, hasta hay gente escogiendo equipos.

Romanoff [#2]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora