te amo Christopher (yaoi)

capitulo 12 Malentendidos

Es domingo por la mañana, le prometí a Ema pasar la tarde con ella, ya que desde hace tiempo no hemos, estado juntos. No sé si contarle lo que paso entre Christopher y yo demás que grita como loca y me hace contar todo con inmensa cantidad de detalles, mientras me mira embobada.

Salgo de la casa a pesar de ser 12 de octubre hace demasiada calor, invierno ven a mí, aunque los inviernos en California son igual a un día nublado, no hay mucho cambio que digamos. Al caminar me fijo que hay un camión de mudanzas al lado de mi casa, creo que han llegado vecinos nuevos. Sigo caminando hasta llegar a la casa de Ema no me agrada hablar con personas que no conozco.

-hueles como si me escondieras algo-fue lo primero que dijo al verme. Yo me rasque la cabeza nervioso no se cómo logran leerme tan fácilmente.

-no, nada solo que tengo vecinos nuevos al lado de mi casa-dije. No quería contarle que hice HARD no quería.

-¿Cómo son?-pregunto curiosa.

-no pude verlos-dije. Quizá estaba logrando desviar la conversación.

-SEBASTIÁN ROBERT SMITHS-grito. Odio que Ema me llame por mi nombre completo.- soy tu mejor amiga, nacimos el mismo día, tenemos una conexión, se que me ocultas algo-su rostro estaba serio, tan serio que me daba miedo.

-yo...-dije sin mucha fuerza.-yo... HICE EL AMOR CON CHRISTOPHER-grite. Acto seguido me tape la boca, que vergüenza mundo mátame, pero que sea pronto.

-AWW-grito desenfrenada.- no lo puedo creer, ¿Cómo fue? ¿Te dolió?, ¿te gusto?, ¿Cómo paso? ¿Qué se sintió ser el UKE? Y sobre todo ¿Qué sentiste?-dijo sonriendo. Muchas preguntas, me sentía acosado por su mirada penetrante.

-fue lo máximo, solo al comienzo, me gusto mucho, al comienzo fue un castigo... un dulce castigo, es una sensación rara, como si las cosas más bellas del mundo se mostraran ante mis ojos-dije rojo como tomate. Ema sonrió pervertida mente, luego suspiro.

-no lo puedo creer, mi mejor amigo...-pauso de repente.

-mi mejor amigo...-repetí sus últimas palabras.

-si te lo digo me dirás, EMA NO DIGAS ESAS COSAS-dijo mientras movía las manos.

-solo dilo...-dije inflando los cachetes. Ema sonrió.

-le dieron duro contra el muro-dijo riendo. Habría sido mejor no escucharlo.

-EMA NO DIGAS ESAS COSAS-grite inconscientemente. Vaya Ema me conoce tan bien que hasta sabe lo que suelo decir frente determinada situación.

-jajaja... tu quisiste escucharlo, bueno vamos a conocer a tus nuevos vecinos-dijo sonriendo.

-no quiero, odio hablar con personas nuevas-dije haciendo pucheros.

-bueno nos podemos quedar aquí y me contaras con lujo de detalles como ocurrió tu primera vez-sonrió malvadamente.

-que estamos esperado, vamos antes de que sea demasiado tarde-dije caminando a la puerta.

-jajaja... está bien-dijo riendo.

Caminamos hasta la casa de los nuevos vecinos, cuando llegamos estaba afuera un chico de como nuestra edad, de cabello rubio oscuro con unos ojos azules brillantes, es un chico lindo pero no tan lindo como mi novio.

El chico al ver a Ema quedo paralizado, a todos les ocurre lo mismo Ema con su aura de ángel te atrapa en sus redes, bueno tengo a la amiga más linda del universo. El chico camino hasta nosotros.

-hola ¿Cómo te llaman?-sus ojos no se apartaban de Ema.

-yo soy Ema-dijo. Los ojos de Ema lo examinaban, por alguna razón se lo que está pesando, muy lindo será pero se ve con poco cerebro.