Open Mind

26. 30 De Agosto

APOV

El libro va a uno de los cajones y enciendo mi computadora para verificar mi horario, necesito cancelar las reuniones con los autores. Hay un recordatorio, una sesión con la Dra. Greene esta tarde. ¿Debería cancelar eso? No, tal vez ella pueda ayudarme con las pesadillas, algunos consejos para evitarlas.

Mi teléfono suena, es un mensaje de Kate.

-En el Avión con Elliot;) regreso en 3 días. X

Elliot irá a Barbados con ella. Mm, ella también está de luna de miel, espero que hable con él, o tal vez ya lo hizo y por eso... Quién sabe, este no es el comportamiento de  Kate. Te lo dije, Katherine Kavanagh, nunca digas nunca.

-Diviertete, no te olvides que también estás trabajando.  X

Hay un correo electrónico de SIP, de Elizabeth, me están invitando a almorzar con ellas y es casi mediodía. Escribo una respuesta rápida aceptando y luego cancelo mis reuniones con los autores. Compartir algo de tiempo con esas mujeres es una oportunidad que no voy a perder, me gustan.

¿Ahora que?  Ah, por supuesto...

-Hola.  Necesito salir, almorzare en SIP.  Por favor dile a Taylor.  Te extraño x

Después del mensaje, casi de inmediato, mi teléfono comienza a sonar. Pongo los ojos en blanco, ¿quién podría ser?

-Hola Christian.

+ ¿Es obligatorio?

-Si.  ¿Me podría enviar el número de teléfono de Taylor, por favor?

Silencio.

+ Lo enviaré a él.

-¿Estás bien?

Silencio de nuevo.

+ Solo estoy preocupado. Iría contigo, pero necesito asegurarme de que todo esté bajo control antes de irnos.

Hmm, bajo control. Prefiero la Compañía bajo control y no yo.

-¿Cuando?

+ Mañana, temprano en la mañana.

Al mirar la carta estelar frente a mí, me doy cuenta de que extraño a mi mariposa. Me siento como la flor que dijo que soy, ansiando la alegría de compartir mi dulce néctar con él. Hay flores carnívoras, ¿sabes? Sí, sueño con ellas comiéndose a cierto grillo molesto. Lo acabas de ver hace tres horas. Aún así, lo extraño.

-¿Estás solo ahora?

+ Sí, ¿por qué?

-Necesito algo de ti, voy a subir.

De pie, guardo mis notas en los manuscritos dentro de mi bolso demasiado grande pero súper útil y salgo de la oficina enviando un beso a su constelación. Necesito consultar el calendario de astronomía, Neptuno está en su aproximación más cercana a la Tierra en septiembre y ese gigante azul es alucinante.

En el piso 20, voy directamente a donde está Andrea. No puedo creer que ahora soy "amiga" de algunas de las rubias frías, resultaron ser agradables. No es su culpa, estoy segura de que en los parámetros de trabajo, el primer y más importante punto es: no seas amable con las visitas y sonríe robóticamente.

"Hola Andrea".

"Hola, Ana. ¿Qué puedo hacer por ti?"

Como de costumbre, siendo la asistente educada, a pesar de que ahora estamos usando nuestros nombres. Recuerdo cuando Leila se quitó la sudadera en el auto y vimos las cicatrices en sus brazos. Andrea abrazó a Leila y ese gesto me hizo verla con una nueva luz, su hermoso rostro estaba retorcido de dolor emocional y rabia.