Besos en guerra||Joerick||Terminada||

VI

Porqué yo siempre he sabido que tus besos matan.

Voy a sufrir. Se que voy a sufrir.

Pero lo que me atrae a Erick es más fuerte que el sentido común.

No debería, por el simple amor que se supone que me debo tener.

Me acerque a él y tomándolo de la cintura lo estrelle en la pared para besarlo.

Dignidad y amor propio es lo que me falta.

—¿Eso es un si?- cuestionó, yo asentí y volvió a juntar nuestros labios.

Pase sus manos de su cintura a su culo apretando levemente. Engancho sus piernas en mí cadera y me acerque más a él pegandonos más y pegándolo más a la pared.

Con una mano masajeaba suavemente su culo y con la otra pasaba de su pierna a delinear su cuerpo con cariño.

Si voy a sufrir no quiero saber qué ni siquiera lo intente lo suficiente.

Prefiero llorar en el hombro de mí amigo sabiendo que hice todo porqué funcionará que por no se capaz de al menos intentarlo.

Muy en el fondo aun tengo esperanza de que si le brindo todo mí amor, si se lo demuestro... si lo intentó, el me elegirá a mí.

Por qué me ama, se que me ama y aunque nunca me lo dijo la forma en la que me mira, en la que me toca, en la que me habla me dice que es así.

Asi que por ahora no pienso rendirme y espero no tener que hacerlo nunca.

Lleve mí mano derecha a su cintura.

Por debajo de la ropa. 

Mientras el tiraba de mis rulos con suavid tratando de juntar más nuestros labios aunque eso fuese imposible.

Parece no cansarse de saborear mis labios y eso me encanta.

Podría estar todo el día besándolo, abrazándolo, tocandolo y jamás me cansaría porqué ese es el poder que tiene el sobre mí. Siempre tener ganas de más.

Ganas de más de el.

De todo lo que haga con el.

Y eso me da miedo, sinceramente.