Capítulo 5

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¿Es tarde para pedir perdón? Lee el rubio cuando se asoma al balcón y mira el nevado suelo de la calle.

El chico abre la boca alucinado y se inclina para ver quién hay abajo justo en el momento que ve a una cabellera rizada acompañada de una caja de bombones en la mano.

'' ¿Me ha comprado bombones?'' piensa emocionado el ojiazul.-te perdono.-dice lo suficiente alto como para que el chico lo escuche.

El rizado sonríe y le hace un gesto para que baje.- no puedo estoy castigado. Tengo que estudiar para mañana. Examen de música.- Harry hace una mueca y se queda pensando.-nunca pensé que la música pudiera joderme. Bua, anda que subo yo.

El chico frunce el ceño confundido.- pero... ¿Cómo...?-dice en el momento en que Harry guarda en su mochila la caja y comienza a trepar por la fachada con la única ayuda de la tubería y pequeños salientes.

Niall alarmado alza la mano para ayudarle.- te vas a matar Harry baja de ahí.-El no le presta mucha atención y continúa subiendo. Por suerte piensa Niall no se cae.

Saca de su mochila la caja de bombones que minutos antes había guardado para poder trepar y mientras lo saca Niall se lanza a sus brazos con entusiasmo.-sabía que te gustaba comer mucho y pensé ¿Por qué no?

El rubio se sienta en la cama y observa la caja con detenimiento. Cuando la abre y va a coger un bombón de chocolate blanco Harry le golpea la mano.- No tan rápido señor Horan. Quiero jugar antes a algo. Si no, ¿qué sentido tendría?

Niall lo mira extrañado pero al final le presta atención dejando la caja en la cama.- está bien.-dice el rizado.- uno se tumba, el otro le coloca el caramelo en alguna parte del cuerpo y lo saborea.

El chico se remueve algo nervioso.

El estaba seguro de que de esa no pasaba, pronto Harry se daría cuenta de que a él realmente le gustaba y ¡PUMM! A la mierda su amistad.

Siempre le pasaba lo mismo con sus parejas. Aunque nunca había salido con un chico si era verdad que algunas veces se había enamorado de una chica que tan solo buscaba su amistad y le dejaba totalmente destrozado y estaba seguro de que con Harry sería igual.

Era obvio que a Harry no le gustaba. Vale que fuera bisexual y que estuviera proponiendo a Niall un juego muy prometedor pero, no, el estaba seguro de que no le gustaba, ¿o sí? Esa era la gran pregunta que toda persona se planteaba a estas alturas.

-Bueno no es solo un juego, son varios.- tragó saliva y se puso aun más nervioso cuando Harry se aproximó.

No pudo evitar tartamudear al hablar.- ¿q-qué h-haces?- dijo sin poder controlar sus palabras.

Harry sonrió coqueto sin apartarse de Niall el cual estaba extremadamente cerca.- pues verás, diría yo que no se puedo jugar a este juego sin antes probar algo que llevo queriendo hacer durante toda la semana.- argumentó Harry dejando embelesado al rubio el cual estaba en el cielo.

El chico volvió a tartamudear sintiéndose estúpido.- ¿e-el-q-qué?-Harry juntó casi al instante sus labios con los del chico rubio. Ambos parecieron encajar a la perfección. Ambos recibieron una corriente por toda su columna y algo en la barriga que les hizo estremecerse al segundo. Lentamente fueron dejándose llevar por el beso el cual cada vez se volvía más apasionado y fogoso pero sin dejar atrás la dulzura con la que Niall lo besaba o la seductora forma de besar de Harry. Los labios de Harry para Niall fueron como algodones de azúcar, o mejor, si eso podía, eran suaves, carnosos y muy, muy, muy apetecibles.

Cuando ambos se apartaron por falta de aire no podían creer lo que estaba pasando. Vale, se habían besado. ¿Pero por qué habían sentido todas esas cosas?

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