21.𐇵

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Una sonrisa apareció en el rostro de Atsumu, cinco palabras bastaron para hacerle inmensamente feliz, esas palabras saliendo de los rosados labios de Shōyō fueron su todo. Su razón de ser.

‐ No sabes lo contento que estoy en este instante- mencionó el rubio pasando su mano por su nuca. 

- Me gustaría saberlo- afirmó el pequeño, seguro de si mismo. Deseaba saber si ambos se sentían de la misma manera.

El rubio sonrió en sus adentros, se apresuro para tomar la mano de Shōyō y posicionarla sobre su pecho, para que el pelirrojo pudiera sentir los latidos de su corazón. Este latía fuerte y rápidamente,  era como si con solo el hecho de pensar en es pequeño su ritmo cardíaco aumentaba porque si. Era increíble como su cuerpo reaccionaba sin previo aviso.

- Tsumu- habló Hinata, volviendo a su posición anterior. Solo que ahora era el que apoyaba su cabeza en el hombro del contrario.

- ¿Que pasa cariño?- preguntó, acariciando la mano del menor.

- ... d-desearía... ¡que te quedaras a mi lado!... osea que... no te vayas de aquí... se que es imposible y que tu vives en Hyogo y y y ademas...- fue silenciado por el dedo indice del mayor sobre sus labios.

- Son muy suaves- pensó al hacer contacto con estos.

- Tranquilo, como ya sabes mi abuela vive aquí y no es un problema para mi viajar- aseguró.

- ¿De verdad?- preguntó apenado, haciendo cara de cachorrito abandonado o de esa forma lo vio Atsumu.

- De verdad, lo prometo... y por favor no pongas esa carita que puedo morir de la ternura- dijo mientras acariciaba su mejilla.

El pelirrojo asintió con la cabeza y sin dudarlo lo abrazo, sus brazos pasaron por encima de los anchos hombros del rubio formando un abrazo pegado. Atsumu pasó sus manos por la pequeña cintura aceptando el abrazo y se quedaron así.

Ambos se separaron para verse los rostros, y vaya que estaban cerca uno del otro, solo unos cuantos centímetros los mantenía alejados. Fue inevitable para el rubio no mirar los labios del pequeño y para su sorpresa Shōyō igual estaba haciendo lo mismo.

- Atsumu Miya, por favor, mantén tu cordura y piensa en otra cosa... ¡DIOS! ¡¿COMO PUEDO MANTENERME CUERDO SI ESTA MIRÁNDOME DE ESA FORMA?!- se regañaba así mismo el rubio.

Hinata al notar que estaban tan cerca se puso nervioso y quiso huir en ese instante, pero al hacer contacto con esos ojos marrones obscuros, se tranquilizó y se quedó ahí, viéndolo directamente, pero también fue inevitable para el no desviar su mirada hasta los labios del mayor.

Ahora, ambos jóvenes se cuestionaban si lo que estarían por hacer sería lo más correcto y sensato, quizás no, pero en primer lugar ¿que importaba? ¿desde cuándo les importa ser correctos?.

Eso era lo que menos importaba.

- Al carajo.

Atsumu examinó una vez más el rostro del pequeño y se relamío los labios, al tener a este chico frente suyo lo último que pensaría sería en tener cordura. Era una tortura tenerle tan cerca y no hacer nada. Shōyō entendía muy bien la situación y al igual que el rubio estaba impaciente.

Inesperadamente el pelirrojo tomó la iniciativa y se fue acercando al más alto, de forma tímida, sin mostrar lo impaciente que estaba en verdad, era un lío. Sus alientos se mezclaban de apoco, vaho salía de sus bocas por el evidente frío que hacía esa noche, a pesar de eso sentían un gran calor en sus cuerpos.

Para Atsumu fue impactante ver que el pequeño se acercaba a el.

¿Quien lo diría, con la carita inocente que lleva?

