A través de la pared (Próximamente En Físico)

Capitulo 2

—Quizás el lunes esté de vuelta —dice Esmeralda abrazada a sus amigos.

—Si, ya verás que todo va a estar bien —dice Santiago besando su mejilla.

—Cuídala bien, chico malo —dice Sabrina a Ferrant.

—Es lo que haré —contesta sin importancia.

Ferrant y Esmeralda suben al vehículo rumbo al aeropuerto, con un gesto de manos se despiden de los demás.

—Siempre quise conocer a los Estados Unidos, pero por lo que veo, me conocerá a mi, ya que estoy ciega —dice bajando del avión, ya en Estados Unidos.

—Ya verás que todo saldrá bien —dice Ferrant tomando su mano.

Mientras Ferrant buscaba la pieza  en donde se quedarían unos días, en colombia alguien planeaba su muerte.

—A Ferrant lo traen aquí vivo o muerto —dice Fabricio dejando escapar el humo del tabaco.

—¿Cómo usted ordene mi señor? —contestan los hombres al unísono.

—Y si tienen que matar a la ciega esa, lo hacen sin pensarlo —ordena poniendo un fajo de dinero sobre la mesa.

—¡Así será!

Fabricio está detrás de Ferrant por una mercancía que le robó hace 1 mes. Ya que no puede con su jefe El Tigre, pues empezará con su mano derecha. Hará lo posible por tener a Ferrant entre sus manos y quizás raptar a uno de sus seres queridos, sería la mejor opción.

—Mañana sábado será la operación, hoy podríamos ir a cenar algún lugar —dice Ferrant.

—Mejor cenemos aquí, además no podré ver nada —contesta encogiéndose de hombros.

—Pues está bien —dice él.

Esmeralda cierra sus ojos para pensar en su padre y en Justin, una lágrima se escapa y ella la limpia antes de que Ferrant la vea.

Después de cenar se van acostar, ya que Esmeralda debe estar descansada y relajada para la operación.

—Gracias Ferrant —dice Esmeralda abrazándolo.

—¿Por qué Ratona?

—Por todo —dice sonriendo.

—No hay nada que agradecer, ahora duerme —dice besando su frente.

Esmeralda se quedó dormida muy abrazada a Ferrant.

La alarma los despertó con su escándalo, ambos se despertaron y Ferrant besó su frente sonriendo.

—Buenos días —dice ella sonriendo.

—Buenos días —contesta.

Primero  se duchó Ferrant para luego preparar el desayuno.

Esmeralda se duchó y se colocó la ropa que Ferrant le dejó sobre la cama.

—No voy a comer, no tengo hambre —dice Esmeralda acercándose a la mesa con sus manos tocando todo.

—Claro que usted va a comer, jovencita —dice tomando el tenedor para darle el desayuno.

—He dicho que no —dice molesta.

Ferrant recoge la mesa algo disgustado, 
Pero no la culpa, sabe que debe estar nerviosa porque en unos minutos la someterán a operación. 

Después de esperar unos largos minutos por fin la pasan con el doctor que le hará unos chequeos previos a la operación. 

—Todo saldrá bien —dice Ferrant besando su frente.

—Te amo Ferrant.

—Yo igual pequeña —dice abrazándola. 

Después que le realizaron unos exámenes, la llevan al quirófano para empezar con la operación. 

2 horas después...

—¿Puedo pasar a verla ya? —pregunta ansioso.

—Si joven, por favor procure que no se quite las vendas aún  —dice la enfermera.

—De acuerdo —dice casi corriendo a la puerta.

Las ganas de verla y saber que todo está bien, lo traen desesperado.

—Ferrant, ¿eres tú? —pregunta mirando a todos lados con los ojos vendados.

—Si nena.

Esmeralda sonríe muy alegre, abre los brazos para esperar el abrazo de Ferrant que llega de inmediato.

Ella le acaricia el rostro y luego los labios, se detiene ahí haciendo trazos con su dedo  índice. 

Sonríe y luego toca su cabello.