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A pesar de la ida de los tres cazadores seguíamos trabajando, otros cazadores venían a tratar sus heridas de vez en cuando por lo que aún nos manteníamos ocupadas.
Mi relación con Kanao había mejorado considerablemente, ya no nos cruzabamos y sonreímos falsamente, ahora suele contarme como le iba en sus misiones y de vez en cuando me pedía algunos venenos de ayuda, que encantada se los daba.
Gracias a Aoi pude mejorar un poco en mi cocina, teníamos algo de tiempo libre y era agradable cocinar juntas.
Inosuke no podía mandarme cartas, unas horas después de que se fuera me mando una diciendo que iba a enfrentarse a un rey, que tenía que meterse dentro de él y que no podría estudiar, más abajo había una pequeña nota de Zenitsu diciendo que estaban en un tren y un dibujo de los tres hecho creo que por Tanjiro.
Ahora estaba con Aoi tendiendo sábanas, no había pacientes de momento así que nos tomábamos nuestro tiempo.
—¡(t/n) ____! ¡Aoi! ¡Es una emergencia!— las tres niñas llegaron corriendo, en su rostro se veía preocupación lo que provocó que nosotras también nos asustemos.
Seguimos a las niñas hasta la entrada y vimos a Tanjiro junto a sus amigos habían vuelto muy pronto a la Finca.
Me sorprendí demasiado al verlos golpeados y con varias heridas. Él que estaba en peor estado era Tanjiro que tenía una gran herida en el estómago.
Nos acercamos al trío para ayudarlos a llegar a una camilla. Les dimos las gracias a los del saneamiento Kakushi y les dijimos que podían irse ya, nosotras nos encargaríamos de ellos desde ahora.
Apoye el brazo de Inosuke en mi hombro y trataba de ayudarlo a llegar al cuarto pero pesaba un poco.
Lo mire preocupada, los tres se veían realmente deprimidos.
Cuando al fin llegamos a una habitación para pacientes los dejamos a cada uno en una camilla, me puse un vestido sobre el traje de cazador, que era parecido al que llevaba Aoi.
Fui por unas medicinas de emergencia y volví a la habitación inmediatamente.
—Beban esto para aliviar el dolor muscular.— dije mientras les pasaba a cada uno un pequeño vaso con medicina dentro. Inosuke se quitó la máscara y como suponía se encontraba deprimido. —Tanjiro empieza a desvestirte de una vez.
—Si...— bebió la medicina rápido y se quitó el haori a cuadros que suele llevar junto a la parte superior de su traje de cazador.
Aoi atendía a Zenitsu y Inosuke que no se encontraban tan mal.
Agarre las vendas y todo lo necesario para empezar a tratar la herida de su abdomen. Él solo soltaba algunos quejidos de vez en cuando pero seguía sin hablar, estaba bastante fatigado.
El silencio era lo que reinaba la sala ahora. Estaba concentrada al máximo para no lastimar al cazador con algún error o movimiento estúpido, sentía muchos nervios al tratar la herida pero al menos no era algo demasiado grave.
