Amar es para tontos

CAPÍTULO 16

Odiamos geografía


—¡Blair!¡Hazme caso por favor!—Me llamo una Gia muy desesperada, aparte que hace unos momentos me estaba lanzando pedazos de papel en bolitas. Ya que está sentada detrás de mí.

Sus gritos muy sutiles, nótese mi sarcasmo,me sacan de la gloria que ya estaba por alcanzar. Tengo mucho sueño y solo quiero mi cama aparte que me está doliendo todo el cuerpo.

—¡Qué mierda quieres, Salinger!—Le grito en un susurro muy enojada, porque recordemos que estamos en clases y si hago la mínima bulla seguro que me mandan a detención.

— Ash, se ve que alguien se levantó con mal humor, yo que te abre hecho—ahora si la tipa empieza a susurrar.

—Ya dime ¿Qué quieres?

— Hoy David va hacer una fiesta pero tú ya sabes de esas súper Boom.

— ¿De esas en dónde solo la fiesta termina cuando la policía llega?— pregunto curiosa levantando mi cabeza de mi mesa.

— Si, si, esas mismas. ¿Le entras al plan?— pregunta Gia en susurro.

— Se ve que tienes el gran soporte, querida Blair.— nos corta Logan. —Lo digo por tu aspecto, quien sabe en donde te habrás metido niña.

En la mañana solo tuve tiempo para tomarme un café negro super rápido y no pude consumir algún solido o así como para poder sentirme super-recargada. Aparte mi vestimenta creo que no está tan presentable como lo suele estar otros días, donde mi glamour esta en los detalles. 

— Ash, tú que sabes idiota. Mi domingo fue tan tranquilo que lo quise seguir aplazando a un lunes como hoy, pero me impidieron a hacerlo, porque supuestamente tenemos "clases". —  digo acentuando la última palabra con mis dedos.

— Ahora que lo recuerdo, eso es mentira B. —menciona Gia algo pensativa —ayer tu mamá me mandó un texto para saber si ya habías llegado bien a mi casa, pero claramente no llegaste porque nunca te vi.

— Ah eso, si es que salí a comprar a la panadería que queda cerca a tu casa, ya sabes que me gustan los croissants de ahí, y pues tal vez mi mamá se confundió y pensó que me iba a quedar en tu casa, pero no te preocupes luego regresé a mi casa, porque no te quería hacer perder el tiempo o así con mi indeseable presencia.

— Ay ya cállate Blair. Mira ya te perdoné tus caprichos, así que estate tranquila porfa.— menciona Gia. Lo que me gustan de las nuevas semanas es que puedes hacer como si la anterior semana ya haya sido historia pasada y no quede algún rencor o así.

 —Owww mis princesitas ya se han reconciliado como siempre— Logan expresa con cierta ternura fingida—la verdad es que ya debería recibir terapia por la culpa de ustedes. Hacen que sea una persona muy inestable sentimentalmente.

— ¡Jóvenes Salinger, Monroe y Tompson!— llamó la profesora de geografía — hoy se quedan en castigo al salir de la escuela.

— Pero si no hacíamos bulla— refutó Gia.

— Eso no niega a que hayan estado desatentos a la clase. De ahí se quejan de que en este país no saben bien de geografía.

— Quién quiere saber de geografía— susurró demasiado bajo Logan, pero por lo visto la profesora logró escuchar un poco.

— ¿Qué fue lo que dijo, joven Thompson?— advirtió la profesora quejosa.

— Nada, nada, creo que fueron los pajaritos de la calle. Tan lindos ellos que nos alegran las mañanas—  dice Logan con una sonrisa evidentemente fingida.