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"¿En serio? Ninguna foto... no puede ser." Helen se tapó cara con su mano.

Estaban en el pequeño departamento de Bonnie, era viernes por la noche y ambas decidieron ver películas, que por supuesto Bonnie estaba disfrutando mucho pues Helen era más de salir y ponerse borracha cada viernes.

Ella de vez en cuando aceptaba salir con su amiga pero no bebía tanto pues nunca tenía seguro su regreso a casa.

"Estaba nerviosa." Cortó Bonnie.

Así que, estaban hablando de que había conocido a Harry en la tienda, lo cual después de casi un mes de haber pasado, nunca se lo había confesado hasta ahora.

"Bonnie pero es Harry Styles, no me digas que tus tontos nervios te ganaron." Helen rió mientras se metía un puño de palomitas a su boca.

Bonnie frunció el ceño mirándola, pensando si de verdad ella había dicho eso.

"¿Qué?" La miró confundida pero Helen sólo rió tomando su celular para responder un mensaje que acababa de llegarle. "Mi nervios no son tontos." Susurró viéndola.

"Seguro que no." Volvió a reír un poco dejando el tema de lado.

Bonnie quedó un poco molesta con ese comentario que a pesar que sabía que no tenía que darle importancia, no pensaba que eran "tontos". Helen así era y solía hacer ese tipo de comentarios, pero no era la primera vez que se molestaba por eso. Sí, Bonnie era una paciente y tranquila pero como todos, tenía un límite.

Y estaba llegando a el.














"Ella es un poco... tímida, al inicio." Francis sonrió levemente. "Pero es muy linda y alegre aunque no parezca que pueda decir más de 3 palabras." Ambos rieron y Harry asintió entendiendo. "Conócela bien y sabrás que puede hablar bastante."

Era un miércoles en la mañana, el invierno estaba en sus últimas y hoy, el día había amanecido con una leve lluvia.

Harry había decidido ir a la tienda donde frecuentaba ir, con la esperanza de verla, y también, de comprarse aquel muffin que tanto le gustaba y que sólo vendían ahí.

Lo que no sabía, era que Bonnie trabaja sólo de 4 p.m. a 8 p.m., por lo que era casi imposible que la pudiera encontrar en la mañana.

Decidió salir con varias sudaderas puestas, unos lentes para poder pasar desapercibida en las calles, una vez en la tienda, el olor a pan horneado y el clima cálido por dentro lo recibió.

Estaba silenciosa y sólo estaba un hombre mayor en la caja leyendo un periódico.

Francis tardó en reconocer que era el chico que hace casi un mes había entrado y aseguraba que había gustado de su empleada.

Aunque Francis era un hombre mayor, que podía olvidar cosas y su vista ya era algo cansada, cuando se venía de gente que le importaba podía recordar. Así que, como es típico de el, inició una amena conversación que terminó en consejos de como poder pedirle una cita a Bonnie.

"Tengo una duda, eh..." Harry frunció los labios, mirando hacia los cristales de la tienda, pero como eran cubiertos por anuncios, se podía ver muy poco la calle cosa que lo tranquilizaba pues no podían verlo. "¿Es usted su papá o...?" Sintió un poco de pena al preguntar y más cuando lo vio reírse un poco, arreglando le periódico en sus manos.

"No, no, Bonnie es... mi empleada solamente." Asintió. "Si te soy sincero, mi esposa y yo pensamos que se parece bastante a mi hija." Harry notó como su semblante cambiaba rápidamente, de estar con una sonrisa agradable a una melancólica.

angel ; harry stylesWhere stories live. Discover now