CAPÍTULO 13: Sabes a fresa...

901 46 1
                                    

~Narra Mimi~
Me desperté por los pequeños rayos de luz que entraban por la ventana, Miriam seguía dormida, pero como ya eran las 12, decidí despertarla, y empecé a llenar su cara de besos.

Miriam: Mmm -dijo remoloneando un poco-
Mimi: Buenos días bonita -sonreí-
Miriam: Buenos días mimita -dijo sonriendo y dándose la vuelta-
Mimi: Oye -reí-
Miriam: Tengo sueño todavía -dijo riendo-
Mimi: Pero si son las 12 de la mañana pedazo de marmota -dije riendo y comenzando a hacerle cosquillas-
Miriam: Paraaa -rió- nos vamos a caer de la cama
Mimi: Vale vale -reí y paré-
Miriam: Me has cortado el sueño que lo sepas -dijo levantándose mientras reía-
Mimi: ¿Y que soñaba la señorita?
Miriam: Con una rubia de ojos verdes muy guapa
Mimi: Uy, cuéntame más
Miriam: Pues me iba con la rubia al retiro, dábamos un paseo y tomábamos un helado, y la rubia me iba a comer la boca cuando me has despertado -dijo soltando una carcajada-
Mimi: ¿Es un buen plan para un domingo no?
Miriam: Mm si, pero lo ultimo también lo quiero -sonrió-
Mimi: ¿El beso?
Miriam: Si
Mimi: Yo te doy los que quieras reina -dije besándola-

~Narra Miriam~
Después de seguirle el beso a Mimi, y pasar otros 20 minutos dándonos mimos, decidimos bajar a desayunar, yo me puse a preparar las tostadas, mientras que Mimi preparaba los cafés.

Mimi: ¿Dormiste bien?
Miriam: Genial -dije sonriendo- ¿y tu?
Mimi: Muy bien, pero me pateaste un poco -dijo riendo-
Miriam: Perdón -reí- es que suelo dar muchas patadas
Mimi: No hace falta que lo jures

Me acerqué y deje repetidos besos en sus labios.

Miriam: Eso para compensarte -sonreí-
Mimi: Esto lo compensa todo -dijo sonriendo-
Miriam: Las tostadas ya están
Mimi: Esto también

Después de desayunar entre vaciles, besos, y muchas risas, subimos a alistarnos para salir a dar ese paseo por el retiro.

Miriam: ¿Estás lista?
Mimi: Si, ¿nos vamos?
Miriam: Si

Salimos de la casa y tras unos minutos andando llegamos al retiro y seguimos paseando hasta que a lo lejos vi a mi hermano junto con Inés y los amigos con los que habían quedado ayer.

Miriam: Está mi hermano ahí
Mimi: Ah pues vamos a saludarle -nos acercamos y yo me lancé a los brazos de mi hermano-

Efrén: Ni que no me hubieras visto en un año Mickey
Miriam: ¿No puedo abrazarte con entusiasmo o que? -dije riendo-
Efrén: Claro que puedes tonta, ¿Que tal anoche?
Miriam: Bastante bien -dije mirando a Mimi con una sonrisa cómplice la cual ella imitó-
Efrén: Uy esa sonrisa, ¿que pasó?
Miriam: Digamos que las segundas partes a veces no salen tan mal, o al menos al principio
Inés: ¿Habéis vuelto?

Yo simplemente asentí con una inmensa sonrisa y me reí ante la cara de mi hermano.

Miriam: ¿Tu que pensabas que era?
Efrén: Pues no se, pero no me esperaba que volvierais
Miriam: Pues ya ves que si, y ahora nosotras vamos a seguir con nuestro paseo
Efrén: Muy bien Mickey, acuérdate que la semana que viene nos vamos a Pontedeume
Miriam: Vivimos juntos, me lo vas a estar recordando toda la semana, no hace falta que me lo recuerdes ahora hermanito
Efrén: Perdone usted majestad
Miriam: Idiota -dije riendo y dándole un leve puñetazo en el hombro-
Efrén: Anda sigue paseando, que a este paso me llevo más puñetazos
Miriam: Valee -reí- nos vemos luego
Efrén: Adiós enana
Miriam: Adiós tonto

Y tras ese encuentro con mi hermano, Mimi y yo fuimos a por un helado.

