"Preludio", Parte 5:

1.4K 74 33
                                    

Tenía en aquel momento 5 años de edad, me encontraba dentro de cierto establecimiento sumamente inmenso dividido entre 2 grandes zonas: La primera de ellas era totalmente desconocidas para quienes nos encontrábamos reunidos ahora, pero repleta de vidrios polarizados que conectaban a algún lugar más allá de nuestra visión.

Entre los lugares a los cuales podríamos acceder se encontraba nuestra gran habitación, donde cada uno de nosotros descansaba. Éramos exactamente 100 niños pequeños en aquel entonces...

Despertábamos a las 4:00 a.m exactamente y rápidamente nos dirigíamos hacia el espacio en donde podían encontrarse situados especialmente ubicados 100 escritorios junto con los materiales necesarios para nuestro proceso de aprendizaje. Al comenzar, tipos altamente reconocidos como genios en Japón se encargaban de dedicar y dictar nuestras tutorías mientras lanzaban preguntas sobre lo expuesto de manera constante y totalmente al azar entre nosotros. Pero, si se daba el caso de alguna respuesta incorrecta, aquel alumno sería inmediatamente golpeado de forma brusca por los miembros encargados, mientras los demás mirábamos con temor aquellos hechos.

Así, fue como cada uno de nosotros comenzó a evitar todo tipo de distracciones irrelevantes e innecesarias, y con el fin de evitar el sufrimiento, cada uno había decidido prestar una atención total incluso en contra de su propia voluntad

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Así, fue como cada uno de nosotros comenzó a evitar todo tipo de distracciones irrelevantes e innecesarias, y con el fin de evitar el sufrimiento, cada uno había decidido prestar una atención total incluso en contra de su propia voluntad.

Luego de terminar con ello, inmediatamente se nos brindaban todo tipo de exámenes relacionados a las temáticas mencionadas con anterioridad, los cuales resultaban sumamente complicados y difíciles para unos chicos tan pequeños como nosotros. Mientras los resolvíamos, éramos monitoreados directamente por algunos miembros pertenecientes a tal proyecto quienes merodeaban constantemente a nuestros alrededores con una mirada fija y penetrante que dirigían con condescendencia.

 Mientras los resolvíamos, éramos monitoreados directamente por algunos miembros pertenecientes a tal proyecto quienes merodeaban constantemente a nuestros alrededores con una mirada fija y penetrante que dirigían con condescendencia

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Dicha situación se repetía hasta las 2:00 p.m, donde se procedía a retirar nuestros avances para así ser enviados directamente a evaluación por los miembros especializados.

Nuestros descansos consistían en entradas monitoreadas hacia los baños, e incluso algunos 10 o 20 minutos antes de continuar con la segunda parte del adiestramiento.

Para ese momento, se podía notar un gran cansancio mental, estrés y agotamiento por parte de todos. Incluyéndome a mí, quien sentía una gran ansiedad y terror conjunto con mis compañeros. Mi sonrisa usual no se mostraba debido al gran miedo que comenzó a generarse en mi interior.

Revelación oscura:Donde viven las historias. Descúbrelo ahora