N U E S T R O S E C R E T O // y o o n m i n

Capítulo treinta

NARRADOR POV

Idiota.
¿Por qué me habías bloqueado?
14:19

Taehyung♡
Yo no fui, fue mi novio.
14:23

Idiota.
Que rápido me olvidas, Tae :(
14:24

Taehyung♡
Créeme que hasta yo me sorprendo de lo rápido que te he superado.
14:25

Mintió. Uno de los momentos más difíciles (aparte de la partida de su padre) fue cuando Hoseok se fue, dejando a un pobre y no tan inocente Taehyung solo.
De todas formas, él ahora tenía a Jungkook.

Idiota.
¿Sabes? Yo aún te extraño mucho...
14:26

Taehyung♡
¿Y? ¿Te pregunté?
14:27

Idiota.
¿Cuándo podremos hablar como personas normales?
14:27

Taehyung♡
Dejame tranquilo.
14:28

Por favor
14:28

Taehyung odiaba sentir ese molesto nudo en su garganta, odiaba fingir que no lo extrañaba. Tal vez él no necesitaba que Hoseok sea su novio otra vez, él realmente quería a Jungkook aunque se hayan conocido hace muy poco tiempo pero ¿Por qué le era tan difícil olvidar aquella brillante sonrisa y risa escandalosa? O la forma en la que bailaba cada vez que algo le salía bien, haciendo estallar en risas a Taehyung. La manera que se preocupaba por él cuando se sentía mal o como recibía mimos por parte del mayor. Ahora era Jungkook quien recibía cariños; no le molestaba, pero el también los necesitaba y del menor no nacía mucho que digamos.

El pelirrojo se quedó sentado en su cama, y limpió una lagrima de su mejilla cuando, luego de media hora, Hoseok ya no le había dado respuesta alguna.

🌼🌼🌼🌼🌼🌼🌼🌼🌼🌼🌼🌼🌼🌼

Unas cuantas calles más hacia el centro de la ciudad, Jimin y Yoongi se encontraban en el sofá de la sala luego de haber almorzado.
El más pequeño estaba viendo una película mientras Yoongi estaba con su teléfono, casi sin prestar atención a lo que la pantalla de su televisor proyectaba; estaba hablando con sus compañeros de trabajo sobre algunos cambios de horario que hubo en aquella empresa y quería asegurarse de que su horario sea el mismo de siempre.

Una escandalosa y tierna risa se hizo presente en la sala, haciendo que Yoongi quisiera saber la razón de tanta diversión.

-¿Qué pasó?

-Hyung, ¿estás viendo la película? -el menor giró un poco su rostro para ver como Yoongi tenía el teléfono en sus manos. Se levantó rápidamente y con un puchero miró al mayor.

-Estoy arreglando unas cositas, mi amor, perdoname -Yoongi lo miró, suplicando perdón con la mirada aunque realmente el menor no estaba enojado.

Jimin tomó el teléfono de Yoongi y lo dejó a un lado. Se levantó del sofá y se colocó a horcajadas sobre el mayor. Min lo miró con picardía y posó sus manos en sus muslos.

-¿Qué pasa? -preguntó Yoongi.

-Solo...quiero sentirte -Jimin sonrió de manera tierna, y lentamente se fue acercando al mayor para unir sus labios en un beso casi tan lento como los pasos de una tortuga.
Yoongi comenzó a masajear su trasero al antojo de el mismo y el pequeño soltaba leves gemidos.