sᴇᴄᴜᴇsᴛʀᴀᴅᴀ ᴘᴏʀ ᴀᴋᴀᴛsᴜᴋɪ ↝ ᶤᵗᵃʰᶤᶰᵃ-ˢᵃˢᵘ ✓

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Disclaimer: los personajes no me pertenecen, son de Mashashi Kishimoto. Y el fic mucho menos me pertenece, todo es obra de crazygurl12, yo solamente lo traduzco para que llegue a más lectores.

Antes de comenzar con el capítulo pondré la aclaración que puso la escritora ante una parte del cap anterior.

Algunos lectores mencionaron en sus comentarios que Konan siempre llama a Pein, bueno... Pein. (La ortografía debería haber sido Pain, pero prefiero usar Pein porque en algunas otras traducciones de manga se escribe así, "Pein"). Pero como Konan es muy estoica y sin emociones, quería agregar un poco de giro y hacerla llámalo Yahiko... Y sé que fue Nagato quien controla a Pein, y Konan es muy consciente de eso... pero aún así, amaba el alma que poseía ese cuerpo en el pasado... por lo que los sentimientos tienden a deslizarse a veces.

-ooo-

-Eso no es lo suficientemente bueno para mí. - Hinata apretó los dientes y sus manos se convirtieron en puño. Después de todo lo que la hicieron pasar... después de las cosas que han hecho para hacer el esfuerzo...

¿Esa fue la única respuesta que recibirá?

Pein se ve impresionado. -Valiente y firme. Exactamente lo que necesitamos. - El líder le sonrió a la niña. -¿Estás segura de que podrías manejar la verdad si te la voy a compartir? A veces... es mejor ignorar el conocimiento y dejar que todo fluya sin preguntas.

-No me importa. Necesito saberlo.

-Como quieras. - El líder asintió y tomó una mano temblorosa sobre las suyas. Sacó algo de su bolsillo y lo colocó cuidadosamente en el dedo medio de Hinata. -Una algo que acabas de ganar... esto ahora te pertenece.

Fue un anillo.

-Bienvenida a Akatsuki.

Eso congeló su cuerpo como el hielo. ¿Bienvenida a Akatsuki? Hinata miró al hombre más alto con incredulidad mientras todo lo que decía... todo, se hundía con un golpe frío.

La llevarán a su organización.

Quieren que ella sea una Akatsuki.

Al darse cuenta de alguna manera, Hinata regresó al presente, y su aturdido estado de repente se convirtió en miedo. Cuando encontró unos momentos para componer su conmocionado yo, fue entonces cuando sintió una ira incontrolable. Mirando fijamente al hombre que se hace llamar Pein, ella retiró la mano de su abrazo e hizo lo siguiente que todos ellos nunca esperaron que ella hiciera.

Agarró el protector de la frente de la frente de Pein...

Y se lo golpeó en la cara.

-¡Nunca le daría la espalda a mi pueblo! - Hinata dio un paso atrás, tratando de mantener una posición firme porque esperaba algún tipo de regreso o un contraataque.

Ella observó a Pein tambalearse por la sorpresa, y su mano se alzó para limpiarse la boca.

La habitación se llenó repentinamente de papeles voladores, y empezaron a envolver a Hinata comenzando a elevarla. Ella los pateó e intentó quemarlos con su chakra, pero todavía estaban empezando a pegarse en su cuerpo en grandes cantidades. Tarde o temprano, la envolverán con pergaminos de la cabeza a los pies.