parte 8

1.2K 82 25
                                    

El Señor Lee amaneció con el peor carácter que haya visto.

Siempre que despierta me da un beso de buenos días,pero ahora sólo me dio una mirada fría y sin expresión. En el desayuno ni siquiera me dirigió la palabra. Nada de nada. Recogí los platos y él se fue a su oficina. No lo seguí esta vez porque supuse que le molestaría.

Estuve el resto del día en la habitación de nosotros, no quise tener contacto con el Señor Lee. No sabía que hacer estando sola en aquella habitación tan grande.

-Señor Lee.- tocaba la puerta lo más suave posible. Fue difícil pararme frente a esa puerta y tocar en ella. Había una gran posiblidad de que el Señor Lee se molestara en vez de que me deje entrar como otras veces.

-¿Necesitas algo?- abrió la puerta. Con la misma expresión de antes. ¿Dónde está ese tono dulce que tanto me gusta?

-Quiero estar con usted.- intenté sonreír. Quise entrar a la habitación pero no me lo permitió.

-¿Por qué no vas a dormir?-

-No quiero. Me gustaría estar con usted.-

-Estoy ocupado.- antes de cerrar la puerta me dio un beso en mi mejilla.

Sin duda,este no es mi Señor Lee. Y no se podía hacer nada al respecto,ni siquiera quiere que esté a su lado,se aleja lo más que puede de mí. ¿Le hice algo? ¿Le dije algo malo? No logro entenderlo.

Quería salir de ahí,así que tomé el repuesto de las llaves del departamento para salir y tomar aire. Un diferente aire.

El recepcionista me saludó y preguntó si saldría sola, a lo cual asentía un poco insegura. Ya para irme me dijo que tuviera cuidado. Debo aclarar que no estaba del todo segura salir yo sola. Pero quería hacerlo por otra parte. Disfrutar del día que apenas iba a comenzar. Primero tomé dirección a la casa de mi mamá, quedaba un poco lejos de donde vivo ahora pero no lo suficiente como para que no pueda ir caminando.

Me sentía un leve nerviosa al caminar por las calles sin compañía de alguien, siempre estaba con una persona a mi lado. Es hora de crecer,¿No?

Mientras caminaba quería relajarme y dejar por un momento esos sentimientos con los que salí de casa. Dejar atrás el dolor de cabeza que el Señor Lee me provocó, como también la pesadez con la que desperté.

Estaba ya a unos minutos de llegar, antes pasé por una pequeña tienda y comprar algunas cosas. Seguí el camino que comencé. Estuve la mayoría del día en mi antigua casa, charlando con mi mamá que extrañaba a pesar de haberla visto hace pocos días, mi abuelita estaba feliz de verme otra vez. Las extraño mucho. Me hubiera gustado que mi padre estuviera en ese momento pero debía trabajar,qué mala suerte.

Eran las 8:49 cuando salí y tomé rumbo para el departamento. No quería volver y tener que ver al Señor Lee con su carácter. Fui con el cuidado que mi mamá dijo que tuviera. Me daba miedo salir de noche pero es que no había notado la hora, en ese caso me hubiera ido más temprano. Pensaba llamar al Señor Lee para que viniera por mí pero recordé que andamos molestos. Más bien era él. En fin.

Pude llegar sana y salva como quería,el departamento se encontraba en completo silencio. Supuse que el Señor Lee habría salido. No pasaron muchos minutos cuando este mismo llegó casi a par,con unas bolsas en sus manos.

-Señor Lee...- me imaginaba ser reprendida por salir sola y sin avisarle. Pero no esperaba que me besara cuando apenas me viera. Tomó mi rostro con la delicadeza que jamás haya sentido hasta este momento. Sus manos se sentían demasiado frías,y eso que aún no es invierno.

-Me preocupé por ti.- juntó nuestras frentes y cerramos los ojos. Ah,se siente como una novela.-¿Dónde estabas?-

-Fui a visitar a mi mamá. No tendría a donde más ir.- sonreí al terminar de hablar. Observé con detenimiento las bolsas que,cuando llegó,había dejado tiradas en el suelo.-¿Qué es eso?¿Me compró algo?- quise levantarlas pero él lo hizo primero.

-Sólo son víveres. Toma una ducha,tenemos que hablar.- me dio un casto beso para después irse a la cocina.

-¿Debo bañarme para que hablemos?- no quería hacerlo en este momento,en serio.

-Por favor,amor.-

-Bien. Cuando salga quiero la cena.-

-A tus órdenes.- reímos los dos antes de que me fuera a duchar.

Tomé la toalla para dirigirme al baño. El Señor Lee dijo que prefería que me desvistiera en el baño antes que la habitación,así no pasaremos situaciones incómodas,vaya que tuvo razón. No tuve mucha suerte cuando vi un espejo mediano en el cuarto de ducha. Como este era pequeño debía verme mientras me quitaba la ropa. Desde antes odiaba mi cuerpo por no ser lo delgado que quisiera,eso no significa que ahora lo ame. Sólo me pregunto,¿por qué le gusto al Señor Lee? La belleza es como si fuera mi peor enemiga,no podemos estar lo suficientemente cerca. Ah,pero el acné y yo somos y fuimos mejores amigos. Todavía es fecha en la que sufro de vez en cuando del acné. Es odioso. Si el Señor Lee tuvo oportunidad de escoger a alguien más bella,¿por qué me habrá escogido a mi?

Salí con la toalla envuelta y vestirme con mi pijama.

Fui lo antes posible a la cocina para quitarme las dudas sobre lo que quiere hablar el Señor Lee,me dejó pensativa durante el baño.

Lo que menos esperaba era una cena romántica.

-Debió avisarme que hoy era formal.-

Se acercó a mí para besarme nuevamente. No se cansa de hacerlo.

-Estás perfecta. Vamos,siéntate.- no merezco al Señor Lee. Es tan caballeroso.

-Señor Lee,esto no es necesario.-

-Lo es pero no lo suficiente.- servía vino para él y jugo de uva para mí. Lo amo.

-Bien. ¿De qué quiere hablar? Si es por lo de hoy en ese caso me gustaría dar mis argumentos. Señor Lee,yo lo amo mucho y quiero estar con usted,no estoy segura de lo que somos pero me gustaría que tuviera la confianza para decirme las cosas...-

-Quiero casarme contigo.-

Cielos.

Mejor no hubiera regresado.

Sun ° Lee Dong Wook °Where stories live. Discover now