Derrotado, humillado y sin fuerza para continuar.
Hyoudou Issei se sintió realmente patético al perder contra Raiser en el rating game.
Pero una leve luz de esperanza brillara para poder mostrarle el camino de una vida que hace tiempo desapareció.
A...
Aun con el hermoso, perfecto y caro vestido que llevaba puesto, Rías no estaba para nada emocionada por su boda, la cual estaba a punto de empezar.
Las sirvientas estaban orgullosas de su trabajo, muchos sin duda estaban felices por el matrimonio que aseguraba una nueva generación de demonios pura sangre, otros estaban sin cuidado, pero sin duda muchos más maldecían a Raiser por su "suerte".
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Rías Gremory no escucho, nada ni a nadie.
Ignoro a las sirvientas que alababan su belleza envidiable, ignoro las felicitaciones de muchos otros demonios que creían que su futuro esposo era un hombre digno de codiciar.
Ignoro las palabras de aliento de su madre, o las palabras del "deber" que tenía de su padre.
Cuando entro al salón, con su radiante vestido ignoro las miradas de los jóvenes demonios que la miraban como perros sarnosos a un jugoso filete, pero no pudo ignorar la mirada triunfante y a la vez pervertida de su futuro esposo.
Su padre susurro en su oído que estaba orgulloso de ella, pero esas palabras solo causaron incrementar su enojo, aunque por fuera su rostro perfecto estaba completamente en blanco.
Incluso si ella lo ignoraba, varias personas miraban el evento con cierto nivel de impotencia.
Sona Sitri, su amiga de la infancia miraba el destino de su amiga caer hecho pedazos por culpa del bastardo enfermo de Raiser Phenex.
La nobleza personal de Rías miraba con impotencia lo que ocurría, todos ellos habían sido advertidos por la propia Rías a no intervenir, por miedo a que algo les pasara, la razón principal por la que Issei no estaba ahí.
Otros demonios jóvenes miraban a alguien de su generación cumplir su deber con la sociedad demoniaca, algo que tarde o temprano les pasaría a ellos.
Y igualmente otras personas miraban esto con nula empatía.
Por otra parte, el todo poderoso Maou miro todo él show en silencio.
Desde que había iniciado el evento, el pelirrojo había estado muy tranquilo, cosa que extraño a todos los que lo conocían realmente, incluyendo a sus padres y su sirvienta.
- ¿ocurre algo Sirchez-sama? - pregunto la Maid peli plata mirando al más poderoso siscon de todo el inframundo tan tranquilo.
- para nada Grafía, simplemente admiro el bello evento - comento el Maou de manera tranquila.
- eso es lo que vuelve la situación tan extraña, Sirchez-sama, usted no suele estar tranquilo cuando se trata de su hermana -
- soy el Maou Lucifer, no un Gremory es tan simple como eso - respondió el Maou.
Al notar que la conversación había acabado, la sirvienta no pregunto más y miro el evento.
