Todo Comenzó Con Una Melodía (izukuxkyoka)

Capitulo 13

Sorpresas tras sorpresa #1

Un día un cierta persona afirmo que, 'las casualidades no existen', que todo pasaba por una razón.

Que piensan?, podrá ser verdad esto?, por que no seguimos adelante y luego vemos si eso es así.

Día libre, día especial donde los estudiantes podía salir, no muy lejos por seguridad, pero el gran centro comercial estaba cerca por lo que ese era el destino de todos en el curso de héroes.

Por lo general, nadie entrenaba este día, como resultado los campos y áreas de entrenamiento están casi desiertos, si, casi, por que todavía estaban los que tenían rutinas o castigos etc.

Aunque eso no es lo que veremos ahora, en este momentos nos dirigiremos a la salida de la academia, donde vemos a una chica pelinegra, con cola de caballo esperando.

―Se tiene que demorar tanto?―  mientras jugaba con su pequeño mechon de cabello, ella miraba fijamente al cielo despejado.

Vestía una blusa roja sencilla y unos gins de mezclilla negros a juego, junto a una cartera color piel y zapatos sencillos color negros.

Vestimenta bastante casual, si tenemos en cuenta a la persona, la cual transformaba esas sencillas prendas, en un deslumbrante conjunto digno de una revista de moda, atrayendo las miradas de las personas que pasaban frente a la gran entrada.

―Lo siento, esperaste mucho, Momo?―  con un tono de disculpa, apareció una chica de cabello corto, vistiendo una blusa blanca sencilla un, gines corto y una chaqueta negra, en su mano traía una mini-cartera compacta a juego.

―veo que la encontraste, Kyoka―  la pelinegra miro a su mano viendo la cartera, y hablo.

―Si pase un momento difícil buscándola―  dando una sonrisa apenada, le respondió la chica.

―entonces, nos vamos?―  pregunto viendo en dirección del centro comercial.

―si, vamos―  siguiendo a su amiga, avanzo con ella a su lado junta al centro comercial.

Al llegar visitaron muchas tiendas, en especial de ropa, en donde los gustos de cada una choco con la otra, al ser casi polos opuestos, para luego pasar por tiendas de artículos.

Cosas para decorar, sabanas peluches, miraron mucho compraron poco, sin quien cargue sus compras no podían ser atrevidas, o seria difícil volver después.

Tomando un pequeños descanso después de volver de una tienda de peluches, ambas chicas ingresaron en una pastelería.

―nos da dos de fresa y dos malteadas dietéticas―  mientras, la pelinegra hacia el pedido, la mesera tomaba nota.

―la mía que sea normal―  alzando la mano, ella replico a la orden que la mesera escribía.

―Entiendo, dos pasteles de fresa, una malteada dietética y una normal, algo mas señoritas―  hablo muy profesionalmente la chica.

―no, nada mas― dijo la pelinegra devolviendo el Menú.

―Entendido, espero un momento― dijo recogiendo, los Menús, para retirarse de la mesa.

―Anoche pensé que no la contarías, que bueno que no salio mal― dijo Momo mientras veía a su amiga con una sonrisa fresca.

―si, que bueno que no hubo ningún mal entendidos―  dijo sonriendo nerviosamente al recordar cierta chica.

―Nm?, mal entendidos?―  ladeando su cabeza pregunto en duda.

―ya sabes, ellas pensaron que me gu-gustaba Midoriya―  sonrojándose a mitad de la frase contesto la chica.