24.

16.3K 749 88
                                    

Capítulo 24.

Ignacia se queda dormida apenas se acuesta sobre la cama. Se suponía que sacaría las cosas de su maleta, pero el sueño la venció.
Aún es muy temprano, el sol está recién apareciendo entre las montañas y aunque también tengo un poco de sueño, me quedo sentada sobre la cama mirando el teléfono.
Desde que nos subimos al avión que lo había ignorado, así que rápidamente respondo algunos mensajes de mamá papá y luego veo las redes sociales.

Me quiero morir. Las fotografías de las portadas de Internet muestran a Niall junto a una chica en un jardín en Los Ángeles, otras en un restaurante y la última en el aeropuerto.
Mi piel se enfría y mi ritmo cardíaco aumenta. No puedo creer que este pasando esto, sé que las fotografías del aeropuerto no se pueden evitar, ya que estaba lleno de prensa y fans por todas partes, pero las del jardín y el restaurante me dejan realmente sorprendida, expuesta y vulnerable, como si alguien hubiera irrumpido en mi vida personal abruptamente.

Mientras leo los cientos mensajes de Internet, noto la puerta de la habitación abrirse suavemente. Cuando miro, veo a Niall dándome una linda sonrisa.

-¿Puedo pasar? —Me pregunta apenas en un susurro.

-Sí. —Respondo y él camina hasta mi lado, sentándose en la cama junto a mi.

-¿Qué hacías?

-No sabía sobre esto. —Digo mostrándole mi teléfono, él frunce los labios.

-Sí lo vi, lo siento. Son cosas que no puedo evitar que sucedan. —Me dice con tristeza.

-Al menos no se ve mi cara. —Digo y sonrío.

-Por ahora. —Responde. —En algún momento tendrán que verte.

El pánico se apodera de mí.

-Pero yo no quiero que me vean, me juzgarán.

-¿Porque harían algo así? —Me pregunta confundido.

-Porque es cosa de mirarme Niall. —Le digo. —Dirán que soy muy fea para ti.

El rostro de él cambia completamente, sus ojos ya no están risueños.

-No digas eso Magdalena. —Me pide. —Eres una chica preciosa. Me encantas demasiado. —Susurra acercándose, él deposita su mano en mi cintura.

-Solo tú me ves así. —Susurro. —La gente es muy cruel.

-Magda. —Dice en tono severo. —Ven aquí. —Me pide y en un rápido movimiento me sienta en su regazo. Mis brazos rodean su cuello inmediatamente. —Me gustas, me gustas mucho. —Susurra acercándose a mi boca.

-¿De verdad? —Susurro de vuelta.

Su nariz acaricia la mía durante algunos segundos. Su respiración se mezcla con la mía mientras sus labios rozan los míos.

-Sí, me gustas mucho. —Repite para luego abrir su boca y pasear su lengua por mi labio inferior.

-Y tu a mi. —Respondo casi conteniendo el aliento.

Él sonríe y luego deja un húmedo beso sobre mis labios, luego continúa con otro, y después otro más. Mis ojos se cierran cuando su lengua se abre paso dentro de mí boca, al principio nos besamos tímidamente, mis labios se mueven suave sobre los suyos mientras que mi lengua con timidez roza la suya, provocandome un fuego en el estómago.

Sus manos curiosas abrazan mi cintura con fuerza mientras nuestro beso se hace mucho más profundo, con más necesidad.
Mis manos suben por sus mejillas y acarician su cabello. Jamás nunca, había besado de esta manera a un chico, cuando era más joven me di algunos besos con algunos chicos, pero eran parte de juegos tontos de adolescentes, esto es diferente.

Muy diferente porque su boca me demanda a continuar besándolo. No quiero detenerme, es por eso que tomo su labio inferior entre mis dientes y tiro suavemente de él, provocando que desde el fondo de la garganta de Niall siente un pequeño gemido.

-Me encantas Magdalena. —Susurra sobre mi boca enviando miles de mariposas a mi estómago.

-Me encantas mucho más. —Le digo para luego repartir besos en su mejilla y terminar nuevamente en su boca.

Nos besamos durante un tiempo hasta que decidimos dormir un poco. Niall está muy cansado y yo también, así que le pido dormir aquí conmigo en la cama, él acepta mientras abraza mi cintura y yo me apoyo en su pecho y dejamos que morfeo nos tome en sus brazos.

𝐃𝐄 𝐔𝐍 𝐒𝐔𝐄Ñ𝐎 𝐀 𝐋𝐀 𝐑𝐄𝐀𝐋𝐈𝐃𝐀𝐃 - 𝐍𝐇 𝐁𝐘 𝐍𝐀𝐓𝐇 🥀Where stories live. Discover now