↳«Capítulo 16»

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MIN YOONGI
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La familia Min siempre se ha caracterizado por su dinero y sus enormes reconocimientosen distintos ámbitos.

Cuando nacieron los mellizos Min Youngsoo y Min Yoongi ganaron mucho más mérito. Ellos dos eran perfectos.

Los mellizos Min siempre fueron brillantes en cualquier cosa qué hacían siendo el mayor orgullo de sus padres. La infancia de ambos hermanos fue un poco complicada ya que siempre estaban ocupados en ser los mejores en todo y jamás tenían tiempo para jugar o divertirse como los niños normales.

—¿Les gustaría jugar conmigo?—Preguntó un pequeño niño de piel algo morena mientras le daba una amistosa sonrisa a ambos mellizos que marcaba sus lindos hoyuelos—Me llamo NamJoon. Kim NamJoon.

—Uh, ¿a qué podríamos jugar?—Preguntó Yoongi mientras se acercaba al pequeño chico de hoyuelos tocando este con uno de sus dedos—Tienes unos lindos hoyuelos.

—Gracias. Y podemos jugar con carritos, tengo muchos pero siempre los termino rompiendo.
—NamJoon hizo un puchero tristeante lo último dicho pero luego su mueca de tristeza volvió a alegrarse —¡Eso no importa! Vamos a jugar, ¡JongDae, Minseok tenemos nuevos amigos!

Los hermanos Min se encogieron de hombros y se miraron entre sí para luego ir caminando con tranquilidad siguiendo al moreno.

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La etapa de la adolescencia fue algo complicado para ambos hermanos, teniendo que separarse. YoungSoo fue a estudiar a Mokpo mientras que Yoongi se quedó en Seúl viviendo con sus padres. Cómo todos sabemos en la adolescencia empieza aquella etapa de auto descubrimiento en donde forjamos nuestra personalidad, en donde descubrimos nuestros gustos y disgustos.

Bien, Min Yoongi descubrió que le gustaban cosas "distintas" (considerando qué para los demás eran anormales), él no era aficionado de ver lindas chicas en minifaldas pavoneándose cual trofeo frente a sus ojos aquello no le causaba más que repulsión.

Él prefería las cosas más simples.

Cómo una piel clara, media estatura y ojos De cachorro.

Prefería algo cómo Jeon Jungkook

Jeon Jungkook era la definición de perfecto.

Siempre callado y tímido pero cuando tomaba confianza podía convertirse en el chico más divertido e inmaduro de todos. Al darse cuenta de sus preferencias, creyó que lo mejor sería hablarlo con sus padres.

Nunca se esperó su reacción.

—Eso es muy lindo Yoongi, me gustaría conocer algún día al dueño de tu corazón.—Dijo su padre con una gran sonrisa mientras sostenía la mano de su esposa quien sonreía.

¿Acaso no se molestarían con él por ser así?

¿Por qué sonreían tanto?

Sin embargo estaba feliz.

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Al terminar la secundaria sus padres creyeron que lo mejor sería enviarlo a Mokpo a terminar la preparatoria, algo que disgustó por completo al joven Min puesto que tendría que abandonar a sus amigos y por supuesto a Jungkook.

No obstante, la decisión ya estaba tomada y no le quedaba más que aceptar el destino que sus padres habían escrito para él. Aún recuerda aquel día en la estación cuando tuvo que despedirse de sus amigos.

—No tienes idea de lo mucho que te estoy odiando en estos momentos, rata subdesarrollada con complejo de conejo.—Lloriqueó JiSoo, o mejor conocido cómo Joshua, algo parecido a un mejor amigo. Sus amigos se habían organizado para ir a despedirlo.

—Te vamos a extrañar tanto, Yoonie. Deja de decirle así a nuestro hijo, Joshua.—Reclamó JeongHan, qué para ser demasiado joven era muy dramático. Igual que su hermano, HeeChul.

—Yah~Hannie, siempre prefieres al conejito.—
Puchereó el americano mientras volteaba a ver a el de largos cabellos quien le mostró su lindo dedo corazón

—Yo sé que me amas.

—Ignora a esos dos tontos, te estaremos esperando, Yoonie.—Sonrió MingHao mientras sujetaba las manos del chico de cabellos –en ese entonces – castaños quien con los ojos lagrimosos sonrió de igual manera. Aunque le costara admitirlo, amaba aesa bola de idiotas que llamaba: Amigos.

Ese día la vida de Min Yoongi dio un inesperado giro.

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Habían pasado ya tres años y por su insistencia sus padres aceptaron que volviera a Seúl a estudiar. Una vez instalado en su nueva Universidad se tomó la oportunidad de conocer a todos los estudiantes.

Empezando desde los más normales hasta losmás singulares. De allí nació su amistad inquebrantable con Jung Hoseok. Más Min no contaba con aquellas facciones de tierno, sus rojizos labios, su piel tan blanca, sus curvas acentuadas dando un aspecto casi femenino pero sin perder la masculinidad que siempre lo ha caracterizado junto a unos negros cabellos que resaltaban su hermosa piel.

Al principio no lo pudo reconocer, hasta que escuchó su armoniosa voz.

Era él.

Jungkook.

Su Jungkook.

En su mente algo pareció volver a funcionar, su corazón latió con más rapidez.

Sin duda regresar a Seúl fue la mejor decisión que Jeon Jungkook pudo haber tomado.

❝Cambia de ser, muestra tu fragilidad. Es la mejor forma de engañar, yo soy real y tomaré el control por fin sólo muestra un poco, sólo un poco de ti.❞



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Look What You Made Me Do «JIKOOK»Donde viven las historias. Descúbrelo ahora