°30°

3.6K 496 31
                                    

Fuera impulso de idiotez. Parte final.

¿Estas listo bebé?

Ven, has que me llegue hasta la garganta.

Xiao Zhan estaba a punto de explotar, no se contuvo en ningún momento, invadió el agujero de Yibo tan fuerte que el chico no podía hacer más que gritar y suplicar por más placer.

— Ah!! Xiao mmmm Zhaaann~

La habitación, llena de la dulce melodía que le otorgaba su amante, se fue acallando con el paso de las horas.

...

Yibo miraba a Xiao Zhan tan tranquilamente dormido, y a pesar del dolor que sentía, observar esa bella figura siempre le sanaba.

Xiao Zhan fue despertando poco a poco debido a cierta incomodidad al sentir que alguien lo estaba acosando con la mirada, y ahí estaba, aquel chico de ojos profundos mirándole con amor.

— ¿Como estás cariño?.- pregunto Xiao Zhan

— ¿y tú como crees? ¿Humm? Maldito salvaje.- decía Yibo con una sonrisa irónica.

Así empezó la mañana.

Yibo tuvo problemas durante todo el día, a penas se podía mover por lo que Xiao Zhan tenía que ser su sirviente leal. No le molestaba para nada, de hecho, se sentía feliz de poder hacer cosas por Yibo.

...

Pasaron varios días antes de que Yibo se sintiera en condiciones para salir a disfrutar una caminata. Xiao Zhan quería llevar a Yibo a un lugar especial que había descubierto en Internet hacia pocos días. El lugar se llamaba "Gusu Lan" y se encontraba a las afueras de un poblado llamado "Yumen Jiang" más allá de la ciudad en la que vivían. Las pocas fotos de lugar y falta de información sobre el mismo le atrajo de inmediato a Xiao Zhan, además, sentía que debía ir si o si a ese sitio.

Ir allí en motocicleta sería imposible, por lo que Xiao Zhan rento un auto para poder realizar el viaje cómodamente.

Todo estaba listo, solo faltaba ponerse en marcha.

Como el sitio quedaba muy lejos, ambos tomaron turnos para conducir. El paisaje era magnífico, mientras más avanzaban, toda señal de civilización se hacía más pequeña hasta que al final todo era verde, verde y más verde.

Durante el viaje, los chicos extrañamente no hablaron mucho, quien más hablaba de vez en cuando era Xiao Zhan sobre historias entretenidas que tenían como protagonistas a personas con serios problemas morales, pero Yibo sólo escuchaba sin emitir ningún juicio o queja, ya que estaba acostumbrado a escuchar historias como esas salir de la boca de su novio casi todo el tiempo.

Luego de varias horas en la carretera, si se le puede llamar así al camino pedregoso por el que habían estado manejando, la línea que simbolizaba un camino abierto, se hacía cada vez más pequeña hasta que llegó el punto en el que no podían seguir avanzando en auto.

— Genial, estamos en la nada.

Decía Yibo con poco entusiasmo.

— No, de hecho estamos en Yumen, nuestra primera parada.

Yibo quedó atónito.

Volviendo Hacia Ti [Terminada] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora