Aiden
No quito mi mirada de ella.
Aun queda en mi mente lo que dijo. ¿Qué ya esta acostumbrada?, ¿qué significa eso?, lo dijo con tanta naturalidad, como si fuera algo normal.
No es normal, nunca se me paso por la cabeza que ella es debil. Y me enfada el hecho de que otros si lo hagan. Nunca la subestime, solo en broma.
Solo hago esto porque quiero pasar tiempo con ella. Y porque quiero que me toque.
— Vamos. Atacame.— Sonrio — Y te prohibo que sonrias.— Me señala, aprieto mis labios. No puedo evitar sonreír, luce tan jodidamente tierna
— Bien.— Retrocedo un par de pasos— Voy a intentar derribarte.— Frunce el ceño
— No debes decirme lo que..— La interrumpo al lanzarme contra ella. Agachando mi pecho y rodeando su cintura, frunzo el ceño al ver que no cae al suelo
Demonios, es fuerte.
Hago un poco más de fuerza y lo logro, gruñe cuando su espalda llega al suelo. Pienso en tomar sus muñecas, pero ya tiene sus pulgares en mis ojos, haciendo presion. Gruño y muevo mi cabeza.
Siento como su pierna se coloca encima de mi brazo, empuja y mi hombro choca con el suelo. Quita sus manos de mi al mismo tiempo que la noto girarme. Para cuando abro los ojos, ella ya esta encima mio.
Parpadeo, mis manos quedan en el suelo. Miro con boca entreabierta sus piernas en mi cintura, subiendo lentamente hacia su rostro.
Eso, no me lo espere.
Sonrie victoriosa, mientras suspira.
— ¿Y?— No cambio mi mirada — Te dije que me sabia defender.
Incapaz de decir una palabra, me incorporo, mientras llevo una mano en su cintura, para evitar que caiga. Coloca sus manos en mi pecho mientras me mira desconcertada.
Inclino mi cabeza y la beso, sin poder controlarme.
Muevo mis labios rapido, aumentando cada vez mas la intensidad. La escucho jadear cuando deslizo mi lengua, muerdo su labio al mismo tiempo que tomo sus caderas, moldeandola conmigo.
Se separa y vuelve a jadear.
— N-No hagas eso.— Susurra, observando como sigo moviéndola contra mi
— ¿Porqué no?— Susurro, besando su mandibula, aun con apuro
Increible como logra ponerme con un par de gestos. Me vuelve tan desesperado, tan incontrable.
— Es-Estamos..— Jadea mas fuerte cuando succiono su piel — en la escuela.— Sonrio ante su piel
— ¿Entonces porque sigues moviéndote?— Susurro de vuelta, al notar que sus movimientos son solo de ellas. La observo, notando sus ojos cerrados. Miro sus labios entreabiertos, ya no puede controlarse
Es tan perfecta.
Siseo cuando presiona más, observo como se mueve, lenta y suavemente. Coloco mis manos en sus piernas y las acaricio.
— Lo haces muy bien, Lunita.— Susurro sobre su mejilla, ahoga un gemido y sus manos se aprietan a la tela de mi camisa
Quiero deslizar mis manos por la tela de su short, con intenciones de tomar su trasero. Pero un ruido llama la atención de ambos.
Ambos míramos hacia la puerta. Se ve al conserje entrar, junto a su carro. Pero esta tan concentrado con sus auriculares, que no nos ve.
Como un rayo, Abby desaparece de arriba mio. Me levanto luego se unos segundos. Doy un par de saltos antes de seguirla, tengo que bajar la calentura de ahi abajo.
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Mi Debilidad
WerewolfPara Aiden, encontrar a su mate de pequeño, fue una de las cosas mas faciles que le paso. Y creyo que siempre seria asi, facil. Pero por primera vez, nada salió como planeó. Debido a un acontecimiento, Abby es separada de el, de todos. Alejada de la...