Capitulo 12

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Aitana

¿Darian en un jacuzzi?

Camino rápidamente hacia la habitación que supuestamente el ha rentado y me detengo frente a la puerta.

¿Debería tocar?

No, ¿Verdad? O tal vez...

- Aitana ¿Qué haces por aquí? – asustada volteo a mirar de quien se trata y me encuentro justo a Loren frente a mi desconcertada.

- Mmm...- ¿Qué debo decirle?

- Necesito hablar contigo. – me dice seria.

- ¿Es urgente?

- Si.

- Esta bien, dime. – respondo.

- Aquí no, vayamos a las mesas de abajo. – se gira y comienza a alejarse.

¿Por qué quiere hablar conmigo?

Observo la llave que tengo en las manos y la guardó en mi bolso, mas tarde vendré a averiguar que hace Darian en esta habitación.

Camino rápidamente tratando de alcanzar a Loren, su mirada me dice que las cosas que tiene que decirme son serias y importantes.

Pasamos a sentarnos a una de las mesas que se encuentra frente la playa, ella pide vino y yo solo pido un vaso de jugo.

- ¿Qué era lo que tenias que decirme? – pregunto curiosa. Hace tiempo quería preguntarle el porque no le agradaba y esta vez aprovecharía la ocasión.

- Dime algo – hace una pausa - ¿Cómo van las cosas entre tu y Darian?

¿QUÉ?

- ¿A que te refieres con eso? - ¿A que vienen sus dudas?

- No soy la única que se ha dado cuenta que ustedes no están bien, los noto mas distanciados de lo normal. Y...- hace una pausa – Se algunas cosas. – dice apenada.

Pensé que nadie se percataría de esto.

- Las cosas van excelentes entre nosotros... - suelto con una sonrisa fingida. Ella parece no creerme y ríe.

- ¿Darian te es infiel? – suelta.

¿Cómo lo supo?

Desde el fondo de mi ser quería gritarle y desahogarme con ella. Quería decirle la verdad, pero ¿De que me sirve? Obviamente ella apoyara a su familia.

- No... El nunca seria capaz de hacerme eso.

- Mmmm – mira hacia el suelo. – Lo entiendo, aun no te das cuenta. – se levanta. – Escucha Aitana, no soy quien, para decírtelo, tu misma debes darte cuenta de lo que sucede. Mi primo es un descarado, así que, si quieres hablar con alguien, con gusto puedo escucharte. Te apoyo. – me sonríe – Ahora debo ir con mi esposo porque hay mucha gata suelta.

Gira alejándose y yo me quedo perpleja.

¿A que se refería con darme cuenta? ¿De qué debería darme cuenta?

Ya se que Darian me pone los cuernos con una de sus clientas. No se dé que más debería de darme cuenta.

Me levanto también de aquella mesa no sin antes dejar dinero en ella. Camino lentamente sin rumbo alguno pensando en las palabras de Loren.

Ahora que recuerdo Darian debe seguir en aquel jacuzzi.

Me giro rápidamente y me apresuro a caminar a la habitación en la que esta Darian. Llego al pasillo y justo cuando estoy en habitaciones antes la puerta se abre y de esa habitación sale Darian abrazando a una mujer por la cintura.

Duele AmarteWhere stories live. Discover now