Cap 14

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Narrado por Autor

Las luces de la ciudad iluminaban la noche, la gente hablaba de sus vidas o cualquier otro tema, el aire de la noche soplaba a un ritmo suave y su mirada estaba perdida en el trayecto que recorría el automóvil, el pequeño cuerpo de su cachorro dormía despreocupadamente sobre su regazo, ignorando el mar de pensamientos y sensaciones que abrumaban la mente y corazón de su progenitor. ¿Quiénes eran los culpables?

Por un lado, estaba aquel peli-morado, a quien había conocido por cosas de la universidad, algo que no fue planeado por él, sólo fue el destino haciendo de las suyas al ponerlos juntos, pero había un detalle, aquel chico de hermosos hoyuelos tenía una linda chica por novia. Insignificante detalle, ¿verdad?

Al principio no le importo pues solo quería satisfacer los sueños húmedos con los que había vivido una tortura, pero no contó con que su testarudo corazón decidiera enamorarse de él, eso no estaba en sus planes, porque el contrario había sido claro desde el principio, no se involucrarían sentimentalmente.

Pero él había fallado.

Por otro lado, se encontraba un peli-menta a quien conoció desde hace mucho tiempo y amo de igual manera, pero el cruel destino los separó y no les dio oportunidad de volver a juntar sus corazones, estaban en contacto claro que sí, aunque hace unos años el contrario había abandonado la ciudad pero con su regreso su corazón se sintió más que emocionado, sin embargo, Jae parecía haber encontrado tambien a alguien a quien amar y no lo culpaba, el mismo había entregado un poco de su corazón a dos personas, aunque de manera equivocada.

"¿Jinnie, estas bien?" la voz del chico a su lado hizo que volviera a mirarlo, su entrecejo estaba levemente fruncido.

"Por supuesto" habló, tratando de sonar convincente, no necesitaba preocupar a su gran amigo.

"Estás tan distraído, que no lo notaste, pero hemos llegado hace quince minutos" respondió sonriendo, abrió la puerta de su lado y rodeó el auto para hacer lo mismo con la contraria.

"Déjame ayudarte" volvió a hablar tomando en brazos al pequeño infante.

Sin decir más caminaron hasta el departamento del menor, en un silencio cómodo para los dos.

"Gracias" dijo Jin, al estar frente a la puerta con la numeración correspondiente a su departamento. Intentó tomar de vuelta a su pequeño, pero el contrario dio un paso hacia atrás negándose con esa acción.

"Estas cansado, déjame llevarlo hasta su habitación" pidió, ante la cara confusa de Jin, luego de un instante el menor sonrió y asintió.

Tomó sus llaves del bolso y procedió a abrir la puerta, caminó lento hasta la única habitación que compartiría con su bebé, vio cómo Ken colocaba a su pequeño en la cama con suma delicadeza y sonrió, pero luego negó, era un sueño que estaba lejos de sus manos.

"¿Te apetece una taza de café?" sonrió caminando hasta la cocina con el chico detrás suyo.

"Me encantaría" respondió el mayor siguiendo a su contrario.

Poco después los dos chicos se encontraban con una taza de café cada uno en sus manos, se sentían cómodos en aquella mesa, como si el tiempo nunca hubiese pasado.

"Me gustaba mucho cuando preparabas café y nos sentábamos a platicar por largas horas" comentó el mayor de los dos, sorbiendo un poco de su calientita taza "Sigue siendo igual, tu café es el mejor" terminó de hablar.

"Amaba prepararlo para ti, amaba esos momentos" respondió el peli-rosa, su corazón bombeando acelerado por aquel comentario, Ken no sabía lo que causaba con sus palabras y eso era peligroso.

"Lo sé" confesó, busco la mirada del menor y cuando sus miradas conectaron tomó sus manos "Lamento haber sido un cobarde, yo... yo" se disculpó por el pasado, más sin embargo el menor no dejó que siguiera.

"Son cosas del pasado, kennie. No debes lamentar el pasado" interrumpió el menor, entrelazó sus dedos con los del contrario, su mirada cálida tratando de reconfortar al chico de cabellos de color menta.

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"Cachorro, hora de levantarse" llamó al pequeño con voz calmada, el nombrado abrió poco a poco sus hermosos ojitos, sonriendo al ver al mayor.

"Buenos días, papá" saludó el pequeño, reincorporándose en el filo de la cama, pasando sus manitas por todo su rostro en busca de borrar rastros de su largo sueño.

"Buenos días, cariño. ¿Dormiste bien?" habló, guiando al cachorro hasta el baño, ayudó en su aseo y lo llevó entre sus brazos hasta el comedor, dispuestos a tomar su desayuno.

"¿Papi, hoy volveré a ver al tío Ken?" preguntó curioso el infante, le emocionaba la idea de volver a su tío favorito entre sus tíos favoritos.

"Él no puede atendernos todo un siempre, debe trabajar igual que yo" respondió, tomando el primer bocado de su delicioso panqueque. Vio a su pequeño hacer un diminuto puchero en protesta y sonrió.

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"¡Buenos días, hyung!" saludó un alegre chico de mejillas rellenas, su sonrisa lograba deslumbrar a todos en aquel lugar.

"Buenos días ¿Cómo estás, Minnie?" devolvió el saludo, miró al chico y volvió a hablar "Olvídalo, no tienes que decírmelo, tu sonrisa te delata. Saliste con Min, ¿No es así?" un tímido asentimiento de cabeza, confirmó lo dicho por el mayor.

Sonrieron de manera agradable, girando sus cuerpos tomaron rumbo a la universidad. Al llegar dos siluetas conocidas aguardaban por ellos. Se saludaron animadamente, antes de ingresar al establecimiento.

Las horas de clases fueron calmadas, debido a la ausencia de algunos de los docentes, aunque poco importó para los estudiantes.

La campana que anunciaba el comienzo del descanso sonó, aunque nadie se inmutó puesto a que todos se encontraban dispersos por todos lados, sin un profesor que los controlara el desorden se había apoderado de muchos.

"Espero no haberlos preocupado con mi ausencia el día anterior" habló apenado el de cabello anaranjado, una vez todos estuvieron en la mesa de la cafetería.

"¡Estuve muy preocupado! ¡Como no tienes idea, Hobi!" soltó el mayor de todos, sin alzar la voz para no llamar la atención.

"Lo siento,realmente, lo siento mucho" se disculpó Hoseok con la mirada clavada en el suelo, se sentía culpable del mal momento que había pasado su buen hyung.

"Hobi, sabemos que tienes problemas, nunca hemos intervenido por respeto a tu privacidad, pero si necesitas algo, no dudes en hacérnoslo saber" dijo Jungkook, a lo que los demás asintieron de acuerdo

"Tengo eso muy presente" Hobi sonrió, tenía buenos amigos, pero aún no era el momento de que supieran a fondo de sus problemas. 

Volvamos A Empezar [NamJin/TaeJin/KenJin]Where stories live. Discover now