Destinado

543 109 34
                                    

Habían estado descansando un poco y la noche estaba algo fría, era de esperarse a lado del mar, el peliverde estaba sentado a lado de la fogata frente a un dragón perezoso que permanecía inerte en la suave arena de la isla.

Mientras tanto, y por otro lado se encontraba Katsuki, el cual miraba las estrellas, le gustaba verlas porque así recordaba la sonrisa de Eiji, el cual, al igual que las estrellas iluminaba su obscuro camino...

De pronto sus pensamientos se esfumaron al sentir a Kirilagarto acercarse a él, en un principio se tensó, pero después de un momento se calmó y permitió la compañía, aún era extraño tener a alguien que era Eiji, pero a la vez no junto a él.

- Que tanto piensas mini Bakugou?

- Nada que te importe...

- Jajajaja realmente eres igual a él...pero sabes? eso es lo que más amo de su carácter, su enigmática y complicada mente, es un nudo de dudas, inseguridades, dolor, sin embargo, cuando lo necesito está ahí, diciéndome que todo estará bien, y que después de la tormenta viene la calma...

- Realmente te dice eso?

Preguntó asqueado el rubio.

- Jajaja...no, jamás me lo diría, pero sí lo piensa, y lo sé, porque cuando me mira y toca mi cabello me siento en paz, protegido... mi destinado....mío...

De pronto en la mente del rubio se vino aquella duda de nuevo, destino?, porqué el lagarto estúpido ahora era mortal, que había pasado...

- Es verdad lagarto, no me has dicho como es que funciona eso de tu inmortalidad...

El medio dragón se tensó de inmediato, se puso rojo hasta el tope y comenzó a moverse como si buscase una salida ante esa pregunta...

- Yo...he....

- No vas a huir está vez...

Bakugou, quien se había puesto de pie, se lanzó contra él en una explosión, y quedó por encima suyo, forzando sus muñecas a la arena...

- Y-yo...

Kirishima forcejeaba pero no podía safar el agarre...

- Solo dilo lagarto, que más da...

Kirishima dejó de forcejear, y pronto el rubio lo fue soltando, dando entrada a una conversación, Deku había quedado en brazos de morfeo, por lo que el ambiente estaba enfocado en ellos dos...

- C-cuando un dragón nace...éste nace como dragón, ya sabes, alas, escamas, no tiene siquiera un indicio de ser humano, solo es un dragón...le toma al rededor de 100 años para alcanzar una madurez juvenil, o algo así...no recuerdo muy bien cuántos años vagué por el mundo, pero estaba bien, ya sabes, comía cuando quería, dormía esas cosas...

- Eso que tiene que ver?

- B-bueno...en ningún momento, yo no...los dragones son dragones...

El rubio se exasperó

- YA SOLO DILOOO!

Kirishima se quedó en blanco, tragó saliva, y prosiguió...

- Yo en ningún momento tuve pensado ser mitad humano, pero...había una vieja leyenda entre dragones del norte, decía que si un dragón encontraba a su destinado éste sería transformado a su imagen...la imagen del verdadero amor...

- Algo así como Shrek?

- Qué?...

- Lo siento, no interrumpo, prosigue...

- C-claro...un día salí de caza, estaba por capturar un delicioso pescado cuando alguien me lo ganó, estaba algo molesto, sin duda, pero entonces lo vi, vi a un joven solitario, el cual me miró con altanería, jajajaja recuerdo su mirada y el como intenté atacarle, me dijo que sería suyo, puedes creerlo? aún cuando lo tenía bajo mis garras me miraba sin miedo y me repetía que sería de su propiedad, por un momento sentí lástima por él, hasta que escapó de mis garras, peleó contra mi hasta que salió vencedor, -"serás mío lagarto"- lo dijo mientras pisaba mi hocico, fue entonces cuando pasó...

El rubio estaba completamente atento, no quería siquiera parpadear...

- Él tomó una daga y..en vez de lastimarme él se cortó a sí mismo, y con su sangre me marcó, fue ahí dónde me transformé por primera vez en humano...luego de buscar respuestas, me dijeron que si asesinaba a mi "destinado" yo volvería a ser un dragón puro, de lo contrario me quedaría así para siempre, como mitad humano...claro que intenté matarlo....pero no era fácil, ya que, mientras más pasaba tiempo con él, más me intrigaba conocerlo, pronto me di cuenta que nunca podría dejarlo, que me había enamorado estúpidamente de un humano...cuando se lo dije, lo aceptó y posteriormente me confesó que me amaba y...y fue cuando pasó...

Hubo un silencio, se veía una extraña vergüenza pero a la vez...una profunda tristeza.

- Los dragones y los humanos no tenían buenos términos, intentaron matar a Bakugou, y cuando lo defendí, nos volvimos un blanco. Ambos. Nos cazaron por 2 años, hasta que Bakugou me pidió que lo matara, solo así terminaría todo ésto, pero, yo no podía, como me pedía eso? no después de todo lo que habíamos pasado...así que, intenté matarme, pero mi coraza no me dejaba atravesar mi piel, ni siquiera la humana, Bakugou me dijo que él era mortal, que tarde o temprano moriría y que me dejaría solo, y que si lo mataba ahora por lo menos tendría el respaldo de la isla dragón...sin embargo no quise eso...mi madre siempre me contaba un cuento, sobre un humano y un dragón enamorados, decía que él dragón había entregado su inmortalidad a la Luna....

Kirishima de puso rojo...tan rojo que competía con el rojo de su cabello.

- Así que, para nosotros, entregar a la Luna es como...pues....

- Cogieron?

- QUEEEE!!!

Bakugou no tenía pelos en la lengua...

- Vamos lagarto, no te pongas así, si era solo eso pudiste empezar por ahí, "No soy inmortal desde que el bastardo parecido a ti me la metió..."

Kirishima estaba rojo, pero algo aún le reconfortaba...

- En realidad....yo...yo le di a él...

El orgullo de Bakugou se desplomó...luego de un largo silencio, ambos decidieron que dormir sería lo mejor, al menos por parte de Katsuki...

Las dos versiones de ti (KIRIBAKU)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora