RED MOON»KSJ

🍃6🍃

Todos quedaron en total silencio.

Una mujer, cabellos dorados, complexión increíblemente delgada, aspecto enfermo y sollozos incomprensibles abandonaban su garganta.

Aria se acercó, Yoongi siguiéndole e ignorando las palabras de los otros tres reyes pidiéndole mantenerse al margen.

—Estaba en mis tierras, puedo acercarme a verificar si así lo quiero— fue su contestación.

La mujer dejó de llorar, Namjoon la dejó en el suelo pues en sus intereses no estaba cargar a una desconocida llorona y por supuesto tampoco tenía ganas o disposición para llevarle la contraria a la reina Aria, quién era igual de voluble que Seokjin.

No volvería a pisar el castillo de invierno una vez el matrimonio fuese oficial.

—¿La reconoce?— preguntó el rey de invierno, Jungkook se acercó a su lado, solo por si acaso.

—No luce como una habitante de primavera— era extraño, conocía a todos en su reino, pero jamás había visto aquél rostro— definitivamente no.

Seokjin asintió.

—Bien— se agachó, viéndola a los ojos— entonces adiós.

Aria observó con pavor y terror como el rey levantó con tanta facilidad el cuerpo de la mujer, con una sola mano, la alzó a lo alto y presenció sus dedos comenzar a apretar alrededor de su cuello.

—¿¡Pero qué hace!?

Namjoon, Jungkook y Seokjin observaron con pereza a la reina, pues la respuesta era más que obvia, sin embargo Hoseok también se alarmó y molestó, pidiendo que la soltara.

Lo hizo, su cuerpo se desplomó de nuevo en el suelo.

—¡No puede simplemente matarla!— grita— ¿Está demente? debemos averiguar primero quién es y como ha llegado aquí.

—Lo lamento, reina Aria— levantó la mano el moreno, él era quien se encargaba de las fronteras— pero si usted quién es la gobernante de su estación no tiene idea de que hacía esta persona en su frontera, lo más sensato es eliminarla. Está en las reglas.

—¿Quién escribió esas reglas?

—Yo mismo— responde— y gracias al cumplimiento de ellas, no hemos tenido problema alguno.

La reina se rió, con una seña le ordenó a su guardián ocuparse de la chica quién menos mal, aún respiraba. La levantó en brazos.

—¿Esa es la solución a todo, entonces?

—Si— Seokjin no tenía mucha paciencia...— es una intrusa no identificada, si no se asesina, se encierra y créame que es preferible morir a estar toda la vida encerrado— la vió cruzarse de brazos— Jungkook, mátala.

—Como ordene, alteza.

—¡Nadie va a matar a nadie!— levantó la voz Hoseok, finalmente haciéndose escuchar— la llevaremos al palacio y discutiremos que hacer con ella.

Jungkook se detuvo, observó a su rey de manera atenta y pudo ver como el enojo comenzaba a hacer parte de él.

—¿Vas a desobedecer las ordenes del rey de las cuatro estaciones?— pero para sorpresa de todos, Namjoon dio dos pasos y se colocó a la par de Seokjin— ¿Crees que puedes contrariar un mandato del rey Seokjin? Es imperdonable.

Aria bajó el tono de voz, olvidando aquel gran detalle, no estaba discutiendo con cualquier persona y había perdido los estribos.

—Solo digo que puede ser una mujer inocente.

—No sabemos siquiera su nombre— responde el más fuerte— no habla, no se defiende.

—Es por eso mismo que-

Las palabras del gobernante de verano se ven interrumpidas.

—Rosé... — seis pares de ojos se posan en el cuerpo escuálido que carga el guardián de la reina— no... no me maten, por favor... piedad.