L. E. A.

181.

Estaba tan triste y vacía. En lugar de estar triste por el hecho de haber perdido a mi bebé, estaba desesperada porque me di cuenta de que nunca podría ganar su amor.

Me estresé ante este diagnóstico impactante del Sumo Sacerdote. Mis puños que sostenían la manta temblaban violentamente.

¿Qué dijo el Sumo Sacerdote hace un momento? Si tomara este veneno durante mucho tiempo, ¿qué me pasaría?

Mareos, náuseas, mala respiración e irritación. Cuando sentí estos síntomas, pensé que los sufría porque me había sobrecargado de trabajo.

Aunque el Sumo Sacerdote continuó parafraseando, ya no le escuchaba.

Recorrí todos mis recuerdos relacionados con estos síntomas como una loca.

Ahora que lo pienso, a menudo me desmayaba o me sentía mareada porque estaba débil, pero siempre me las arreglaba para controlar mis sentimientos. Sólo unos meses después de convertirme en la emperatriz sufrí estos síntomas de envenenamiento, ¡o a menudo me enfadé y me molesté!

'Oh mi...'

Pensé que la razón por la que sentía esos síntomas era porque me sentía resentida por su falta de atención, y porque Jiun seguía viniendo a mí y me molestaba. Pensé que la razón por la que tuve el aborto era porque trabajé demasiado y estaba débil, ya que era inherentemente débil.

Ahora, era posible que la verdadera razón fuera que estaba envenenada.

Me quedé sin palabras y aturdida. A menudo rompía en una sonrisa vacía. Como todas estas cosas habían sucedido en el pasado, no tenía forma de confirmar la verdad, pero me estremecí al pensar que tal posibilidad existía.

"¿Tía? ¡Tía! ¡Entra en razón!" dijo mi padre.

"Oh, supongo que se sorprendió por lo que dije ahora. ¿Está usted bien, Lady Monique?"

Apenas me recompuse ante la ansiosa llamada de mi padre y las palabras del Sumo Sacerdote. A medida que la conmoción disminuía, llegué a pensar en lo que pasó racionalmente.

'Déjeme dejar esto de lado por ahora. Todavía me estremezco al sólo pensarlo, pero lo que es más importante es el presente que las cosas del pasado que no puedes confirmar.'

Miré al Sumo Sacerdote seriamente y le dije con voz temblorosa, "Entonces, ¿no puedo tener un bebé?"

"No lo sé".

"¿Perdón? ¿Qué quieres decir con que no lo sabes?"

"Bueno... Marqués, ¿sabe que su esposa también había sido envenenada antes?"

"¿En serio? ¿Mi madre?"

¿De qué diablos está hablando?

Me sentí un poco mareada por eso. Cuando parpadeé impotente ante sus impactantes comentarios, mi padre dijo con un suspiro, "Sí, es verdad. Tu madre también fue envenenada".

"Oh mi..."

"En ese momento tu madre descubrió mucho más tarde que fue envenenada. Al principio, sus síntomas no eran tan notorios, y era difícil detectarlo porque era un veneno raro."

"..."

"Cuando me di cuenta de que estaba envenenada, ya era tarde. Si el Sumo Sacerdote no hubiera venido, tu madre probablemente habría perdido la vida."

Ahora sé por qué mi madre tardó siete años en darme a luz después de casarse con mi padre. Como escuché que no tenía buena salud, pensé que se había embarazado tarde.