Capitulo 7

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Abby

— Cuando era mas pequeña me encantaba jugar al té. Creo que todavía tengo mis pequeñas tazas.— Rio mientras tomo una galleta

— Muchos creen que ya estoy grande para jugar.— Murmura, algo desanimada. Frunzo el ceño

— Esta bien mientras te haga feliz.— Acaricio su cabello naranja, sonrie y mueve sus hombros

— ¿Y a ti que te hace feliz, tia?— Aveces me hace sentir algo mayor cuando me llama asi, pero me encanta

— Mmh.— Miro hacia otro lado— Pues, estar con ustedes me hace feliz.— Le sonrio — Me encanta estar con mi familia.— Digo suavemente

Una vez me hice la misma pregunta, al principio crei que era estar en el campo. Una vez fui y la pase muy bien, estar en paz en un lugar alejado, en todo verde y aire puro.

Pero luego me hizo aun mas feliz compartir ese momento con mi familia. Estar todos acostados, hasta el atardecer. Oh adore ese momento, Octavia y yo hicimos unos ricos panecillos, mi hermano jugaba a la lucha contra mis tios, aunque luego se enguizo un dedo. Mi hermana Liz tomaba sol, aunque era inutil, su piel esta condenada a ser blanca, es de familia. Luego como peinaba a mis sobrinas mientras todos los niños insistian en subir un arbol.

Y como olvidar como la tia Grace no compartia el vino. Al menos nos guardo un poco de queso.

— Que dulce eres, tia.— Observo sus pequeños ojos celestes, iguales a los del tio Hermes— Mi mami siempre lo dice.— Rio levemente

— ¿Qué juegan, perdedoras?— Giro mi cabeza, miro mal unos segundos a Ruby, es solo un poco mas grande que Isabella, pero juega mucho con ella

— ¡Al té!—Responde feliz, Ruby se acerca y se sienta en una de las sillas

— Entonces aqui viene la experta.— Hace movimiento para tronarse los dedos pero nada suena. Sonrio mientras me levanto

Ruby es alguien realmente astuta, es hija de mi hermana Liz, no biológicamente, pero prácticamente la crió. Es una hermosa rubia, inteligente y algo perversa, pero no es para que culpar, Liz es prácticamente igual.

Salgo de la habitación, mientras camino hacia las escaleras, mi celular vibra en mi bolsillo, lo tomo enseguida.

— ¿Hola?

Mi amiga hermosa, mi compinche..— Frunzo el ceño mientras escucho los sobrenombres que usa

Ya va a pedirme algo.

— Solo dilo, Kira.— Termino de bajar las escaleras y camino hacia la cocina

¿Conoces a Alan, cierto?— Si, el muchacho que nos acompaño al cafe y esta varias veces con ella

Mi rostro se calienta al recordar la escena del baño, creo que metere la cabeza al refrigerador.

— Si.— Respondo lentamente. Le sonrio a Octavia, me sonrie de vuelta mientras sigue amasando

Hara de seguro otros de sus ricos panecillos, dios, espero que tengan cubierta rosa.

Salgo al patio trasero, caminando alrededor de la piscina.

Pues, hara una fiesta en una cabaña.— Suspiro— Abby, esa cabaña es gigante. Es de sus padres, pero se la dejaron el fin de semana por su cumpleaños. ¿Y quieres oir la mejor parte?— No realmente —¡Es en la playa!

Kira, ya me canse de fiestas secretas.

¡No es secreta!, es un fin de semana. Seria como un campamento, estoy segura que te dejaran. Hablare con Octavia, ella me ama. ¡Y callate que solo haz ido a una fiesta!—Abro mi fiesta indignada

Mi DebilidadWhere stories live. Discover now