SETENTA Y UNO/ GEMELOS

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Al llegar a la casa de Zaniah y Jean vieron a Rosalie, Emmett, Alya, Marcel, Carlisle, Jasper, Alice y Esme.

- ¿Ya nació? - preguntó Christopher.

- Si - asintió Marcel con una gran sonrisa - están en la habitación principal.

- Están muy bien - agregó Carlisle.

Vieron a Stella y Jean bajar las esclaeras. Ambos traían una gran sonrisa de oreja a oreja, cuando Jean vio a Marcel le hizo una señal y este negó.

- ¿que pasa? - preguntó Christhian dejando de sonreir, ellos se miraron y sonrieron - me confunden... ¿qué sucede?

- Zaniah quiere verte y a ti Christopher - dijo Jean sonriendo.

Los gemelos se miraron por un breve momento y siguieron a Jean en completo silencio. Al llegar a la puerta de la habitación se detuvo.

- Yo sólo los acompaño hasta acá- Jean se paró al costado de la puerta.

- ¿no ingresaras con nosotros?- preguntó mi Christopher arqueando una ceja.

- Tengo dos razones para no dentrar... la primera es porque mi hermosa novia-esposa me lo pidió y la segunda es porque no quiero verlos tan sentimentales - Jean fingió que lloraba.

- como quieras - dijeron en coro los gemelos.

Cuando ingresaron a la habitación los gemelos se quedaron congelado.

- Zaniah... a ... yo - balbuceo Christhian mientras caminaba a paso torpe hasta llegar a la cama y sentarse a un lado.

- Vamos, carga a Adhara - dijo Zaniah entregándole a la bebé.

- pero y si y si.. - volvio a balbucear mientras temblaban sus manos.

- No seas miedoso - contestó poniendo a la bebé en los brazos de su hermano - sé que no la harás caer.

- Christopher... - dijo Zaniah con la voz entrecortada extendiendo sus manos.

Christian al voltear se dio cuenta que su hermanl derramaba gruesas lágrimas.

- Creo que alguien va necesitar a su tío preferido - sollozo Zaniah. Christopher caminó en automático hasta llegar al otro costado, abrazó a su hermana - te quiero - dijo separandose para agarrar a la otra bebe que dormia en su regazo, se la entregó con mucho cuidado.


- se llama Alhena - dijo al ver que su hermano abrazaba con mucho cuidado a la bebé- no nos dimos cuenta que eran dos niñas.

Christopher cerró sus ojos aferrándose con delicadeza a la pequeña bebe.

..................Flashback...................

- ¡Mamá!¡ no le pegues!¡no! ¡por favor! ¡fue mi culpa! - gritaba el pequeño viendo como su madre pegaban a su hermano con una soga.

- ¡Son unos inútiles!¡para eso los mantengo! - de un golpe su hermano cayó al piso, cuando se venía el segundo golpe se interpuso.

- ¡déjalo!¡pegame a mi!¡ pegame a mi! - se arrodilló suplicando.

Christopher rogaba con todo su corazón y su alma que su madre se arrepintiera y parará... que los abrazara asegurando que fue sólo un error, que los amaba hasta el infinito y que serían felices.

Un golpe horrible en la cabeza lo hizo volver a la realidad, sólo era un triste imaginación.

- Para mañana quiero que su limosna pase de los cuarenta dolares... Está vez quiero el doble- le agarró una mejilla y la apreto muy fuerte - no se que harán... bailen, canten, háganse los ciegos o algo parecido.... o si no tendré que usar otros métodos.

- Si si si - asintió Christopher muy rapido -lo de hoy no volverá a pasar... se lo juró.

- Sólo son una carga, en mala hora tuvieron que nacer - dijo destapando una cerveza - crei que sólo era uno - soltó una carcajada, el pequeño ayudó a su hermano a levantarse - doble gastó.... ¡¡¡que asco!!!

- Vamos... - susurró avanzando a pasos lentos hasta llegar a su habitación.

- No tenías que detenerla - espero Christhian cuando su hermano cerró la puerta.

- ¿y que te maté a golpes? -pregunto entrr lagrimas - no... no... ¡¡no!! Si tan sólo no hubiera aceptado...

- No fue tu culpa, hermano tenías hambre... Sólo aceptaste un pan - dijo Christhian ladeando una diminuta sonrisa.

- te llamé y el joven también te invitó... nos hizo preguntas, ella nos estaba vigilando - dijo en voz baja muy arrepentido por haber aceptado.

- Deja de culparte - Christhian le limpió las lágrimas.

- ¿y si escapamos?- preguntó sollozando.

- Tiene a Lu - respondió preocupado - mientras tenga a Lu no podemos movernos.

Lu... era la hermana mayor de los gemelos, ella los amaba mucho que siempre buscaba la forma de protegerlos, siempre les decia que cuando escuchaban las voces de hombres en la casa trancaran la puerta de su habitación y que se taparamos los oídos con una almohada o que se escondieran en el closet. Ella siempre aparecía con golpes en la cara y en los brazos. Los gemelos nunca preguntaron, porque ella les hacía callar al instante.

Rechazada// CrespúsculoWhere stories live. Discover now