Marry me -NAMJIN

Epílogo

Un fuerte empujón hizo que el delgado niño de 6 años cayera de espaldas en la tierra. Su ojos se llenaron de lágrimas y sus labios temblaron tratando de contenerse.

-¿Que? ¿Quieres llorar? ¿Por qué mejor no me acusas con tu mami? Ohh, es cierto, no tienes - el robusto muchacho fingió que lloraba y recogió un montón de tierra para tirarlo en la cabeza de kwan. - pero puedes ir con papi uno o papi dos ...

Kwan sabía lo que venía, las frases acerca de cómo el padre de ese chico pensaba que sus papis eran unos maricas degenerados y que no deberían criar un niño. Pero él era feliz, él amaba como papi Jin le preparaba su comida favorita y como papi Joon le leía cuentos antes de dormir. Le gustaba jugar videojuegos con papi Jin y que papi Joon lo cargara cuando caminaban por el centro comercial y fingía estar muy cansado. Y por sobre todo le encantaba cuando los tres iniciaban guerras de almohadas que terminaban en cosquillas y lágrimas de risa, los tres eran felices, y sus padres se miraban de una forma más bonita que los de cualquier otro niño ¿Entonces por qué lo molestaban?

Kwan tenía los ojos cerrados para evitar que entrara en ellos la tierra que le tirarían en la cabeza. Pero eso no pasó. Porque cuando abrió sus ojos una preciosa niña con dos coletas estaba empujando a ese mastodonte que le sacaba como 15 centímetros.

-Eres un abusivo, idiota, come mierda.

Kwan miraba sorprendido la escena, sobre todo porque Sunny había dicho una mala palabra que si él la repetía le iría muy mal con papi Jin, ya había visto como una vez había regañado a papi Joon por decir eso mismo cuando se golpeó el dedo chiquito del pie.

-¿Y quién me va a detener? ¿Una pulga? Uyyy no te escucho, no te veo - el molesto niño comenzó a burlarse y hacer muecas que hasta para Sunny que tenía 5 años, eran estúpidas.

-Yo no, pero los padres de Kwan, miden como dos metros - hablaba la niña mientras hacía movimientos con sus manos para exagerar aún más sus palabras - y tiene dos, así que pueden golpearte a ti y a tu tonto padre.

-Sus "papis" son maricas afeminados.

Sunny estaba roja y con una expresión terrorífica, bueno tan terrorífica como puede verse en una carita con mejillas abultadas y dientes de conejito. Se agachó para recoger dos puñados grandes de tierra, que soltó disimuladamente al escuchar la voz de su papi.

-¿Dónde están tus padres? Debo tener una conversación con ellos acerca de lo que le enseñan a su hijo. ¿No conoces el respeto?

Jungkook no bromeaba, de verdad quería hablar con ese tipo, porque las palabras que usaba el menor eran claramente repetidas de lo que oía en su hogar. Un niño de 6 años ni siquiera debería conocer tales definiciones para usarlas como insulto.

Lamentablemente el niño y sus dos fieles camaradas salieron corriendo al ver los músculos del adulto cuando alzaba a la niña en sus brazos. De verdad su padre gordo y chiquito no podría contra él y después probablemente lo castigarian, todo por culpa de esa odiosa niña.

-¿Estas bien, mi niño? -Habló cálidamente Jungkook hacía Kwan mientras tomaba su mano para sacarlo del parque.

-Si tío Kookie - contestó el menor en un hilo de voz, con las orejas rojas y los ojitos brillantes de lágrimas contenidas. Tan parecido a Jin.

-Voy a pedir permiso a tus padres y te llevaré conmigo, para enseñarte a boxear. Debes defenderte cuando te atacan.

-¿Podría defender a Sunny también?

-Si, a Sunny también bebé - respondió Jungkook sonriendo con la boca cerrada, porque al fin su pequeña niña había logrado hacerce amiga del tímido chico.