͠s͠ᴏ͠ʟ͠ᴏ ͠ᴀ ͠ᴛ͠ɪ ͠ᴛ͠ᴇ ͠ɴ͠ᴇ͠ᴄ͠ᴇ͠s͠ɪ͠ᴛ͠ᴏ

¿Me concede esta pieza?

Los labios le temblaban, las mejillas le ardían.

—S-si...—Dijo con una voz fina y bajita—Tenemos algo…

Kiara miró a su madre esperando su rostro de desaprobación. Esperaba algún reto o algo. Pero lo que recibió la sorprendió completamente: un abrazo.

—¡Te felicito, cariño!—Dijo su madre alegre.—¡Sabía que este día llegaría pronto!

—¿Qué? Entonces, ¿No estás enojada por esto?—Dijo la princesa algo confundida—¿No te preocupas porque me haya enamorado de alguien que no pertenece a la realeza?—Preguntó.

—Cariño—Su madre acarició la mejilla de la joven—, Prefiero un joven como Kovu que te haga reír y te trate como se debe antes que un príncipe mimado y creído.—Sonrió—¿Qué no sea de la realeza? ¡Mírame! Yo tampoco fuí de la realeza hasta que me casé con tu padre.

—¿En serio?—Preguntó con una media sonrisa.

—Sí—Sonrió dulcemente su madre.—¡Pero esa no es historia para hoy!—Soltó una risita.—Debes estar lista para la fiesta y para tu novio—Dijo codeando a la joven.

—¡Mamá!—Gritó y soltó una carcajada.—¡Además, Le dije que no venga!—Kiara sonrió. Su madre cambió de tema

—Kion nos ha contado  a mi y a tu padre lo suyo con Fuli hace un par de días…—Comentó su madre arreglándole el cabello a la joven.

—¿Y qué dijo papá?

—Dijo que estaba bien. Es decir, sabe que Fuli es una joven dulce y atenta con Kion.—Sonrió—Aún no puedo creer que ambos tengan pareja. ¡Parece ayer cuando los tenía en mis brazos!—Dijo nostálgica.

Kiara soltó una risita mientras su madre terminaba de arreglarla le colocaba algunas flores rosa claro en su cabello.

—Ya lo entenderás cuando seas madre—Sonrió.

¿Madre? ¿Kiara? Nunca lo había pensado. Es decir, ser madre es una gran responsabilidad. ¡Cuidar niños no es nada fácil! Y no había quién para que la ayude a hacer lo correcto.

—¿Y? ¿Que te parece?—Preguntó su madre terminando de acomodar las flores.

—¡Mamá, está divino!—La joven se tocaba el cabello y sonreía.

—Una mujer nunca pierde el toque—Se encogió de hombros y soltó una risita.

—Mamá, prométeme no decirle nada a papá—Dijo su hija mirándola— Es decir, yo quiero decirle acerca de Kovu y yo.

—Mis labios están sellados—Sonrió y lo juró.

—Está bien, —La menor comenzó a caminar hacia la salida de la habitación—¿Nos vamos?

—Con gusto, princesa—Su madre sonrió.

La fiesta había empezado. Habían muchos invitados de diferentes tribus; estaba Jasiri, Fuli, Muhimu, y otros más.

—¡¿Fuli y tú son pareja?!—La de cabellos oscuros sonrió.—¡Felicidades!—Jasiri se notaba feliz por ambos.

—Gracias, Jas.—Sonrió el de pelo rojizo y acarició la cintura de su novia, la cuál se encontraba a su lado.

Fuli solo sonreía algo nerviosa y sonrojada. No le molestaban los halagos hacia ella y su pareja, pero la ponían levemente tímida en cuanto se referían a ellos.

—Iré a buscar algo para beber.—Fuli se separó un poco—¿Quieres que te traiga algo, solcito?

—No, gracias—Sonrió con dulzura al ver como su pareja se alejaba y se servía algo beber.

En otro lado del salón real, estaba Kiara charlando con una pareja algo mayor.

—¡Yo te lo había dicho! La princesa escucha a los demas—La mujer de mayor edad le dijo a su esposo—¡Igualita a su padre!

Kiara sonrió y le agarró las manos a los mayores.

—Espero ser como él.—Dijo con dulzura—¡Gracias por todo! Sus nietos deben estar felices de tenerlos como abuelos.

—¡Ojalá fuera así!—Habló el mayor en voz alta, pues se notaba que era algo sordo.—Tenemos tres nietos y ninguno de ellos nos presta atención nunca.

A Kiara se le partió el corazón al escuchar esto. Agarró más firme y dulce las manos de los ancianos y sonrió con cariño.

—Lo siento tanto—Dijo con suma pena—Pero apuesto a que los aman; solo que no lo demuestran. —Sonrió sin mostrar los dientes.

—Usted es excelente, princesa—Sonrió la mujer—Mufasa estaría muy orgulloso.

Kiara sintió como su corazón explotaba de orgullo al escuchar esas palabras. La comparaban con el mejor líder que había tenido la tribu.

—¡Mira, Mzee!—Dijo la mayor, llamando la atención de su esposo—¡Ahí está el príncipe Kopa! ¿Lo vamos a saludar?—Se notaba emocionada.

—¡Por supuesto, querida!—El mayor sonrió.

Los tres se saludaron con reverencias y la pareja mayor fue hacia Kopa. A Kiara le había encantando aquella pareja; a pesar de su edad, ¡Se veían tan vivos y llenos de amor!

La joven bajó la mirada y fue a buscar algo para comer a la mesa. ¡Estaba realmente muerta de hambre! Y los platos que habían ahí parecían tan ricos...

Fue y eligió algunos rollos de verdura que habían. ¡Eran riquísimos! Le tendría que dar las felicitaciones al chef luego de la fiesta.

Mientras ella comía, una música alegre y lenta comenzó a sonar. Provenía de la banda.
Todas las parejas presentes comenzaron a bailar, Kion y Fuli incluídos.

—Disculpe, princesa—Una voz masculina y familiar la llamó. Kiara se dió la vuelta—, ¿Me concede esta pieza?—Sonrió al ver quién era.

Su pareja.