Capitulo 28

40.3K 1.5K 440
                                    

ULTIMOS CAPITULOS. 


Darían


Una semana mas.

A transcurrido una semana mas, y ya no puedo. Esto es mucho para mi, cuidar a dos niños yo solo es mucho trabajo. No me quejo de ellos, por supuesto que no, solo que estoy cansado. He dejado de ir al trabajo para hacerme cargo de los niños pero aún así necesito ayuda.

Grace sigue yendo a sus terapias, pero no veo ningún cambio en ella, ningún avance,  sigue siendo tan fría con mis hijos, tan distante, ni si quiera se sabe sus nombres. 

– Grace, necesitamos hablar. - digo ingresando a la habitación. 

– ¿Qué quieres? - responde indiferente. 

– Es suficiente, te he dado suficiente tiempo para tu recuperación, ellos te necesitan, yo te necesito, te necesitamos.  

– ¿Crees que esto se soluciona de la noche a la mañana? No estoy bien Darían, aún no estoy bien – comienza a llorar.

– Tranquila cariño, está bien tómate el tiempo que necesitas– la abrazo consolándola.

– Haré lo posible para estar con los niños. 

– Está bien amor– la beso. Ella no me responde al instante pero lo hace.

Algo no está bien y lo voy a averiguar.




***


Más tarde veo a Grace prepararse para su cita con el psicólogo, se despide de mi y intenta despedirse de los niños. 

Esta ves iré con ella.  

Espero que se vaya para seguirla, cargo a mis hijos y los subo a mi auto, discretamente me mezclo con los demás autos para que mi esposa no me note. El semáforo cambia y la veo girar en otra calle. 

Por aquí no esta el psicólogo. ¿A donde va? 

Conduzco un par de autos detrás de ella, la veo entrar a una calle, que se me hace conocida.

Aquí es donde vivía antes.  

La veo estacionarse frente a su antiguo hogar y bajar con su bolso. Ingresa a su hogar y me estaciono detrás de ella. 

¿Qué hace aquí? 

Cargo a mis dos hijos y cautelosamente me arrimo hacia la entrada, reviso si la puerta esta sin seguro, y si, esta sin seguro. Escucho varias risas prevenir de alguna habitación, dejo a mi hijos en la sala y sigo aquellas voces. 

- Yo te extrañe - dice ella riendo. ¿A quien se refiere? 

- Yo  también preciosa. - interrumpo y ingreso a la habitación.    

Ella esta desnuda sobre el hermano de su ex marido, ¿de verdad? 

– Darían yo- yo- puedo explicarlo. 

Rio – No hay nada que explicar Grace.

Salgo de ahí y recojo a mis hijos de la sala, los subo al auto y arranco. Me tomo un respiro para tratar de controlarme pero es imposible. La puerta del copiloto se abre.

Es Grace.

– Amor, déjame explicarte– trata de abrazarme.

– ¡No me toques!- grito furioso. 

Duele AmarteWhere stories live. Discover now