Se rió en sus adentros, siempre pensó que el primero en tomar la iniciativa sería el, se equivoco rotundamente y en verdad eso no le molestaba, al contrario le encantaba. Aún así el pelinaranja se estaba tomando su tiempo, así que Atsumu para acelerar el proceso lo tomo la barbilla y lo atrajo hasta el.

El roce de labios se hizo presente, hasta que finalmente unieron sus labios y se formó un beso. Shōyō hacia lo que podía para seguir el ritmo, mientras Atsumu saboreaba la dulce boca del pelirrojo.

Un dulce al que tarde o temprano se volvería adicto.

Hay que mencionar que fue un beso algo torpe, el rubio era un poco rudo y el pelirrojo no sabía bien que hacer, pero pudieron expresar lo que sentían y eso era lo importante.

Al separarse el rubio abrió los ojos y vio que Shōyō aún los tenía cerrados. Se llevó una mano a su boca y la tocó, podía sentir todavía el calor en esa zona.

- ¡Tsumu!

Atsumu no logró decir nada en ese instante, estaba congelado y muchos pensamientos pasaban por su mente a gran velocidad que no lograba procesar todos a la vez, estaba sorprendido, nunca había sentido tal cosa en un beso, mariposas en el estomago y un gran hormigueo por todo su cuerpo, su acelerada respiración pidiendo por más.

- ¿Estas ahí, Tsumu?

El pelinaranja pasó su mano cerca el rostro del mayor y nada, ni una reacción.

Lo hice, lo besé, quede como un tonto al decirle eso a Osamu de que me lo tomaría con calma. Pensaba el de cabello rubio.

- ¡TSUMU RESPONDE!

Hinata tiro fuertemente la mejilla de Atsumu haciendo que se quejara del dolor.

- Auch, eres malvado.

- Tu eres malvado, no me respondías y parecía como si te hubieras quedado sin alma-  reclamó el pelirrojo cruzándose de brazos.

- Shōyō, lo siento.

- Tsumu ¿por qué te disculpas?- preguntó sin entender nada.

- ... Te robe tu primer beso, quería que fuera especial para ti y lo estropee por completo, me tuve que controlar- se disculpó afligido por la situación.

¿De verdad está pidiendo perdón por eso? se preguntaba Hinata.

- ¿Qué? no seas tonto, de todas formas...- fue interrumpido.

- Así que lo siento.

Shōyō suspiro pesadamente, seria mentira decir que no le avergonzaba lo que estaría por hacer, pero de todas formas lo haría. De vez en cuando hay que tomar ciertos riegos.

Se acercó al rostro del mayor y depositó un corte beso sobre los labios de este, al separarse de el, intento ocultar su visible sonrojo con sus manos.

Ahí fue cuando a Atsumu le quedó claro lo que pensaba el menor de todo lo sucedido, vaya que ese pequeño le estaba sorprendiendo. Aún así se sentía algo culpable.

- Eres un niño travieso, Shōyō.

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Hola bebés (´・з・) ¿como están?

¡Happy pride month! 🏳️‍🌈.

Reescribi más de una vez este capitulo porque no me convencía del todo, aún así no me convence del todo este resultado, además de reescribir esto una y otra vez mi semana a sido un asco, muy estresante y agobiante. Últimamente he dudado mucho de como escribo y eso me pone muy insegura, estoy intentando mejorar eso, estoy muy inspirada es solo que aveces me ganan las inseguridades.

Al fin Atsumu se comió la mandarina, si si si.😎

Espero de corazón que les haya gustado y que les haya sacado una sonrisa por lo menos, voten y cometen. (perdón si hay faltas ortográficas)

Gracias por el apoyo, son unos solcitos sin duda. ♡

Cuídense del covid-19, recuerden lavar bien sus manos, usar mascarilla y si es posible quedarse en casa, también rezarle a nuestro Dios Sakusa por nuestro bienestar.

Adiós, besos.💞

Destination // atsuhinaDove le storie prendono vita. Scoprilo ora