Falice Oneshots [TERMINADA].

Ladrón y policía.

Atención: Lenguaje grosero, y algo de smut.

Quizás no sea la persona más buscada en el mundo. Pero ha causado muchos problemas, y este fue el colmo. Los pocos policías que residían en Riverdale no tenían la mayor eficiencia y desempeño en el trabajo, excepto uno, pero casi perdía el trabajo por enamorarse de una prisionera, la prisionera que cambió su vida por completo.

Y fue entonces cuando pasó. El gran robo, con más de treinta rehenes, a los cuales no les tocaron ni un cabello. Teniendo de cabecilla a Alice Smith, la mujer más buscada tanto en Riverdale como en Greendale. Y, por supuesto, su pandilla siguiendo sus pasos.

Ellos tenían solo treinta minutos para salir de ahí, o de lo contrario la policía llegaría y los acorralaría, y así fallaría el intento de fuga. La rubia lo sabía, alguien de su squad debía sacrificarse a salir, para distraer. Aunque los federales ya debían saber cuántas personas habían dentro del banco, porque para un robo así no podría ser conseguido por solo una persona.

"Tenemos cien millones de dolares, extraídos de la caja fuerte, y de los que estaban imprimiendo, los cuales no tienen marca" Neo le da las buenas noticias a Alice.

El robo hasta ahora estaba saliendo como lo esperado, pero siempre tuvieron un plan B. El ingeniero Piscitelli había hecho anteriormente un túnel que los llevaba a una zona aislada, la zona donde estudiaron las cámaras, y cada detalle a la perfección.

Los cuatro salían de la oficina central con todo el dinero en grandes bolsos negros, ellos vestían de rojo, y llevaban máscaras de distintas caricaturas, todo en su toque de trauma y drama.

"Entonces," ella sonríe. "Salgamos de aquí, chicos!" Alice grita con emoción.

"Dinero puro! Jefa, el diablo finalmente se vestirá de prada!" dice la mujer y la mejor compañera en el crimen.

"Hermione, te he dicho que gastes el dinero en algo que verdaderamente te beneficie"

"Entonces, vamos para gastar todo esto!" ella ríe, se colocan las máscaras y van a la sala donde yacían los rehenes.

"Ustedes fueron el mejor público que hayamos podido pedir, lamentablemente tenemos que irnos. Fue un verdadero placer" Alice dijo con una sonrisa casi macabra en su boca.

Ella aún escuchaba ligeros sollozos de algunas mujeres dentro. Lo que le preocupó, ¿es que acaso no estaba haciendo su trabajo bien? Aunque preguntar eso sería totalmente irónico.

"Quién está llorando?" ella pregunta y de inmediato los sollozos intentan ser retenidos en la garganta de los rehenes, claramente asustados. "No les haré daño, ninguno de nosotros lo hará... Ustedes me caen bien, saben?"

Ella quita su máscara y las personas bajan su mirada para no tener el contacto con los atacantes. "Jefa, qué demonios está haciendo?"

"Se trata de lo que ustedes no han hecho, ahora suban y salgan por donde les he ordenado" ella le dice a su pandilla, sin voltear hacia ellos.

"Jefa, ese es el plan B" en ese momento empezaron a sonar las sirenas de los autos policíacos. "Y estamos en él, así que mejor preparense"

"No la dejaremos aquí" el chico de veintiún años dice, ese chico al que Alice le había agarrado tanto afecto, casi tratándolo como un hijo, aunque ella no lo admitiría.

"Sí lo harán, ahora váyanse y disfruten, yo ya tuve suficiente en esta vida criminal, quiero tener suficiente en mi vida normal. De igual modo, ya tenía previsto todo"

"Y cuándo nos reencontraremos?" le pregunta otro de sus grandes compañeros, Hal Cooper.

"Se los haré saber a todos ustedes, ahora, tengo que abrir las puertas. Salgan de aquí" todos ellos subieron las escaleras para encontrarse con el túnel.