Open Mind

37. Caminos

APOV

Las voces son familiares, excepto un par de ellas, especialmente la suya. Y habla demasiado, como... todo el tiempo.

"Cricket, ¿te acuerdas de él?"

Mi propio animal mítico, mitad grillo, mitad mujer, crickaur, me mira con desaprobación.

"No, pero está loco, como tú".

"¿Quizás un novio?"

"O un vecino espeluznante obsesionado. ¿Quién sabe? Lo que yo sé es esto, ustedes dos no deberían reproducirse".

"Oh, eres mala".

Te extraño mucho, Anastasia. ¿Por qué no te has despertado?

Ha pasado un tiempo desde que estoy aquí, viviendo dentro de mi propia mente como lo he deseado tantas veces antes. Aquí tengo paz, aquí nadie me juzga, ni me lastima, ni me abandona. No puedes controlar eso allá afuera, donde los que amas a veces se van sin siquiera mirar por encima de sus hombros para ver cómo estás, simplemente... se van. Como lo hizo mi madre.

Sin embargo, escuché su voz una vez, ella estaba aquí, incluso lloró. Irónico.

Oh, ahí está él.

Sé que el planeta Ana es hermoso, pero vuelve a nosotros, a mí, por favor, Anastasia.

Entonces él sabe dónde estoy. Él me conoce. ¿Por qué no puedo recordarlo?

"¿Te acuerdas del otro?"

"Por supuesto cricket. Paul. Sé que se está pudriendo en el infierno, me dijeron las voces".

"¿Puedes explicarlo de otra manera?, Me dijeron las voces, suena bastante esquizofrénico".

"Sabes que en realidad eres una voz, ¿no?"

"No me insultes, soy mucho más que eso".

Hay un acantilado frente al océano en mi país de las maravillas personal, cada vez que escucho su voz voy allí y me siento a escuchar. Me habla de lo que está sucediendo en el mundo real, las cosas que le gustaría hacer conmigo, incluso cantó un par de veces. Tan cursi y romántico... un poco dulce. Mi tipo.

La última vez me leyó una de mis historias. La reconocí de inmediato, pero la verdad es que ya no estoy interesada en mi mundo interior, paso la mayor parte del tiempo sentado al borde del acantilado escuchándolo.

Oh no, creo que me estoy enamorando de él. ¿Es eso posible?

Ahí está Kate!

Ana, ya me has mostrado cuánto me amas, hasta el punto de poner en peligro tu propia vida. Así que hazlo por mí, vuelve amiga mía, todos te necesitamos, todos te extrañamos.

Te estás mintiendo a ti misma allí, esos unicornios y arcoíris no son reales, la verdadera mierda está sucediendo aquí. Y las elecciones serán pronto, el mundo cuenta con nosotras para su supervivencia. Despierta por favor.

Despiadada como siempre. Me siento tentada, sin embargo, recuerdo el miedo, las pesadillas, la frustración, las preocupaciones. No, estoy enferma y cansada del mundo real.

"Cobarde."

"Grillo, ¿por qué?"

"Cobarde. Eres mejor que eso".

"Siempre juzgándome".

"Ese es mi trabajo. Me creaste con ese propósito".

"¿Yo qué?"