Mimi: ¿De que lo quieres?
Miriam: De fresa porfa
Mimi: Vale -sonrió y pedimos los helados, y aun que me tocó pelear con ella sobre quien pagaba, se acabó saliendo con la suya-
Miriam: Otro día pago yo eh
Mimi: Hoy en la comida pagamos a medias
Miriam: Otro día, hoy como con mi hermano y con Ana, siempre hacemos una mini comida familiar, y vamos a aprovechar que está Inés
Mimi: Es verdad -sonrió levemente- pues mañana que viene Paula comemos las tres juntas en algún sitio
Miriam: ¿Pero ella querrá que vaya?
Mimi: Claro que si Miri, no tienes ni que preguntar, además Paula te adora, estará encantada de que vayas
Miriam: Bueno vale, vamos a acabarnos el helado anda -dije sonriendo-
Mimi: Vamos

Nos sentamos en un banco y nos terminamos el helado hablando de cosas sin sentido.

Miriam: Oye Mimi
Mimi: ¿Si?
Miriam: ¿Porque no te vienes a comer con nosotros? Mi prima viene y para que no estés sola en casa, además así pasamos el resto del día juntas
Mimi: Miri cielo, es una comida familiar...
Miriam: ¿Y? tu eres mi novia, Inés te adora, a mi hermano le caes genial, y mi prima es tu mejor amiga, no me veo el problema
Mimi: ¿Segura?
Miriam: Que si, vente porfa
Mimi: Vaale, no se como lo haces que siempre me lías para todo
Miriam: Así soy yo -reí leve-
Mimi: Y me encantas -dijo dejando un beso en mis labios-
Miriam: Mm, sabes a fresa -reí-
Mimi: Tu también -dijo riendo-

Cuando acabamos llamé a mi hermano para decirle que Mimi también venía a comer, y para avisarle de que ya íbamos hacia mi casa.

Miriam: Hemos llegado!
Mimi: Pero loca no chilles -rió-
Miriam: Es costumbre ya -reí-
Efrén: Siempre grita cuando entra, es tontita la pobre
Miriam: Ni que os molestara
Efrén: No molestas boba, ayúdame con la mesa anda
Miriam: Voy -dije entrando en la cocina- Mimi tu vete con Ana al salón
Mimi: No hombre, os ayudo
Inés: No no, tu tranquila, ve con Ana nosotros acabamos esto en un momento
Mimi: Vale vale

~Narra Mimi~
Fui con Ana al salón, la cual me lanzó una mirada pícara nada más entré.

Mimi: ¿Que? -reí-
Ana: Cuéntamelo tú -dijo riendo-
Mimi: ¿El que?
Ana: ¿Como fue ayer?
Mimi: La pedí salir -sonreí- y me dijo que si
Ana: Me alegro de que estéis juntas de nuevo
Mimi: Y yo, es increíble
Ana: Ya vuelves a estar encoñada ehh
Mimi: Puede ser -reí-
Ana: Puede no, lo estás y mucho
Mimi: Bueno vale -reí- estoy muy encoñada, pero es culpa de Miriam, me tiene así

Seguimos hablando de tonterías hasta que Miriam vino a avisarnos de que ya estaba lista la comida

Miriam: Chicas, ya está todo listo
Mimi: Vamos entonces -nos dirigimos todos a la cocina y nos sentamos a comer-
Miriam: Que aproveche
Todos: Igualmente

Comimos entre muchas risas y algún que otro pique entre Miriam y Efrén.
Una vez terminamos Efrén e Inés se fueron al salón a echarse la siesta, y Ana, Miriam y yo, subimos a la habitación de la segunda a hablar de nuestras cosas.

Ana: Bueno, ¿las enamoradas que tal?
Mimi: Muy bien -dije riendo y tumbándome boca abajo en la cama de Miriam-
Miriam: Siii -dijo tirándose encima mía haciendo que las dos estalláramos en una carcajada-
Ana: Cuidado que me la matas -dijo riendo-
Miriam: Que no hombre, no puedo matar a esta cosita tan bonita
Mimi: Tu si que eres bonita
Ana: Si? hola? me llaman de un teatro para hacer de candelabro -dijo provocando tanto mi risa como la de la gallega-
Miriam: Ven aquí tonta -dijo levantándose y abrazando a Ana-
Ana: Ustedes me quieren para lo que quieren -dijo en una risa leve-
Mimi: Anda no digas tonterías
Miriam: Te queremos mucho
Ana: Para lo que quieren
Mimi: No digas esoo
Ana: Anda, os dejo solas, yo me voy con Jadel

Nos despedimos de Ana y nos quedamos Miriam y yo solas en la habitación.
Al principio eran caricias y besos, después la temperatura empezó a subir y bueno, todos sabemos como acabó la cosa.
Después no hicimos mucho más, cenamos con Efrén e Inés, y después de ver una película nos fuimos a dormir, y si, Miriam insistió muchísimo en que me quedara para ir juntas a la mañana siguiente a la estación para recoger a mi pequeña Paula y a mi madre.

Olvidemos el pasado Where stories live. Discover now