Desafío de diciembre: drabbles AkaFuri

Dia 3: Frutas

Disclaimer: los personajes de Kuroko no basket y las imágenes que utilicé de portada no me pertenecen y sólo los uso con fines de entretenimiento.

Metió lentamente el objeto en su boca, ayudándose con los dientes lo metió hasta casi el final. Sostuvo un extremo con dos dedos mientras movía la lengua y el objeto chocaba contra su paladar, un sabor mezcla de dulce y ácido lo hizo suspirar, era el equilibrio perfecto. Movió sus mejillas para profundizar la sensación, una gota pegajosa cayó por la comisura de sus labios y llegó hasta su mentón.

Él ni siquiera lo notó, simplemente continuó saboreando la rodaja de limón con miel que Kyoshi había llevado para el enfrentamiento. Tan sólo era un juego de practica, pero era contra la intimidante Rakuzan, y luego de jugar los últimos cinco minutos de la primera mitad, Furihata Kouki se sentía cansado y ansioso. A pesar de que ninguno de los equipos había sacado aún a sus estrellas, el juego se sentía intenso, con un fuerte aura de competitividad. Claro, Rakuzan deseaba demostrar que no volvería a perder y Seirin quería probar que no habían ganado por pura suerte. Miró hacia el equipo contrario por inercia cuando se encontró con un par de ojos rojos viéndolo. Volvió la vista al frente medio atragantado.

El tiempo de descanso se acabó y los jugadores volvieron a la cancha. Se metió una ultima rodaja en la boca, apurándola antes de que Kagami las devorara todas y salió. Para su sorpresa, el otro equipo decidió que su estrella jugara. El castaño se puso rígido, lo miró con los ojos muy abiertos y apretó los puños con la intención de no demostrar su temblor.

Todo había cambiado desde que su otro yo fuera suplantado por el verdadero, había sido amable y agradable durante su platica en el cumpleaños de Kuroko, pero desde entonces habían pasado unos meses y no habían vuelto a intercambiar palabras, Kouki estaba nervioso, su presencia era intimidante.

Tragó los últimos resquicios de miel, sintiéndola densa y pesada al caer por su garganta: Akashi lo marcaba. Kouki quiso saludarlo pero de inmediato el partido inició y apenas pudo sonreír antes de ver la forma indescifrable en que lo observaba.

Koga le pasó el balón, pero estaba tan concentrado en los ojos rojos que ni siquiera lo vio venir. El pelirrojo dio un paso hacia Kouki tomando el balón, pero en lugar de correr con él, se lo pasó a Reo. Todos pusieron sus ojos en el pelinegro por sus peligrosos tiros de tres, ignorando que el líder de Rakuzan estaba a un suspiro de distancia del castaño.

-Tienes.. -murmuró con su sedosa y penetrante voz.

Furihata pegó un brinco cuando el pulgar de Akashi pasó por su mentón, subiendo hasta la comisura de sus labios, rozando la sensible piel rosada. Limpió el liquido pegajoso viéndolo desde arriba por su diferencia de altura. No contento con la expresión de terror del chihuahua, recorrió su labio inferior con el dedo, humedeciéndolo, y de inmediato descendió para lamer el sabor de su boca.

-Mm.. Limón y miel -dijo sonriendo.

Con sólo un minuto transcurrido, la entrenadora de Seirin cambió al numero 12, todos se sorprendieron hasta que vieron su cara roja, imaginando que tenía fiebre o algo similar.

Jejeje, subí los tres días juntos porque hoy es 3 y bueno, no empecé el desafío hasta hoy, lol. A partir de mañana voy a seguir subiendo día a día, espero completar todo el mes. Gracias por leer! Saludos.