Open Mind

13. Almas gemelas

APOV

"Señorita Steele... señorita Steele".

Escucho una voz suave mientras salgo de mi sueño. La señora Jones está frente a mí con su dulce sonrisa. Estoy acostada en el sofá cubierto con las mantas, sintiéndome confundida. Mi cabeza descansa sobre la chaqueta de Christian y su aroma masculino me está arrastrando a mi sueño. Mmm, me gusta su olor.

"Señorita Steele". Me siento, avergonzada, tratando de ocultar la mancha de baba en su chaqueta.

"Sra. Jones, buenos días". Mi cabello debe ser un desastre... y mi ropa. Odio que siempre haya extraños en este lugar, presenciando mi aspecto desaliñado temprano en la mañana. Corrección, soy la extraña aquí.

"Buenos días. El señor Grey me pidió que la despertara, son las siete y media, señorita Steele."

"Oh, gracias. ¿Dónde está él?"

"Se fue hace una hora, había una situación". Su rostro muestra preocupación.

"¿Algo malo sucedió?"

Ella se encoge de hombros. "¿Quiere desayuno, señora?"

¿Señora? Debe ser la primera vez que alguien se dirige así a mí.

"Oh por favor, llámame Ana".

"Ana" Ella sonríe.

"Gracias, pero tendré algo más tarde, la cocina de la oficina está bien equipada".

Mientras caminaba hacia 'mi' habitación, la Sra. Jones me detiene. "Lavé su ropa de ayer, están colgando dentro del armario". ¿Qué? Pero escondí mi ropa debajo de la almohada. Siento una ola escarlata subiendo por mi cuello. "Gracias, señora Jones".

En la ducha, trato de averiguar qué pasó después de mi pesadilla. Estoy un poco avergonzada, pero hay algo nuevo allí. Recuerdo cómo me abrazó, cómo me relajé y dejé de llorar, sintiéndome segura y, de alguna manera, en casa. Y ese es el núcleo central de mi confusión, me sentí como en casa y pude volver a dormir. Nunca he podido volver a dormir, siempre estoy demasiado conmocionada por mis pesadillas.

En tan poco tiempo, Christian se ha vuelto tan querido para mí, pero sé que José también era querido para mí y, sin embargo, nunca, nunca me transmitió esa serenidad, esa paz. ¿Que es diferente?

Por supuesto, José nunca preguntó sobre la fuente de mi angustia, sobre el contenido de mis pesadillas; y en menos de dos semanas Christian lo sabe todo, el pasado, el presente y las implicaciones futuras. Parece genuinamente preocupado por cómo me afecta y qué estoy haciendo para superarlo. ¿Por qué José nunca preguntó? ¿Cómo es que compartí intimidad durante tanto tiempo con alguien que sabía tan poco sobre mí, alguien que nunca sintió curiosidad por mis demonios, mis preocupaciones, mi tristeza? Eso se siente mal, muy mal.

Me envuelvo en una bata de baño y voy directamente a mi teléfono celular. Necesito hacer esto.

-José, las flores son preciosas, gracias. Respecto al mensaje: no me interesa y es definitivo. Por favor, respeta eso. A.

Luego voy a mi bolso y saco su tarjeta. Lo leí una vez más antes de tirarlo a la basura, sé que he tirado más que eso, y esa certeza me da satisfacción. Tiene razón, el amor de José por mí es mediocre. Es mejor estar sola, no tener mis expectativas aplastadas a cada paso. Siento gratitud hacia Christian porque la verdad es que él también es bueno para mí. En solo un par de semanas, él está más cerca de mí que José después de años. ¿Es esto real? ¿En solo dos semanas? ¿Ni siquiera dos semanas? ¿Como si él fuera mi alma gemela? No, no puede ser, somos muy diferentes.