°31°

5.6K 649 165
                                    

"WangXian"

Fue muy difícil para ambos chicos encontrar una forma de hallar el tal pueblo de Yumen. Yibo incluso llegó desesperarse por qué no encontraba ningún letrero por ningún sitio, por otro lado, Xiao Zhan estaba feliz mirando los alrededores, fascinado por el ambiente tan destruido que se levantaba sobre sus hombros.

— Es hora.

— ¿Estas seguro?

— Ya han llegado hasta aquí.

— ¿Crees que puedan con ello?

— Si no lo intentamos, no lo sabremos.

Fue así como Lan XiChen alzó las manos y ajusto su cinta. Tomó la flauta de Wéi Wuxian: Chenqing y tocó la melodia que pondría final a su trabajo: "Memories".

El suave sonido la flauta llegó a los oídos de los muchachos, que extrañados miraron a un punto en el paisaje en el que se abría un arco de piedra y que en la parte superior se leía: Yumen Jiang.

Xiao Zhan no sabía lo que ocurría, no podía moverse, no podía respirar. Yibo estaba incluso peor, sus manos tiritaban y sus ojos no le permitan ver claramente lo que se desplegaba frente a él.

Las voces tan familiares, los gritos, el llanto, las carcajadas, los regaños, todo les volvía locos a más no poder, ya no podían aguantar, era demasiado para ellos. La melodia nunca dejó de sonar.

Entre la maleza, atravesando la tierra, cuerpos de todos los tamaños se asomaban e intentaban pasar a través del arco de piedra. Esos cuerpos no eran físicos, parecían imágenes borrosas de personas con vestimentas antiguas, personas que hablaban de todo tipo de asuntos.

Derrepente la suave melodia de Chenqing paro y empezó una melodia más fuerte y caótica: Past. Fue entonces cuando todo se volvió negro.

...

— ¡Lan Zhan! Mira, por aquí esta el camino, ves, te dije que sabía perfectamente como llegar.

– mnh.

Ambos caminaron cuesta arriba por un largo sendero, Wéi Ying daba saltos de alegría y Lan Zhan sonreía calmadamente ante la alegría de quien caminaba frente a él. Luego de varias horas de camino, cuando la noche estaba tan espesa que creían no poder más, un nuevo arco de piedra se asomaba sobre sus cabezas, pero esta vez lo que decía en la parte superior era: Gusu Lan. Habían llegado.

Todo el paraje estaba desierto, pero aún así se escuchan las voces de los antiguos alumnos, de los antiguos maestros, de los antiguos amigos.

— Vaya, este lugar no ha cambiado en nada, ¿eh?

— Ya era hora de que llegarán.

— ¡JIANG CHENG!

Las figuras de Lan Xichen, Jiang YanLi, Jiang Cheng y Lan Zishui aparecieron frente a los jóvenes Wéi Wuxian y Lan Wangji.

— ¡Voy a matarte bastardo! ¿Tienes idea de lo que hemos tenido que pasar?

— ¡Jiang Cheng!

Volviendo Hacia Ti [Terminada] Where stories live. Discover now