Mi Debilidad

Capitulo 30

Abby

Mantengo mi mirada hacia adelante, concentrandome en el tenedor en la mesa.

Lo miro, cuando lo escucho acercarse. Me mira serio.

— ¿Porqué Aiden esta vigilando la casa?—  Se sienta frente mio. Lo miro sin contestar

Entrecierra los ojos y se inclina.

— No estaría haciendo eso si no sospecharia. Y no sospecharia si algo hiciste.

Al parecer salió bien.

— No hice nada.— Susurro

Suspira y tira su espalda hacia atras, aun mirandome.

— Por supuesto que no.— Susurra de vuelta— Mi dulce Abby nunca se arriesgaría. Siempre con tus buenos actos.— Se levanta de la silla, mantengo mi mirada en la mesa cuando se acerca— Tengo que admitir, que hayas sido siempre bondadosa. Es algo que nunca quise cambiar de ti.

Aprieto mi mandibula, apoya su mano en la mesa, aun mirándome.

— Y a pesar de todo, lo continuas siendo. — Me concentro en sus palabras

No se equivoca. A pesar de todo, incluyendo en su estupida organización, nunca cambie. Segui siendo comprensiva, empática. Incluso senti lastima por el.

— Tienes razón.— Susurro, frunciendo levemente el ceño

Miro su mano, respiro profundo y estiro mi mano hacia el tenedor, para después clavarlo fuertemente en su dorso.

Lo miro al mismo tiempo que grita leve, para después gruñir. Me mira, desconcertado.

— Tal vez debiera tomarme un descanso de eso.—  Murmuro

Frunce más su ceño, llevo mi mano a su espalda y tomo su arma. Me levanto de la silla mientras quito el seguro, miro hacia toda la casa.

— ¿Cómo..?— Lo escucho quejarse — ¿cómo..?

— ¿Cómo recuerdo todo?— Lo miro, se mantiene inclinado— No estoy segura. Pero para ser honestos, nunca fui esclava de tus chips, ¿verdad?— Aprieta su mandibula

— No ganaras en esta, Abby. No tienes un plan. —  Miro hacia las escaleras — Y para este momento, mis hombres ya deben estar tomando a Aiden.

Lo miro, frunzo lentamente el ceño.

— ¿De qué hablas?

— ¿No te lo dije?— Sonríe — Tenemos planes para el. Y ahora que esta vigilando la casa, no hace falta ir a esa tienda.

Aprieto mi mandibula, lo miro unos segundos más y luego me acerco. Tomo su teléfono, me aparto cuando intenta tomarme con su otro brazo.

Marco el numero que memorice desde pequeña, el de Octavia.

Lo miro unos segundos más y luego me alejo, caminando hacia el pasillo. Miro unos segundos el numero, preparándome mentalmente.

Suspiro y lo marco, mientras lo coloco en mi oreja.

— ¿Hola?— Sonrio levemente

— Octavia.

Escucho silencio unos segundos, aprieto mis labios.

— ¿Eres..?

— Abby.— Murmuro, la escucho jadear— O, no tenemos tiempo.

— Si esto es una trampa..

— No lo es. Lo prometo. Y creeme..—  Trago saliva— no sabes la emoción que siento al escucharte.— Cierro  unos segundos los ojos

Ahora que tengo todos los recuerdos de vuelta. Caigo en el que estuve un año entero sin ellas. Sin mis sobrinas, sin Aiden, sin Hermes, solo con desconocidos.