𝑬𝒔𝒄𝒂𝒑𝒆 → 𝑱𝒆𝒏𝒍𝒊𝒔𝒂

Capítulo XXVII (𝑴𝒆 𝒆𝒏𝒕𝒓𝒆𝒈𝒂𝒓𝒆́ 𝒂 𝒕𝒊)

El mar brillaba, gracias a la luz del sol. El olor a salitre, las gaviotas, el contraste entre la arena y el mar, el sonido de las olas, era el escenario que presenciaba aquella pareja. Ambas estabas inmersas, observando como caía el sol y permitía formar aquella mezcla de colores que siempre estaba presente en una hora específica, ninguna hablaba, solo disfrutaba de aquel momento.

La castaña, estaba sentada entre las piernas de la rubia, recostada sobre su regazo. Mientras la más alta, tenía sus manos hacia tras, para apoyarse y sostener el peso de la castaña.

Lisa, se acercó colocando sus manos alrededor del costado de la castaña, y apoyando su mentón en el hombro, ocasionando que la castaña se acomodara en su postura.

━ Cuando me llamaste, no se me había ocurrido que vendríamos a un lugar así ━murmuró la rubia.

━ Tenía que ser una sorpresa.

La castaña giro su rostro encontrándose con la mirada de la rubia, mirada que cada día le encanta más. Se acerco para darle un beso, cuando de pronto se separó y salió corriendo, dejando a la más alta con la ilusión de aquel beso.

Lisa, reaccionó y sonrió cuando vio que la castaña estaba corriendo por la orilla del mar, se paró y fue tras su búsqueda.

━ ¡Hey, Jennie, ya me has hecho esto un par de veces! ¡Detente!

Jennie, por más que corrió, no pudo evitar ser alcanzada por la más alta.

━ Te tengo.

━ ¡Suéltame, Lisa! ━exclamó en medio de risas.

La castaña, gritó al sentir que era levantada desde atrás, por su espalda y llevada en dirección al mar.

━ No, Lisa, ¡el agua debe estar helada!

Lisa, solo la dejo caer en la orilla, donde apenas el agua daba en sus pies.

━ Me tentaste, Jennie. Ahora veras.

Intento tomar los labios de la castaña, pero nuevamente salió corriendo. Lisa, la alcanzo de nuevo, ya en la orilla.

━ Estas jugando con fuego, ¿eh?

━ No, Lisa, la arena-

No alcanzo a protestar cuando ya estaba recostada en la arena con los labios de la rubia sobre los suyos. Intento hablar, entre el beso, pero la más alta se lo impidió, besándola con más fuerza. A los pocos segundos, se dejó llevar en aquel beso.

━ ¿Vas a querer seguir jugando? ━la castaña rió.

━ No, Lisa, está bien ya aprendí. Ahora parémonos, ¿sí? mi cabello se está llenando de arena.

Lisa, se levantó, y le ofreció su mano a la castaña para ayudarla a pararse, y atraerla hacia ella para otro beso.

━ Vayamos adentro, hay que preparar la cena ━dijo la castaña cortando aquel beso.

Ambas se adentraron en aquella casa, y cada una se fue a duchar.

Horas antes, la castaña, había buscado a la rubia a la hora acordada. Una vez, habían llegado, la rubia no podía creerlo. Luego, de mirar la playa por un largo rato, fue dirigida por Jennie, quien se dedicó a darle un tour por toda la casa.

Ahora, se encontraban en la cocina, tratando de cocinar, bueno Jennie, ya que Lisa, solo la molestaba a cada rato para robarle besos.

━ ¡Lisa! si sigues interrumpiéndome, no tendremos cena ━exclamó la castaña, tratando de fingir molestia.