35.Inoportuno.

902 148 139
                                    

Las calles eran concurridas y coloridas, un escenario completamente distinto a lo que recordaba Tord hace años.

En ese entonces, aun no le daban de alta en el hospital, pero le permitían salir de vez en cuando para aligerar el estrés. Lamentablemente, el único escenario para apreciar era uno posguerra; calles, casas y edificios en ruinas por los bombardeos, tanques en las esquinas, familias en la calle, solados con fusiles, etc. Era triste y frustrante de ver.

Pero ahora, lo que Tord había conocido antes estaba completamente reparado; carteles coloridos, calles y edificios nuevos, autos brillantes, gente abundante recorriendo por ahí y por allá, etc. Era completamente lo opuesto a lo que tenía en mente, y eso lo hacía feliz, o por lo menos, dentro de lo que podía sentirse feliz.

Edd detuvo el auto en una calle de un sector residencial, se podría decir con seguridad que eran los suburbios.

Todos bajaron con rapidez, y Tord aprovechó que se encontraba un poco lejos de los amigos de Edd para susurrarle a este: - ¿Cuándo se irá?, Debe hacer otras cosas, ¿Cierto?

Edd frunció el ceño entendiendo a quien se refería Tord. Inhaló y exhaló con paciencia - ¿Cuál es tu problema con Tom, exactamente?

Tord desvío la mirada hacia un lado. "Oh, nada, es sólo que me recuerda a uno de los eventos más traumáticos de mi vida, sin mencionar que es el causante de dicho suceso", no, definitivamente no puede decir eso.

- Es sólo que... Uh... - Tord sentía su cerebro secarse por su constante búsqueda de excusas.

Edd alzó una ceja - ¿Es por sus ojos?

- No, no. No es eso. - su boca se movió por si sola al responder, sin darle tiempo de usar esa oportunidad de usar una excusa. Tord se mordió la lengua como auto-castigo.

- ¿Entonces?

- No me agrada, es todo. ¿Debe haber una razón para todo lo existente? - esquivar, una buena táctica para salir de un apuro.

Edd lo miró no muy convencido, y fue su turno para desviar la vista - Bueno... No se irá demasiado pronto.

A Tord le pareció extraño el tono dubitativo de Edd, pero lo dejó pasar cuando fue guiado por Matt, quien caminaba raro por cargar sus dos maletas grandes con sus manos y las dos pequeñas bajo sus brazos, al umbral de la puerta. Tord no pudo evitarlo, y soltó una pequeña carcajada por lo bajo.

Con maletas en el suelo, Matt abrió la puerta con las llaves, y junto con Tord se adentraron.

- Es... Más grande de lo que pensé. - comentó Tord, viendo el sofá, sillón individual y televisor que poseía la sala de estar. ¿Un televisor?, Si estos chicos no son clase acomodada, Tord no sabe lo que son.

- Ven, esta será tu habitación. - dijo Matt, haciéndole una seña para que lo siguiera.

Para ser un piso, la casa tenía dimensiones soñadas: pasillos anchos, techo alto, paredes lisas. Tord sentía que podría dormir como un bebé de ahora en adelante.

Matt abrió una puerta y dejó el paso a Tord, quien se adentró al cuarto. El lugar era lo suficientemente espacioso para una persona; había una cama con solo un colchón junto a una mesa de noche y un armario de madera en un rincón. Tord se sintió por una parte aliviado y por otra ajeno, ya que a pesar de estar en su nueva casa aún no se sentía parte de ella.

- Todos nosotros tenemos nuestros propios juegos de sábanas, es por eso que tu cama no tiene. ¿Necesitas que te preste uno mientras consigues los tuyos propios?

Tord se dirigió a la ventana, ojeando las cortinas y el patio - No, gracias. Traigo... Espera.

Matt lo miró expectante, sin darse cuenta todavía.

- ¿A qué te refieres con "Todos nosotros..."?

Entonces, Matt pasó de confundido a sorprendido, y luego pasó de sorprendido a temeroso, tras taparse la boca con prisa.

Se quedaron en un mortal silencio, mirándose mutuamente con los ojos bien abiertos, entonces gritaron al mismo tiempo:

- ¡Edd!

...

- Está bien, siento haberte mentido. - dijo Edd, alzando los brazos para calmar la situación.

- ¡Disculpa no aceptada! - respondió molesto Tord, recibiendo ojos en blanco de parte de Edd - ¡Pudiste decirme desde un principio que viviría contigo!

- Claro que no, te hubieras negado apenas te lo hubiera propuesto. - Edd lo apuntó con un dedo - No quieres vivir conmigo porque de alguna forma sientes que dependes de mi.

Tord jadeó con las mejillas rojas, sin tener nada que decir en respuesta. No estaba avergonzado porque lo que dijo Edd fuera verdad, sino porque lo dijo frente a los otros; Matt y Tom sentados en la mesa de la cocina.

Matt no dijo nada, pero miraba la situación mientras comía galletas; por otro lado, Tom fingía leer un libro y no escuchar, pero no hubo duda en que estaba bastante atento a la conversación ajena gracias a la carcajada que soltó por lo que dijo Edd.

Tal vez fue el calor del momento, pero una rabia ardiente nubló la mente de Tord - ¿¡Y tú de qué te ríes!?

La tensión aumentó 10 veces.

Tom se giró lentamente hacia Tord, y con burla mal intencionada le dedicó una media sonrisa - Obviamente de lo patético que eres.

Tord se molestó más aún: Crujió los dientes, y con los puños bien apretados, dio un paso en dirección a Tom, el cual en respuesta a tal reacción, se levantó de la silla en guardia. Matt retrocedió, pero siguió atento a lo que sucedía.

- ¡Wow!, hey, hey, no nos pongamos así, no hay necesidad de esto. - exclamó Edd, apresurado en frenar a Tord al sujetarlo de los hombros - Chicos, podrían... Dejarnos solos, ¿Por favor?

Tom les dedicó una mirada molesta, para luego irse dando zancadas, y Matt se quedó un par de segundos más antes de marcharse al igual que Tom.

Edd observó a ambos abandonando la cocina, y cuando estuvo seguro de que estaba solo con Tord, suspiró ligero.

- No creo que esto funcione. - determinó Tord, zafándose del agarre de Edd.

Edd lo miró, y sonrió un poco desganado - Y yo no creo que tengas opción.

Tord frunció el ceño, confundido.

- Vas a demorar en encontrar otro piso que puedas mantener, pero pagar la cuarta parte de este lugar es lo mejor que podrías tener. - Edd se encogió de hombros, victorioso - Sé que quieres tener más distancia entre nosotros porque crees que hago mucho por tí, pero tienes que tener en claro que no necesitas alejarte de esa manera. Sé que ya... No me necesitas tanto como antes, digo, mírate, ¡Vas a ir a la universidad!, Y no necesitaste mi ayuda. Sólo... déjame hacer esta última cosa por tí, ¿Sí?

Edd sonrió triste, o eso aparentó.

Tord quería negarse, quería decir que la razón que tenía más peso para no vivir en esa casa era que en realidad no soportaría vivir con Tom. Pero... Edd le había pedido que se quedara de tal forma que era imposible decirle que no.

La verdad, es que Edd había aprendido el cómo convencerlo [manipularlo] los últimos años.

Minner Foran [TomTord/TordTom]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora